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» Misioneslider
Fecha: 30/08/2025 09:56
Vecinos y comerciantes preocupados por la fuga de gas en Palermo A más de 24 horas de la impactante fuga de gas provocada por una retroexcavadora en el cruce de la avenida Juan B. Justo y Paraguay, en Palermo, los vecinos y comerciantes de la zona continúan preocupados por el fuerte y persistente olor a gas que emana del lugar. Aunque Metrogas asegura que la situación está «totalmente controlada», el aroma y los cortes de tránsito mantienen en vilo a un área de alto movimiento. La fuga, que movilizó un gran operativo de emergencia que incluyó a bomberos, policía y personal del SAME, se produjo el miércoles durante trabajos de repavimentación en la traza del Metrobus. La perforación de un caño de media presión de acero encamisado generó un géiser de gas que, durante horas, mantuvo la tensión en el lugar. La rotura obligó a evacuar preventivamente a varios comercios y viviendas linderas. En una farmacia ubicada en la esquina de Paraguay y Juan B. Justo, las empleadas Valeria y Elida atienden con la puerta cerrada para evitar que el olor a gas invada el local. «El olor es insoportable. Es más fuerte ahora que hace una hora, cuando abrimos», cuenta Valeria. Elida relata el momento de la explosión: «Estábamos trabajando y vimos cómo una de las excavadoras pinchó el caño. De repente sentimos una explosión, y desde arriba comenzaron a caer pedacitos de material». Ambas aseguran que, al principio, creyeron que se trataba de un chorro de agua por la presión. «Empezamos a bromear… hasta que abrimos la ventana, ahí sentimos el fuerte olor a gas, y nos asustamos«. Estuvieron media hora más y les pidieron evacuar. El olor sigue presente, pero ellas deben continuar trabajando. «La verdad es que nos preocupa porque no sabemos si nos hace mal, o si puede pasar algo otra vez», agrega Carina. A 40 metros de la farmacia, sobre Juan B. Justo, del otro lado de Paraguay, Pedro custodia un estacionamiento y también quiere irse a su casa. «Estoy esperando que se lleven el único auto que hay acá guardado para irme. La verdad que no me quiero quedar acá. ¿Sentís el olor a gas que hay?». Carmen, una médica que atiende en la zona, confiesa su preocupación: «Cuando llegué y olí el gas, me quería ir. Pero bueno, me dijeron que me quedara, que no pasaba nada. Pero la verdad que con lo que pasó ayer, te quedas preocupada». Los locales de Paraguay, entre Humboldt y Juan B. Justo, continuaron cerrados toda la mañana y la mayoría reabrió cerca del mediodía este jueves. Los vecinos que viven allí también amanecieron con ventanas cerradas. De hecho, algunos edificios fueron evacuados el miércoles. «No puedo salir al balcón por el olor a gas que hay –comenta Patricia, que vive en diagonal a la fuga–. Hay olor dentro de mi casa y no puedo ventilar, porque no puedo abrir las ventanas». Si bien sabe que la situación está controlada, algo de preocupación le queda. «No es bonito estar en tu casa y sentir olor a gas todo el tiempo«, agrega. Trabajos de reparación en curso Los equipos de Metrogas continúan trabajando en el lugar donde se produjo la rotura. Pasadas las 9.30 de la mañana, se mantenía un «venteo» de gas totalmente controlado, ya que se realizó el prensado del caño afectado mediante la utilización de dos prensas hidráulicas de la empresa. Este proceso, explican, no se puede realizar de manera total para evitar posibles fisuras en otros sectores del caño de media presión, y es lo que provoca la persistencia del olor. «Durante la jornada de hoy y mañana el equipo de alta presión de la empresa se va a encargar de colocar y soldar las piezas de obturación y realizar los cortes del caño dañado para su reparación», indicaron fuentes de la empresa. La tarea es particularmente delicada, ya que el caño cruza la avenida Juan B. Justo y pasa sobre el entubamiento del arroyo Maldonado. Por cuestiones de seguridad, la zona de trabajo se encuentra vallada por disposición de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. Responsabilidades y medidas preventivas En cuanto a las responsabilidades, desde Metrogas aseguraron que cumplieron con las normativas y habían entregado a la empresa contratista del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires los planos con la ubicación exacta de los caños. Esta es una práctica habitual para prevenir daños. De hecho, el lunes pasado, personal de la compañía supervisó in situ el avance de las obras junto a los responsables de la contratista del GCBA. En este sentido, es fundamental que se sigan los protocolos de seguridad y se tomen todas las medidas preventivas necesarias para evitar situaciones como la ocurrida en Palermo. La seguridad de los trabajadores, vecinos y comerciantes debe ser prioritaria en cualquier obra o intervención que se realice en espacios públicos. En conclusión, la fuga de gas en Palermo ha generado preocupación y tensión en la zona, afectando la rutina de vecinos y comerciantes. Si bien se están llevando a cabo las tareas de reparación correspondientes, es importante que se refuercen los controles y medidas de seguridad para evitar incidentes similares en el futuro. La colaboración entre las autoridades, las empresas responsables y la comunidad es fundamental para garantizar la tranquilidad y bienestar de todos los involucrados.
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