23/08/2025 19:59
23/08/2025 19:57
23/08/2025 19:56
23/08/2025 19:56
23/08/2025 19:55
23/08/2025 19:55
23/08/2025 19:55
23/08/2025 19:54
23/08/2025 19:54
23/08/2025 19:54
Parana » Informe Digital
Fecha: 23/08/2025 15:41
ROSARIO.- El presidente Javier Milei optó por apartar los problemas urgentes que enfrenta su gobierno, tras los allanamientos realizados este viernes en la causa por presuntas coimas en el área de Discapacidad, y centró su discurso en conceptos económicos que habitualmente despliega con una perspectiva puramente técnica. También se adentró en la contienda electoral de octubre al señalar que, ante el riesgo de los próximos comicios, aumenta la tasa de interés. “En un año electoral, los inversores se asustan porque enfrente están los kukas”, señaló y agregó: “Hemos decidido ingresar al ciclo electoral con una mayor ortodoxia fiscal”. El borrador del discurso que filtró el vocero Manuel Adorni en las redes sociales anticipaba el tono que tendría la presentación de Milei, cuya visita a Rosario estuvo marcada por la tensión de una manifestación que se llevó a cabo a pocos metros de donde se encontraba el Presidente. Durante el aniversario de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que reúne anualmente a los principales actores del sector agroindustrial argentino, el mandatario eligió abordar la “volatilidad de la tasa de interés” y aspectos técnicos del tipo de cambio. Luego, en su extenso discurso, Milei explicó las razones detrás del aumento de la tasa de interés, vinculándolo con el riesgo electoral y advirtiendo que “del otro lado están los kukas, los degenerados fiscales”. En esta ocasión, la atención sobre el Presidente se vio intensificada por el escándalo que afecta al gobierno tras los avances en la causa que involucra a Diego Spagnuolo, ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), quien fue objeto de un allanamiento cuando salía en su camioneta de su casa en el barrio Altos de Campo Grande, en Pilar. Durante el procedimiento, los investigadores requisaron su inmueble, sus vehículos y le secuestraron dos teléfonos celulares, documentos y una máquina de contar billetes. Milei, acompañado de su hermana Karina, que se encontraba en el auditorio de Rosario, esquivó referirse a este tema acuciante que alteró el estado de ánimo de su gestión, utilizando el estrado de la Bolsa de Comercio para exaltar los recientes “logros” de su gobierno. “Nuestro enfoque es de equilibrio general. No todos los sistemas de ecuaciones son de equilibrio. Lo primero que hay que entender es cómo sería una economía sin dinero. Sería una economía de trueque. Hay dos dificultades que pueden llegar a eliminar los intercambios, lo cual puede generar malestar”, reflexionó el presidente, explicando la evolución de los intercambios a lo largo de la historia de la humanidad, como el uso de trigo o sal: “De ahí proviene la tradición de que cuando se cae la sal, trae mala suerte”. “La demanda de dinero es un reflejo de lo que ocurre en el mercado de bienes”, advirtió y mostró una fórmula en una pantalla, que escribió utilizando una tablet y un lápiz óptico. “La verdadera demanda de dinero depende del consumo. Es fundamental para entender qué es la tasa de interés”, añadió. Milei intentó ofrecer una clase de economía a un auditorio que, según diversas fuentes, esperaba que el Presidente hiciese apreciaciones sobre las últimas turbulencias de la economía. En lugar de exponer un discurso sobre la política económica, Milei prefirió impartir una clase magistral que generó cierto descontento entre varios dirigentes empresariales, quienes incluso interpretaron en voz baja que parecía una provocación. No hizo referencia al sector agropecuario, un escenario clave de la BCR. “La inflación ha dejado de escalar del 17.000 por ciento al 20 por ciento. Ahora se comprende por qué el señor Toto Caputo es considerado el mejor ministro de Economía del mundo. Lo logramos porque erradicamos el déficit fiscal de raíz. Hicimos en el primer mes de gestión lo que no se había hecho en 123 años. Además, saneamos el balance del Banco Central. Demostramos que la inflación es un fenómeno monetario”, subrayó el presidente. “La inflación continúa disminuyendo. Algo que gusta tanto a los políticos, ya que no se manifiesta de manera instantánea. Si uno inyecta dinero hoy, el impacto se siente entre un año y medio y dos. Por eso a los políticos les resulta tan entretenido votar cualquier tipo de disparates y generar déficit fiscal, ya que, al final, lo paga un tonto dentro de dos años”, declaró Milei, quien añadió que “la economía ha estado creciendo durante cinco trimestres”. “Existen dos tipos de políticos. Los libertarios y los orkos, los kukas. Tienen un candidato en la provincia de Buenos Aires que recita a (Karl) Marx. Ese modelo no me gusta. Si enfrente están los sodomitas del capital, ¿cuánto creen que vale la tasa de interés? Es el fin del mundo. La consecuencia natural, ante la proximidad de un escenario electoral como el que se presenta en octubre y el 7 de septiembre, es muy clara: la tasa de interés tiene que dispararse, porque del otro lado están los kukas”, afirmó el Presidente. Luego, Milei lanzó duras críticas al peronismo bonaerense, que, según él, jugará con candidatos testimoniales en las elecciones del 7 de septiembre. “Esa elección será un techo para el kirchnerismo. Si logramos ganar por un voto, será el último clavo para enterrar a los K”, sostuvo. La llegada de Milei a la Bolsa de Comercio rosarina alteró el ritmo de la ciudad. El dispositivo de seguridad cortó varias calles alrededor del edificio donde habló. Se estableció un operativo de seguridad extremo y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) montó un escáner móvil para requisar a los invitados y periodistas. Desde la llegada de Milei al edificio de Paraguay y Córdoba, nadie podía entrar ni salir, ya que las puertas permanecieron cerradas hasta que el Presidente abandonó el lugar. Antes de la intervención de Milei, en el amplio salón de la Bolsa rosarina, hablaron el gobernador santafesino Maximiliano Pullaro, el intendente Pablo Javkin y el titular de la BCR, Miguel Simioni. Pullaro criticó a Milei por la falta de obras públicas en las provincias: “Deben hacerse cargo de las rutas nacionales. No podemos hablar de logística si no tenemos caminos en condiciones. Esperamos que el equilibrio fiscal sea superado por políticas de desarrollo. Todos coincidimos en que el populismo no volverá nunca más, pero necesitamos un acuerdo político con sensatez que incluya un pacto productivo a largo plazo. Requerimos votos en el Congreso y no vetos”. El gobernador recordó cuando la Bolsa de Comercio rosarina se involucró en la llamada “pacificación” de Rosario, tras una serie de crímenes que paralizaron la ciudad hace poco más de un año. “Somos invencibles, y siempre lo fuimos, como hace 200 años con el brigadier Estanislao López. Santa Fe produce 25 de cada 100 dólares que se exportan”, aseguró el gobernador. Simioni, por su parte, ofreció su último discurso como presidente de la entidad, que cumplió 141 años, y revisó los avances logrados en los últimos cuatro años. “Es necesario acordar una agenda de crecimiento, pero no debemos esperar que todas las condiciones provengan del Estado”, apuntó. “Hacia adelante, también enfrentamos el desafío de avanzar en las obras de infraestructura. Confiamos en que tanto el proceso de licitación de los ferrocarriles como los corredores viales anunciados por el gobierno nacional puedan concretarse a la brevedad, para reforzar nuestra competitividad. Como siempre, esta Bolsa estará a disposición: como espacio de encuentro con los usuarios y poniendo al servicio del país la experiencia y el compromiso de nuestros equipos técnicos”, agregó. El intendente de Rosario, por su parte, insistió en que “en este país debemos dejar de lado la porteñocracia. Necesitamos un país que no comience a las 10 de la mañana. Somos defensores del desarrollo, que se alcanza cuando están dadas las condiciones básicas, como arreglar rutas”.
Ver noticia original