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» La Capital
Fecha: 25/08/2025 03:18
Ángel Di María hizo un gol histórico como antes en la selección argentina. Volvió a Central, su casa, a su primer amor y se regaló el máximo triunfo. Ángel Di María está en la historia gloriosa de la selección argentina. Anotó los goles más importantes de la albiceleste de los últimos años y se convirtió en un ejemplo de perseverancia y resiliencia ante las máximas dificultades que puede enfrentar un jugador, como las críticas despiadadas y las lesiones en momentos determinantes. Pero el pibe que iba a entrenar en bicicleta a Central llevado por su mamá en una sillita nunca dejó de pedalear. Así ganó con la selección mayor dos copas América y el Mundial de Qatar 2022. Y este sábado se convirtió en el primer jugador de la historia de Central en jugar un clásico siendo vigente monarca mundial. Durante el partido no logró desequilibrar aunque nunca dejó de intentar. Y cuando Darío Herrera cobró la falta lejos del arco leproso sólo él creyó que podía inventar esa parábola fabulosa para la pelota. Leer más: Central otra vez se hizo gigante en el clásico de la mano del más gigante de todos: Ángel Di María La obra maestra de Ángel Di María Se plantó frente al balón como si estuviese jugando en un potrero, se olvidó del marco y que el clásico se consumía en empate. Fideo sacó el latigazo extraordinario que se colgó del ángulo izquierdo de Juan Espínola y lo que sobrevino fue el delirio de todo el Gigante. Éxtasis. Di María lo hizo de nuevo. Volvió a su casa, a su primer amor y se regaló el máximo triunfo que siempre soñó. “No me falta nada, sólo ser campeón con Central”. Y ojo que cuando Ángel sueña, sueña en serio. Ahora se recibió de ídolo canalla.
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