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Parana » El Once Digital
Fecha: 30/07/2025 14:30
El argentino Franco Colapinto encara con entusiasmo un nuevo desafío en el circuito de Hungaroring, donde este fin de semana disputará su octava carrera en la máxima categoría del automovilismo mundial. Aunque los resultados todavía no lo acompañaron en esta etapa inicial dentro de la élite, el joven piloto se mantiene firme y confiado en poder revertir la tendencia, especialmente en un trazado que le trae gratos recuerdos de su etapa formativa. El historial reciente del pilarense en suelo húngaro le permite mirar con optimismo esta nueva cita. Tanto en la Fórmula 3 como en la Fórmula 2 logró actuaciones destacadas, incluyendo podios y buenas clasificaciones, lo que renueva sus esperanzas para este fin de semana. Confianza pese al presente del equipo A pesar del momento adverso que atraviesa su escudería, Colapinto se muestra decidido a cerrar esta etapa del calendario con un desempeño competitivo y que marque una evolución en pista. En la antesala del Gran Premio, el argentino reflexionó sobre su reciente participación en Spa-Francorchamps, donde finalizó anteúltimo tras un inicio complicado: “Pese a las dificultades, hubo avances. Estamos muy cerca de mejorar algunos aspectos clave. Son detalles, pero estoy convencido de que vamos por buen camino”, expresó. También valoró el punto conseguido por su compañero de equipo y el esfuerzo colectivo: “Fue valioso para todos. Eso también nos motiva”. Proyección y trabajo para lo que viene Con apenas 22 años, el bonaerense demuestra madurez y determinación: “Este circuito me gusta y tengo buenos recuerdos. Quiero aprovechar cada vuelta y ayudar al equipo a cerrar bien esta parte del año”, afirmó con claridad sobre su objetivo inmediato. Mientras el resto del paddock se prepara para el receso de mitad de temporada, Colapinto ya piensa en lo que viene: se enfocará en Países Bajos e Italia, y viajará a la sede del equipo para continuar con su preparación física y técnica. Aunque el monoplaza que conduce todavía está lejos del nivel competitivo necesario, el argentino mantiene la fe intacta. Hungría aparece como una oportunidad para mostrar su potencial, capitalizar la experiencia y sembrar confianza de cara al segundo tramo del campeonato.
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