04/07/2025 05:26
04/07/2025 05:26
04/07/2025 05:25
04/07/2025 05:21
04/07/2025 05:21
04/07/2025 05:21
04/07/2025 05:20
04/07/2025 05:20
04/07/2025 05:20
04/07/2025 05:19
» Misionesopina
Fecha: 03/07/2025 13:22
La Municipalidad de Posadas y el Honorable Concejo Deliberante avanzan en una reforma profunda del Código de Edificación Urbanístico, que incorporará un régimen específico de sanciones a profesionales y ciudadanos que incumplan las normativas vigentes. El objetivo es ordenar el crecimiento urbano de la ciudad y dotar al municipio de herramientas concretas para garantizar la seguridad, legalidad y habitabilidad de las construcciones. El proyecto, impulsado por el presidente del HCD, Jair Dib, junto al concejal Héctor Cardozo, introduce un cambio estructural en la forma en que se controlan y sancionan las irregularidades edilicias. En diálogo con Primera edición, Cardozo explicó que la reforma busca, por primera vez, facultar al municipio a intervenir de manera directa cuando un profesional presenta proyectos que no se ajustan a la normativa y avanza en obras sin autorización. “Hasta ahora, el control disciplinario sobre los profesionales estaba exclusivamente en manos de los colegios respectivos –arquitectura, ingeniería, etc.–. El municipio solo podía notificar irregularidades, pero no tenía margen para aplicar sanciones directas. Muchas veces esas sanciones no llegaban. Por eso, con este nuevo régimen, el municipio podrá restringir, por ejemplo, la presentación de nuevos planos por parte del profesional, además de imponer sanciones monetarias”, explicó el edil. En el caso de los ciudadanos que inician obras sin declaración previa, también se aplicarán sanciones administrativas desde la Municipalidad. La idea es que tanto los actores privados como los profesionales comprendan la importancia de cumplir con la normativa desde el inicio, evitando la lógica de "construir primero y regularizar después", que se había naturalizado en los últimos años. La nueva reglamentación establece, además, que si un arquitecto o ingeniero incurre en una infracción técnica o ética dentro de un proyecto edilicio, no solo podrá ser sancionado por su colegio profesional, sino también por el municipio en el marco de su relación operativa con el Estado local. Así, Posadas da un paso importante hacia una mayor responsabilidad compartida en la planificación y el desarrollo urbano. Cardozo aclaró que el espíritu del nuevo código no es restrictivo, sino organizativo: “Buscamos mejorar la calidad de vida en la ciudad, no limitar la libertad de construir. Pero para eso, necesitamos reglas claras, previsibilidad y responsabilidad de todas las partes involucradas”. Por otro lado, desde el 30 de junio ya no están vigentes las ordenanzas 304 y 309, que ofrecían beneficios y descuentos para la regularización de construcciones no declaradas. Según el secretario de Planificación Estratégica del municipio, Marcelo Mazur, apenas entre un 10% y un 12% de los aproximadamente 500 edificios con irregularidades aprovecharon este régimen transitorio. Los expedientes iniciados antes de esa fecha seguirán su curso, pero quienes no se hayan acogido a esas herramientas ya no podrán acceder a las facilidades que ofrecían. En este contexto, el nuevo Código de Edificación busca cerrar ese ciclo de informalidad y falta de controles, instalando un esquema más riguroso, transparente y participativo. Desde el Concejo Deliberante señalaron que la actualización también será puesta en debate con todos los sectores vinculados al desarrollo urbano: colegios profesionales, desarrolladores, constructoras y vecinos. La intención es que el crecimiento de Posadas esté acompañado por una normativa moderna, que incentive el cumplimiento de la ley, garantice calidad y seguridad en las construcciones, y ponga fin a prácticas que, por omisión o permisividad, contribuyeron al desorden urbano.
Ver noticia original