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Parana » Uno
Fecha: 05/07/2025 10:35
Directivos de comedores de Concordia precisaron sobre la modalidad de ‘tarjeteros’ que le habían impuesto desde la coordinación que es investigada. Desde los comedores escolares de Concordia indicaron que los manejos habían impedido la elección del menú. En Concordia continúan las repercusiones y todas las semanas se conocen nuevas modalidades que se operaba en el manejo de los fondos destinados a los comedores escolares, por el cual se estima que hay una faltante que supera los 100 millones de pesos en pocos meses de este año. Cabe destacar que desde el Ministerio de Desarrollo Humano de la provincia de Entre Ríos se ordenó una auditoría para determinar las responsabilidades por el cual 37 comedores presentaban irregularidades y sobre esta causa el peso recae sobre la ex coordinadora del área en la Capital del Citrus, Silvina Murua, a quien se le allanó la vivienda en la pasada semana. Directivos de comedores escolares de Concordia, recientemente emitieron un comunicado del cual se desprende la modalidad por la que fueron impuestos en los últimos tiempos. Desde el área de Gestión Social del Ministerio de Desarrollo Social de Entre Ríos habían indicado hace pocos días que cada establecimiento, que tiene un comedor en su escuela, se le asignaba una tarjeta Sidecreer y a esas tarjetas se le incluía un fondo mensual para que se compren los alimentos y los cocineros allí los elaboren. Sobre este aspecto normativo y administrativo indicaron que “desde que la señora Silvina Murúa asumió la coordinación de Comedores Escolares, se inició un proceso de retiro de tarjetas Sidecreer a los directivos escolares, para ser entregadas a personas designadas como ‘tarjeteros’, sin mediar irregularidades previas ni resolución administrativa que lo justifique”. Los seis titulares de comedores coincidieron en que “esta práctica vulnera el espíritu del sistema descentralizado de administración de comedores escolares, establecido por el Ministerio de Desarrollo Humano de Entre Ríos, que asigna a cada establecimiento educativo la responsabilidad de gestionar los fondos mediante la tarjeta Sidecreer. Al verse despojados de las tarjetas muchos directivos han presentado los reclamos y quejas correspondientes a sus superiores sin recibir respuestas ni revertir la situación”. “La situación de desplazar a los directivos por ‘tarjeteros’ es inédita, no se ve respaldada por ninguna normativa vigente, y por el contrario desconoce o tergiversa lo expresado en ella”, agregaron. Cabe destacar que la firma del comunicado está compuesto por los titulares de los comedores de la UENI N°3 Primeros pasos, la rectora de la Escuela Secundaria N° 23 República Oriental del Uruguay, la rectora de la Escuela Secundaria N° 8 Don Augusto Niez, la directora Escuela N°6O General Manuel de Olazabal, la rectora de la Escuela Secundaria N° 22 Mariano Moreno y el rector de la Escuela Secundaria N°4 Damián Pedro Garat de Villa Adela. Silvina Murúa Concordia Comedores.jpg Silvina Murúa, la ex responsable de la coordinación en Concordia. Sobre el manejo de los comedores en Concordia Al mismo tiempo, remarcaron que “desde el Convenio Marco firmado entre el Ministerio de Desarrollo Social (hoy Capital Humano) y el Consejo General de Educación firmado en 2022 sobre el funcionamiento de los comedores escolares se expresa: ‘El personal directivo de cada establecimiento educativo tendrá a su cargo la administración de los bienes y recursos financieros asignados por el Estado Provincial al servicio’”. De esta manera, los firmantes precisaron que ello trajo como consecuencia “los directivos perdieron el control sobre el uso de los fondos públicos asignados, además se les impidió decidir sobre el menú, proveedores y personal del comedor, como también en algunos casos, se les prohibió el ingreso a la cocina escolar, lo que contradice el rol institucional que históricamente han cumplido”. Además de solicitar por el esclarecimiento y hacia dónde se desviaron los más de 100 millones de pesos, también apuntaron contra Murúa. “Lejos de resolver los problemas estructurales que afectan a los comedores escolares –como la falta de personal, conflictos gremiales y deficiencias logísticas–, su gestión introdujo nuevas irregularidades: cambios compulsivos de proveedores; presuntos sobreprecios y facturación inflada; falta de rendiciones claras y documentación respaldatoria”. Por su parte, los directivos manifestaron su descontento ante la situación del personal de cocina con ‘fueros gremiales’. “Esta normativa garantiza que los delegados gremiales y trabajadores con fueros no pueden ser trasladados, despedidos ni modificados en sus condiciones laborales sin autorización judicial. Sin embargo, en la práctica, esta protección ha sido utilizada como escudo para evitar cualquier tipo de reorganización o mejora en el funcionamiento de los comedores, generando tensiones con los directivos que no tienen potestad para intervenir ante situaciones de incumplimiento o falta de colaboración”, finalizaron.
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