01/09/2025 07:09
01/09/2025 07:07
01/09/2025 07:02
01/09/2025 07:01
01/09/2025 07:00
01/09/2025 07:00
01/09/2025 07:00
01/09/2025 06:59
01/09/2025 06:59
01/09/2025 06:57
Concordia » Hora Digital
Fecha: 01/09/2025 02:13
Referentes de espacios culturales clave en Concordia, como Pueblo Viejo, el Teatro Odeón, Costa Chaval, La Cigarrera y Arandú, coinciden en un diagnóstico: la ciudad tiene una vida cultural vibrante y diversa, pero carece de una política cultural activa que la integre en la agenda turística municipal. A pesar del dinamismo y la calidad de las propuestas, el turismo local se concentra en la costanera, las termas y el lago, dejando de lado un potencial económico y de desarrollo que, según los protagonistas, "está tirado a la basura". Juan Pablo, del centro cultural Pueblo Viejo, lamenta el escaso aprovechamiento de la oferta cultural. "La mayoría de nuestras visitas son locales. Tenemos en el debe la visita de turistas… Muy raro", señala. Y sin rodeos, afirma: "La ciudad (municipio) no saca provecho de estas cosas… Nunca lo hizo. Es una fuente turística más tirada a la basura". Esta percepción es compartida por Sergio Ríos, director del Teatro Odeón, quien destaca que Concordia siempre ha sido una buena plaza teatral, atrayendo público de localidades vecinas e incluso de Salto, Uruguay. A pesar de esto, la falta de integración en la promoción turística es evidente. Desde la noche, Daniel, socio de Costa Chaval, refuerza la idea: "El turismo no termina de mirar hacia acá". Para él, la vida nocturna y cultural podría ser un motor económico si existiera una articulación real con el municipio. El problema de fondo, según los entrevistados, no es la falta de propuestas, sino la ausencia de una estrategia que las potencie. Desde el espacio cultural La Cigarrera, que se sostiene a base de "autogestión y resistencia", critican la inacción: "La política pública es prácticamente inexistente. No hay una planificación ni una estrategia para que el arte y la cultura estén ligados al desarrollo local". Su principal "talón de Aquiles" es la difusión, que impide que propuestas de gran valor lleguen a un público más amplio. En Arandú, donde la cultura se entiende también como una herramienta educativa y de transformación social, remarcan la misma necesidad de apoyo estatal. "Si todo recae en la autogestión, tarde o temprano los proyectos se agotan", advierten, subrayando que las ganas y los artistas están, pero falta la estructura para sostenerlos. DespertarEntrerriano
Ver noticia original