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» La Capital
Fecha: 25/08/2025 23:48
Durante una hora, 120 toneladas de tomates maduros serán protagonistas de uno de los festivales más curiosos y divertidos de Valencia Miles de personas bañarán el municipio valenciano de Buñol de rojo con pulpa de tomate este miércoles, cuando dispute la famosa "guerra de tomates", la Tomatina. Durante una hora, todo lo que esté en la calle (personas, edificios, autos) quedarán teñidos de rojo, sepultados por 120 toneladas de tomates muy maduros que servirán de munición para unas 22.000 personas, cuyo único objetivo será acertar la mayor cantidad posible de tomates sobre los demás participantes. Los asistentes no locales, que pagan 15 euros por participar, llegan a la localidad de Valencia desde países de todo el mundo o de otras ciudad españolas. Todos los que alguna vez hayan estado en medio de esa "divertida e ingenua guerra" lo definen de la misma manera: "Es una nube de tomates". 2025-08-25 tomatina 2 2025-08-25 tomatina 3 Hay varias versiones sobre los inicios de la curiosa celebración. Algunos historiadores sostienen que empezó como una broma, cuando le arrojaron tomates a un cantante en la plaza del pueblo y todo terminó en una batalla campal. Otros dicen que fue un personaje que "importó" la idea de Zaragoza. La versión más fiable marca sus comienzos en 1945, cuando a un grupo de jóvenes le impidieron participar de un desfile de Gigantes y Cabezudos, y los marginados respondieron arrojando los tomates del puesto de un verdulero que estaba en la plaza. El año siguiente se repitió la escena, aunque los "atacantes" ya iban preparados con una buena provisión de tomates. La Policía, alertada sobre lo que iría a ocurrir, intentó (con poco éxito) detener la contienda, situación que se repitió cada año, cada vez con un espíritu más lúdico. Franco contra los tomates Ya convertida en una tradición anual, la Tomatina fue prohibida brevemente en la década de 1950 por el dictador Francisco Franco, lo que provocó las protestas de los locales. En la década de 1980 se transformó en un evento nacional, que terminó por atraer público de distintos países. Desde 2002, cuando España reconoció oficialmente el festival como atracción turística, la Tomatina solamente se suspendió en 2020 y 2021 debido a la pandemia de coronavirus. Los tomates que se arrojan no proceden de cultivos tratados, como los que se utilizan para la alimentación. El teniente alcalde de Buñol, Sergio Galarza, explicó que se cultivan exclusivamente para el festival: “Si la Tomatina no existiera, los tomates no se cultivarían porque no harían falta". Reglas simples No hay equipos, ni puntos, ni árbitros, y las reglas no escritas tienen apenas dos incisos: hay que aplastar los tomates antes de arrojarlos para evitar lesiones, y no se puede lanzar cualquier otra cosa que no sea un tomate. Muchos participantes se protegen con antiparras de natación y tapones para los oídos. El irlandés Adrian Columb recuerda que uno de sus amigos terminó con los dos ojos morados, “pero es bastante alto, así que tal vez fue un blanco fácil", justificó. 2025-08-25 tomatina 4 Embed - La tomatina 2024 en España - N+ La lluvia de proyectiles deja a los asistentes “sumergidos hasta los tobillos en este puré de tomate,” dijo Columb, quien asegura que es una hora de ejercicio extremo: "Acabas reventado". El final llega con un cañonazo, tras el cual la multitud se dirige a las duchas comunitarias cercanas para lavarse, mientras que las calles de la ciudad se limpian con mangueras. Por lo general la ropa queda completamente arruinada, pero el ácido cítrico de los tomates actúa como un eficaz agente limpiador en el pavimento. Tres o cuatro horas después, las calles suelen quedar más limpias que antes.
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