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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 02/09/2025 08:33
La espermidina, presente en alimentos comunes, se asocia con menor mortalidad y envejecimiento celular más lento (Imagen ilustrativa Infobae) Un compuesto natural presente en alimentos cotidianos surgió como un potencial aliado en la búsqueda de mayor longevidad, según resultados expuestos por Gary Brecka en el podcast Ultimate Human Podcast en YouTube. “La espermidina podría ser la clave para vivir más y mejor, sin depender de suplementos costosos”, aseguró Brecka en la entrevista. Diversos estudios de cohorte asociaron el consumo regular de espermidina con una disminución notable de la mortalidad y un envejecimiento celular más lento. Este nutriente, aún poco conocido, recibe cada vez más atención por su capacidad para promover una vida más larga sin necesidad de suplementos costosos o intervenciones dietéticas estrictas. Según Brecka, “pequeños cambios en la alimentación pueden generar grandes impactos en la salud a largo plazo”. Evidencias científicas sobre la espermidina Las investigaciones de cohorte analizaron el efecto de la espermidina en la longevidad durante largos periodos. Un estudio destacado en Italia, iniciado en la década de 1990, siguió a 829 participantes durante veinte años. El grupo que mantuvo un consumo más elevado experimentó alrededor de un 40% menos de mortalidad por todas las causas respecto a quienes incorporaban menos espermidina en su dieta. El especialista subrayó que no es necesario recurrir a suplementos costosos para obtener beneficios medibles en la salud (YouTube: Ultimate Human Podcast with Gary Brecka) Para confirmar estos hallazgos, los investigadores revisaron la cohorte Sapphire, formada por 1.770 personas. Incluso después de ajustar por nivel educativo, ingresos, salud general y hábitos alimenticios, la relación entre consumo de espermidina y longevidad permaneció firme. “Incluso al controlar otros factores, quienes consumían más espermidina vivían más tiempo”, relató Brecka en el podcast de YouTube. ¿Qué es la espermidina y cómo actúa? La espermidina, una poliamina presente en todas las células humanas, interactúa con el ADN para mantener su estabilidad. Con el paso de los años, los niveles disminuyen, lo que puede perjudicar la integridad genética y favorecer la acumulación de residuos celulares. Sobre este punto, Brecka afirmó: “La falta de espermidina acelera el envejecimiento y facilita la aparición de enfermedades crónicas”. Además de proteger el material genético, la espermidina activa la vía TAU, clave en la regulación del crecimiento, la reparación y el saneamiento celular, procesos esenciales para la regeneración y un envejecimiento saludable. Gary Brecka resaltó en el Ultimate Human Podcast la importancia de alimentos cotidianos como fuente de este compuesto - (Imagen Ilustrativa Infobae) “La vía TAU puede considerarse un mecanismo interno de limpieza y reparación, que mantiene el cuerpo funcionando de manera óptima”, explicó Brecka. Actualmente, tanto la producción endógena como la ingesta dietética de espermidina se redujeron en las últimas décadas. Brecka explicó en el Ultimate Human Podcast with Gary Brecka que la dieta moderna, particularmente en Estados Unidos, prioriza alimentos ultraprocesados y refinados, carentes de este compuesto presente de forma natural. El especialista advirtió que “el deterioro del microbioma y la comida ultraprocesada nos privan de nutrientes esenciales justo cuando más los necesitamos”. Alimentos ricos en espermidina y recomendaciones Champiñones, germen de trigo y legumbres aparecen entre los principales aportes de la dieta diaria (Imagen Ilustrativa Infobae) Pese a estos cambios en los hábitos, la espermidina se encuentra de manera accesible en diferentes alimentos de consumo habitual. Brecka señaló que los champiñones —especialmente los shiitake— se destacan como principal fuente. También los granos enteros, como el germen de trigo, salvado de arroz y avena, contienen cantidades significativas, siempre que no se trate de productos ultraprocesados. Las legumbres (entre ellas la soja) y vegetales verdes como el brócoli y las judías verdes suman al aporte. Por último, los alimentos fermentados, como el kimchi y el chucrut, favorecen la producción interna de espermidina por su impacto positivo en la flora intestinal. Para replicar los beneficios observados en los estudios, la recomendación es un consumo diario de 12 a 18 miligramos, equivalente aproximadamente a una taza de champiñones cocidos o dos cucharadas de germen de trigo. Brecka resaltó la alta biodisponibilidad de la espermidina, ya que el organismo puede absorber hasta el 80% de lo ingerido por la alimentación. “Incorporar alimentos ricos en espermidina de manera regular hace una diferencia medible en los marcadores de salud”, remarcó el experto. Investigaciones de cohorte en Europa y Estados Unidos vincularon el consumo de este nutriente con un menor riesgo de mortalidad (Imagen Ilustrativa Infobae) Algunas empresas ofrecen suplementos de este compuesto, aunque la evidencia sobre si igualan los beneficios que se logran por vía alimentaria todavía es insuficiente. Por ahora, el mayor respaldo científico se orienta hacia la dieta rica en espermidina como estrategia preventiva. Fácil acceso y potencial preventivo Según Brecka, la principal fortaleza de la espermidina reside en su accesibilidad y en la posibilidad de incorporarla a través de simples ajustes en la alimentación diaria. “No hace falta cambiar toda la dieta: basta con sumar champiñones o germen de trigo para notar mejoras”, señaló Brecka. La ciencia valida que estos cambios pueden incorporarse con facilidad y mínimo gasto económico, aportando herramientas útiles para quienes desean favorecer su bienestar cotidiano.
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