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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 29/07/2025 10:33
Una de las imágenes elegidas por Emilia para graficar el sentido texto que compartió (Instagram) Emilia Mernes hizo mucho más que publicar un mensaje en su cuenta de Instagram, compartió un sentido texto dirigido a sus fans: una profunda reflexión sobre su nuevo trabajo discográfico y un grito abierto contra la perfección impuesta. “No hay forma de ser perfectas. La perfección no existe, es algo inalcanzable que nos hicieron creer que teníamos que ser, en especial a nosotras, las mujeres”, escribió, al destacar en voz alta lo que tantas prefieren callar. ¿Cuántas veces la presión ajena se impone como una mochila imposible de soltar? Las palabras se suceden, y con cada frase la cantante continúa desmontando las exigencias imposibles que la rodean: “Me dijeron que soy un producto, que solo sirvo para ser linda, que tengo que estar siempre hot, pero no tanto…” Las críticas se multiplican en sus mensajes privados, en los comentarios de sus fotos, en las miradas fugaces o en las sentencias anónimas de las redes. “Que tengo que tener los mejores números, que no escribo mis canciones, que tengo que hacer otra música, que tengo que decir tal cosa, tal otra, pero no así. Que me tengo que vestir de cierta manera, mostrar menos, mostrar más, no tener errores, no enojarme, no ponerme triste, no sentirme mal”, enumeró. ¿En qué momento alguien se creyó capaz de decidir tanto sobre una persona? Emilia, con el tono firme, reconoce una verdad que pesa: “Me dijeron mil veces lo que tenía que ser y hacer... y a veces, hasta me lo creí”. Hay un nudo en el estómago para quien lee. ¿Es posible no dudar de una misma cuando el entorno lo repite una y otra vez? El texto es parte de su nuevo trabajo, Perfectas, en el que da por tierra con muchos de los pensamientos a su alrededor Este nuevo EP, entonces, surge como un acto de rebeldía y autenticidad. “Con este EP hice lo que quise, lo que sentí. Exageré todo. Me burlé, me fui a lo más irónico, y aun así, las exigencias continuaron”. La descripción no deja lugar a dudas: los parámetros externos nunca se conforman, pero la decisión personal sí puede transformar la mirada interior. Dejó entonces caer las etiquetas sin nostalgia: “No soy un robot, ni un maquillaje perfecto ni un maniquí de pasarela. Sí, me encanta ese juego de diva pop y no voy a dejar de hacer la música que me gusta con la estética que me gusta, pero todo eso no me define”. Toma así distancia de los espejismos de la industria y se acerca, una vez más, a su versión más genuina. “Me cansé de leer críticas vacías, me cansé de que me digan lo que tengo que hacer. La perfección que dicen que yo vendo, en realidad, es la que ellos pretenden, y no existe. Porque no voy a dejar de equivocarme, no voy a dejar de cambiar, no voy a dejar de crecer”. ¿Qué queda al final del día? Un ejercicio de autoestima que le demandó esfuerzo, según admitió: “Me costó un montón, pero aprendí a decirme cosas lindas y a seguir haciendo lo que me gusta, más allá de las expectativas de los demás”. No son palabras al aire: es una victoria interna, una resistencia cotidiana. Invita, casi implora, a quienes la leen: “Sigan intentando ser felices siempre y hagan lo que les gusta, aunque quieran convencerlas de que no son suficientes o ‘perfectas’ para eso, se los digo y me lo digo: no busquemos afuera lo que hay dentro nuestro”. Emiñia no dudó en referirse a cómo se siente con los comentarios externos En el cierre, la voz de Emilia suena íntima pero expansiva: “‘Perfectas’ es una canción que hice a flor de piel, desde lo más profundo de mi corazón. Y si a una sola persona su mensaje le sirve, a mí ya me alcanza. Los amo. Emilia”. Así las cosas, luego de causar furor con el lanzamiento de “Pasarella”, en colaboración con SixSex, y revelar la estética visual de su próximo EP, “Perfectas”, la intérprete sorprendió a sus fans al destacar este texto en el que dejó en claro que transformó la vulnerabilidad en bandera y la música en escudo.
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