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  • Orgullo: otra vez un jujeño es integrante de una misión de paz de Cascos Azules

    Parana » ViaParana

    Fecha: 19/07/2025 20:35

    Eduardo Raúl Maizares es cabo principal infante de marina, tiene 37 años y hace 15 que integra la institución. Llegó desde El Aguilar, un pueblito de Humahuaca, provincia de Jujuy, al pie de los cerros, y hoy es parte del contingente argentino que cumplirá su Misión de Paz en Chipre. El pasado 4 de julio se realizó en la Base de Infantería de Marina Baterías (BNIM), situada en la localidad Coronel Rosales, provincia de Buenos Aires, la ceremonia de despedida del contingente que forma parte de la Fuerza de Tareas Argentina LXVI (FTA66), y que se desplegará en Misión de Mantenimiento de la Paz de Naciones Unidas en la República de Chipre (UNFICYP) los próximos seis meses. Entre ellos estaba el cabo principal infante de marina (IM) Eduardo Raúl Maizares. Cabo principal infante de marina (IM) Eduardo Raúl Maizares, el aguilareño que integrará una misión de Cascos Azules en Chipre. El contingente realizó actividades y capacitaciones en el Departamento de Instrucción y Evaluación de la IM en Baterías, y luego de su paso por el Centro Argentino de Entrenamiento Conjunto para Operaciones de Paz (CAECOPAZ) en Buenos Aires, viajará a Chipre el mes próximo. EL APORTE ARGENTINO A LA PAZ El acto de despedida fue presidido por el comandante de la IM, contraalmirante Javier Pedro López, quien dijo al personal en formación: “Heredan una tradición de eficiencia representada por el prestigio de quienes los precedieron, lo cual permitió alcanzar el reconocimiento de las Naciones Unidas y de la comunidad chipriota hacia nuestra Fuerza”. La Argentina aporta Cascos Azules a la UNFICYP desde 1993, misión que fue establecida por la ONU el 27 de marzo de 1964, para evitar que se reanude la lucha entre las comunidades grecochipriota y turcochipriota que se enfrentaron por una disputa territorial. El mandato de Naciones Unidas es el de prevenir la reanudación de las hostilidades, contribuir a mantener y restaurar la ley y el orden, supervisar el cese del fuego y sostener una Zona de Amortiguación entre las partes en conflicto; también llevar a cabo actividades humanitarias. El cabo Maizares es infante de marina y compone una patrulla que se desplegará a Chipre en cumplimiento de una misión de paz de las Naciones Unidas. “Me siento ansioso, me gusta la experiencia y espero lo mejor”, expresó el cabo Maizares. “El entendimiento de la misión es mantener la paz y custodiar la Zona de Amortiguación. Vamos a compartir esta misión con otras Fuerzas argentinas y Fuerzas Armadas del mundo”, adelantó el infante de Marina, quien en sus 15 años de carrera es la primera vez que viajará a Chipre. “Participé en la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (MINUSTAH) en el 2013, y a Chipre voy por primera vez” y será para integrar una patrulla que hará “observación y vigilancia”, completó con entusiasmo. UNA VIDA SIGNADA POR LA VOCACIÓN DE SERVICIO Eduardo Raúl Maizares ingresó a la Armada Argentina en el 2010 con 22 años, y allí conoció la IM. Se incorporó siguiendo el consejo de su papá Raúl, a quien le gusta todo lo referido a las Fuerzas e hizo el Servicio Militar Obligatorio en el Ejército Argentino (EA). “Mi padre me contó muchas anécdotas que hicieron que ingresara con ganas en la Fuerza y sienta orgullo de pertenencia”, destacó. “Me gusta la operatividad, el combate, el adiestramiento y la exigencia física; también la importancia de defender a la Nación me atrajo y llamó mi atención. Me gusta pertenecer a la IM, es orgullo, vocación y dedicación. Hay valores que uno trae de casa y muchos que los incorpora acá como el espíritu de cuerpo, la integridad, lealtad, eficiencia, ejemplo y sacrificio, grandes valores se adquiere en la Armada y más aún en la Infantería de Marina, que es el puño armado de la Fuerza”, acentuó. “Heredan una tradición de eficiencia representada por el prestigio de quienes los precedieron", dijo al personal en la despedida el contraalmirante Javier Pedro López. Sus compañeros infantes lo llaman “el Maiza” y él sonríe mientras dice que tiene amigos en todos lados y están orgullosos de su labor en la Armada, así como su familia que sigue viviendo en Jujuy. “Soy oriundo de un pueblito en Humahuaca, se llama El Aguilar -se encuentra a unos 350 kilómetros de la capital jujeña-. El pueblo se fundó junto a una empresa minera justamente llamada El Aguilar y las primeras casas fueron las de los mineros y empleados de la empresa. Mi papá trabaja como administrativo”, relató. “Recuerdo con mucho cariño mi pueblito natal. Es chiquito y se extraña la tranquilidad, estar en familia y su gente, siempre atenta y amable. Viajo cada vez que puedo”, contó. El cabo Maizares hizo la primaria en la escuela nº 339 “Juan Ignacio Gorriti” de El Aguilar, donde practicaba fútbol, básquet y vóley: “Recuerdo a un profesor de Educación Física que era de Gendarmería Nacional y nos entrenaba muy bien”, afirmó. El secundario lo terminó en el Bachillerato Provincial nº 12 en Humahuaca. Efectivos se despliegan en el sector argentino de la Zona de Amortiguación, al oeste de Nicosia, la capital chipriota. Confiesa que siempre fue muy inquieto, por eso estudiaba y trabajaba desde los 15 años. Luego del secundario comenzó a estudiar Administración de Empresas e Informática hasta que ingresó a la Armada. Es el único de sus hermanos en la institución; otros dos están en el Ejército y el restante estudiando. Sus destinos fueron la Escuela de Suboficiales de la Armada, el Batallón de Infantería de Marina nº 3 (BIM3) en la ciudad de Zárate, y el Batallón de Infantería de Marina nº 5 (BIM5) en Tierra del Fuego. UN JUJEÑO EN MISIÓN DE PAZ “Hoy me encuentro destinado en la Dirección de Personal de la Armada en la ciudad de Buenos Aires, y ahora en comisión para cumplir esta misión. Durante mis años en el BIM3 navegué en el multipropósito ARA ‘Ciudad de Rosario’ realizando ejercicios anfibios en el río Paraná, y destinado en el sur embarqué en varias oportunidades en el aviso ARA ‘Islas Malvinas’ donde tuve la oportunidad de conocer la Isla de los Estados en el 2018”, recuerda con afecto. Los efectivos argentinos ocupan puestos de observación y bases de patrulla en territorio chipriota. Allí flamea la Bandera celeste y blanca. Cerca de 250 argentinos, de un total de más de mil efectivos, son parte de UNFICYP, que constituye la principal Misión de Paz argentina en términos de cantidad de efectivos desplegados, y en la que se destaca, año tras año, una mayor presencia del personal de la Armada Argentina. Allí desempeñan funciones en las áreas de operaciones logísticas y humanitarias, e Infantes de Marina se despliegan en el sector argentino de la Zona de Amortiguación, al oeste de la ciudad chipriota de Nicosia, ocupando puestos de observación y bases de patrulla. Asimismo, proveen de efectivos para la reserva de la FTA, y la reserva permanente en el puesto Comando de la UNFICYP. El contingente realizó actividades y capacitaciones en el Departamento de Instrucción y Evaluación de la Infantería de Marina en Coronel Rosales, cerca de Bahía Blanca. Mantener “un clima pacífico” dentro del cual se pueda arribar a una solución justa y duradera a los problemas de Chipre, requiere operar con Fuerzas de otras nacionalidades y efectuar patrullas terrestres y aéreas, tanto en períodos de normalidad como en períodos de crisis, para verificar posibles violaciones a los acuerdos, cambios en el orden de batalla e incidentes que puedan quebrantar la situación de cese de fuego (movimientos de tropas, vuelos de aeronaves, aperturas de fuego, incendios de campos, etc.). También revisten importancia las operaciones de contención de manifestantes y la pronta solución a los posibles incidentes generados por ellos. (*) Coordinadora de mar adentro de “Gaceta Marinera”, desde la redacción en Puerto Belgrano, provincia de Buenos Aires.

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