25/08/2025 16:25
25/08/2025 16:25
25/08/2025 16:25
25/08/2025 16:24
25/08/2025 16:24
25/08/2025 16:24
25/08/2025 16:24
25/08/2025 16:23
25/08/2025 16:22
25/08/2025 16:21
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 25/08/2025 10:36
La primera ronda del US Open dejó un polémico encuentro que tuvo como protagonista a Daniil Medvedev, el umpire y a un camarógrafo. El ruso cayó ante el francés Benjamin Bonzi por 6-3, 7-5, 6-7 (5), 0-6 y 6-4, en un partido que se extendió por 3 horas y 45 minutos. El duelo estuvo marcado por constantes enojos del exnúmero 1 del ranking ATP, quien destrozó su raqueta una vez consumada su derrota. Uno de los momentos más recordado e insólitos de la noche en el estadio Louis Armstrong se produjo cuando un fotógrafo, creyendo que el partido había concluido, ingresó al court para cambiar su ubicación cuando Bonzi servía con match point en el tercer set. Esta irrupción provocó un parón de seis minutos y desencadenó una serie de protestas por parte del público y, principalmente, del propio Medvedev. El juez de silla, Greg Allensworth, decidió que el francés repitiera el primer servicio, lo que desató la furia del tenista ruso de 29 años. El público, mayoritariamente a favor del ruso, coreó “segundo saque, segundo saque” y abucheó al árbitro, mientras el propio Medvedev gesticulaba hacia las tribunas en señal de agradecimiento por el apoyo recibido. La furia de Medvedev al destrozar su raqueta La tensión escaló aún más cuando Medvedev increpó al umpire con dureza: “Él quiere irse a casa, chicos, no quiere estar aquí. Le pagan por partido, no por hora. ¿Eres un hombre? ¿Por qué estás temblando?”, acusándolo de favorecer a su rival para acelerar el desenlace. Incluso evocó críticas previas del estadounidense Reilly Opelka, quien había calificado a Allensworth como “el peor juez de la ATP”. “¿Qué es lo que Opelka siempre dice?”, gritó en reiteradas ocasiones. En medio de la confusión, Bonzi también se dirigió al juez para reclamar por la actitud de su oponente, mientras el público mantenía la presión con sus cánticos. Vale remarcar que el incidente con el fotógrafo tuvo consecuencias inmediatas: según The Athletic, el reportero fue despojado de sus credenciales y expulsado del estadio. Tras la reanudación, el ruso logró salvar el match point, quebró el servicio de Bonzi y se adjudicó el tercer set en el tiebreak. El cuarto parcial fue un monólogo de Medvedev, que lo ganó por 6-0, lo que hacía prever una remontada épica. Sin embargo, en el quinto set, el francés solicitó atención médica, recuperó un quiebre clave y cerró el partido por 6-3, 7-5, 6-7 (5), 0-6 y 6-4, asegurando su pase a la segunda ronda. La frustración de Medvedev se manifestó al final del encuentro, cuando destrozó su raqueta al golpearla en reiteradas oportunidades contra el banco. Más tarde, en conferencia de prensa, anticipó una sanción: “Espero una fuerte multa”, aunque se permitió ironizar sobre su desempeño: “Fue divertido de ver. Estoy jugando mal y en los momentos importantes, peor. Solo necesito mejorar y lo intentaré el próximo año”. El momento en el que Medvedev destrozó su raqueta contra el banco, una vez finalizado el encuentro (REUTERS/Eduardo Munoz) “No estaba molesto con el fotógrafo. No creo que pasase nada en especial. Cada vez que hay un sonido desde las gradas entre los servicios, nunca hay un segundo saque. Pero bueno, me ayudó a volver al partido. Fue un momento divertido de vivir. No estaba molesto con el fotógrafo, estaba molesto con la decisión del juez de silla”, remarcó Medvedev en la conferencia de prensa posterior a la derrota, según destacó el portal AS. En esta misma línea, argumentó: “En un momento le pedí al público que parasen con las protestas, pero no lo hicieron. Pensé, ‘vamos a controlarlos para que paren’, pero no querían parar. Así que poco más podía hacer. Hubo un parón de seis minutos, pero cuando llevábamos tres minutos parados Bonzi tuvo un momento en el que podía sacar, y luego un tipo silbaba y no servía. Es su problema. El retraso del fotógrafo fue probablemente de cuatro segundos y medio. No estoy seguro de que fuera suficiente para un segundo servicio”. Por su parte, Medvedev concluyó con su análisis puntualizando en la mala gestión por parte del umpire: “En mi cabeza, lo habría hecho peor, pero no puedo porque hay reglas y porque estamos en una pista de tenis. Así que solo expresé mis emociones, mi descontento con la decisión, y luego la multitud hizo lo que hizo sin que yo les pidiera demasiado. No hice nada malo. Yo no retrasé el partido, fue el público. Les lancé gestos de corazones porque me encantan. Me encanta Nueva York. Ellos hicieron el trabajo, yo hice nada y ellos empujaron a volver al partido”. El fuerte cruce de Medvedev con el umpire que terminó con el ruso pidiendo los abucheos con mayor vehemencia por parte del público (REUTERS/Eduardo Munoz) Por su parte, Bonzi no ocultó su emoción al describir el ambiente vivido: “Era un ambiente salvaje. Intenté mantenerme tranquilo, pero no fue fácil. Dejé todo mi corazón en la pista”. El triunfo representó la victoria más significativa de su carrera, y la tercera vez que derrota a Medvedev en un Grand Slam, habiéndolo hecho previamente en Roland Garros y Wimbledon. En el plano deportivo, la eliminación de Medvedev en la primera ronda de un Grand Slam se repite por tercera vez consecutiva, profundizando una de las temporadas más difíciles para el exnúmero uno del mundo. Su única excepción en 2025 fue el Australian Open, donde logró superar el debut. El próximo rival de Bonzi será Marcos Giron, quien venció al argentino Mariano Navone en cinco sets.
Ver noticia original