17/07/2025 07:43
17/07/2025 07:43
17/07/2025 07:43
17/07/2025 07:42
17/07/2025 07:41
17/07/2025 07:41
17/07/2025 07:39
17/07/2025 07:33
17/07/2025 07:32
17/07/2025 07:31
» El Ciudadano
Fecha: 16/07/2025 18:59
Cuando muere la reina de un hormiguero, la colonia entera enfrenta una crisis existencial. Sin su única reproductora, el destino del hormiguero parece sellado. Sin embargo, la naturaleza desarrolló fascinantes mecanismos de resiliencia que desafían las expectativas. 1. El colapso inmediato: ¿fin de la colonia? La reina es el corazón del hormiguero: es la única encargada de poner huevos y asegurar nuevas generaciones de obreras, soldados y futuras reinas. Tras su muerte, las obreras dejan de recibir feromonas reguladoras, lo que desencadena un período de desorganización. Sin nuevas crías, la población comienza a disminuir irreversiblemente. 2. Plan B: estrategias de emergencia En algunas especies, como las Ooceraea biroi (hormigas clonales), las obreras pueden poner huevos no fertilizados que generan réplicas genéticas de sí mismas, prolongando temporalmente la vida de la colonia. Otros hormigueros recurren a: Adopción de reinas jóvenes : En especies poligínicas (con múltiples reinas), las obreras pueden integrar una reina sustituta de otra colonia. Fusión con hormigueros vecinos: Algunas hormigas obreras se unen a colonias cercanas para sobrevivir, aunque pierden su identidad original. 3. El caso excepcional de las «hormigas zombi» En especies parasitadas por hongos (Ophiocordyceps), la muerte de la reina puede acelerar el colapso, ya que el hongo manipula a las obreras para dispersar sus esporas, desestabilizando aún más la estructura social. 4. ¿Lecciones para la inteligencia colectiva? Los estudios sobre hormigueros sin reina revelan patrones similares a sistemas artificiales: desde redes de comunicación que se degradan hasta la autoorganización extrema en ciertas especies. Esto inspira algoritmos de resiliencia en robótica y gestión de redes.
Ver noticia original
 300 x 300 px.gif)
Examedia © 2024
Desarrollado por