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Gualeguaychu » Reporte2820
Fecha: 26/06/2025 17:54
Escribe Ricardo Luciano. El sur de nuestra provincia, más precisamente en la zona Delta Del Paraná o Complejo Litoral Inferior, particularmente en Villa Paranacito, Islas del Ibicuy y Victoria se caracteriza por tener una importante superficie de humedales alrededor de 17.000 Km2, o 1.700.000 hectáreas, o 17.000.000.000 de metros cuadrados. Este sistema de humedales incluye áreas con geoformas de origen marino desarrolladas a partir de procesos de ingresión y regresión marina durante el período Holoceno Medio -6000 años antes del presente-. En nuestra provincia tienen la responsabilidad de su cuidado el CORUFA; la secretaría de Ambiente; Hidráulica; Secretaría de Industria, Comercio y Minería; Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca; poseemos en la provincia profusa normativa protectoria: Art. 22 y 85 de la Constitución provincial, leyes Nº Nº10479 y 8967 Áreas Naturales protegidas; Nº8534 Endicamientos, Ley de Aguas Nº9172; Decreto Nº4977/09; decreto Nº2474/18 entre otros. A nivel nacional hemos suscrito numerosos tratados protectorios del medio ambiente, como lo es La Convención sobre los Humedales, conocida como la Convención de Ramsar (ciudad de Irán), la misma es un acuerdo internacional que promueve la conservación y el uso racional de los humedales, contando actualmente en Argentina con 23 sitios designados Humedales de importancia internacional -sitios RAMSAR- Palmar Yatay en Entre Ríos, pero como siempre ocurre en nuestro país en general y en particular en nuestra provincia, las autoridades responsables borran con el codo lo que escriben con la mano, hoy es alarmante la embestida que tienen en su contra los humedales por la acción sin control de empresas y particulares, llevando a que cada día tengamos menos. Por más que declamen otra cosa en nuestra provincia adolecemos históricamente de voluntad política de nuestros gobernantes para cumplir con la normativa vigente que los insta a proteger los humedales, las autoridades responsables poco y nada hacen para resguardar además de los humedales, a ríos y arroyos, es solo cumplir con la normativa vigente, más, muchos de los que nos gobernaron y gobiernan tienen endicamientos y barrios náuticos en lugares prohibidos. Importancia de los humedales Los humedales contribuyen de modo decisivo al bienestar humano al desempeñar funciones de las cuales se derivan múltiples beneficios. Diversidad biológica. Muchas especies de flora y fauna silvestres dependen completamente de los humedales. Amortiguación de las inundaciones. Los humedales desempeñan un papel importante en el control de las inundaciones. Pueden actuar como esponjas, al absorber el agua de las lluvias y las crecientes de los ríos, y permitir que se filtre más lentamente a través del suelo y la vegetación, reduciendo con ello la velocidad y el volumen del agua que fluye aguas abajo. Mitigación y adaptación al cambio climático. Los humedales desempeñan funciones críticas en la mitigación del calentamiento global. Abastecimiento de agua. Los humedales retienen y almacenan agua, disponible para consumo humano, producción y sostenimiento de la vida silvestre. Valores culturales. Como proveedores de agua y muchos otros bienes y servicios, la población se ha asentado históricamente en zonas de humedales, desde los pueblos originarios hasta la actualidad, desarrollando un rico y diverso patrimonio cultural. Muchos humedales son sitios de gran relevancia arqueológica e histórica. Provisión de alimentos, materiales y medicinas. Los humedales generan gran variedad de productos de plantas, animales y minerales que son utilizados por personas de todo el mundo. Estabilización de costas y protección contra tormentas. Las marismas salobres y otros humedales costeros sirven como primera línea de defensa contra las tormentas, reduciendo el impacto de las olas; mientras que las raíces de las plantas fijan los sedimentos y retienen nutrientes. Recreación y turismo. La belleza natural y la diversidad de la vida animal y vegetal de muchos humedales hacen que sean lugares de destino turístico y recreativo muy apreciado. En muchos casos permiten generar ingresos a economías regionales y son sitios de relevancia para desarrollar actividades de educación ambiental. Nadie duda de la importancia que tienen los humedales, pero son agredidos por la mano del hombre sistemáticamente, esto provoca en los mismos contaminación, modificación de los ecosistemas, y en el peor de los casos que desaparezcan. A lo informado por el que suscribe en innumerables publicaciones sobre el accionar depredador de las areneras y plantas de lavado de arena de sílice, otra de las actividades antrópicas que modifican y mucho a los humedales, ríos y arroyos son los Endicamientos y Terraplenes, los mismos son realizados en su mayoría sin un estudio previo y menos con la autorización correspondiente, sólo con un fin económico particular de quién los realiza sin importar las consecuencias dañosas que traiga. Estudios realizados por WETLANDS Internacional, determinaron que en Entre Ríos existen 1.579,3 kilómetros cuadrados de áreas Endicadas. El mismo estudio determinó que existen 4.955,02 kilómetros lineales de terraplenes. Algunos escépticos se preguntarán cuál es el daño que los mismos generan, es sencillo de explicar, los ríos, arroyos y humedales que se encuentran en la zona puntualizada se fueron formando sabiamente por la naturaleza, como se detalla Ut Supra con una antigüedad de más de 6.000 años, que, al modificarse los cursos de cualquier arroyo o río por el efecto de los endicamientos o terraplenes cambia indefectiblemente lo que la naturaleza determinó sabiamente como debía ser, donde se obstruye un río o arroyo por un endicamiento o terraplén genera que el agua de los mismos derive en otro sentido, inundando lugares donde antes no sucedía, generando daños al ecosistema, modificando el hábitat de la flora y fauna autóctona. La abundante publicidad oficial engaña a los distraídos cuando informan que hicieron esto o aquello, la realidad es otra, sólo es eso publicidad, los funcionarios responsables vienen muy detrás de los acontecimientos, sólo actúan cuando quedan en evidencia por la denuncia de algún particular como es mi caso Barrio Náutico La Venecia de Entre Ríos ubicado en el ejido de Villa Paranacito, o cuando el daño provocado por su accionar indolente es evidente e irreversible. Lo que no podrán evitar es que deban rendir cuenta por la responsabilidad que tienen y, de alguna u otra manera, hacerse cargo de los daños ambientales producidos por su inacción.
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