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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 26/06/2025 06:44
La maestra aseguró que trabajaba en la institución hace diez años Una docente de La Plata, identificada como S.A., denunció haber sido víctima de agresiones verbales, acoso y amenazas por parte de un grupo de madres de la Escuela Primaria N° 92 “América” de Gorina. Aparentemente, los ataques comenzaron a principio de año, pero la situación habría escalado con el paso del tiempo. Según contó la maestra, todo comenzó en una reunión que se había organizado con las familias. A pesar de que se suponía que debía participar como titular del grado, contó que las autoridades de la institución le recomendaron no formar parte, debido a que varias madres habían pedido que no estuviera presente. “En ese momento recibí difamaciones, mentiras y ataques de cuatro madres enojadísimas, desbordadas, con palabras que no corresponden a una reunión”, recordó la mujer al indicar que los supuestos motivos presentados por las madres habrían sido falsos. Durante una entrevista que brindó para El Día, S.A. apuntó que el grupo que denunció por hostigamiento habría inventado un supuesto conflicto con un alumno. “No tuve nunca un conflicto con ningún alumno y han involucrado cosas de mi vida personal”, aseguró al destacar que los ataques también se extendieron hacia su familia. “Luego de la reunión escuché audios que me llegan con amenazas, advirtiéndome que iban a ir a tirar piedras a mi casa y me dicen: ‘Mejor que se cuide esa loca’”, recordó la docente. De la misma manera, apuntó que habrían utilizado una situación de su vida personal para extorsionarla. Varios gremios docentes se reunirán en la Plaza Moreno a partir de las 10 horas En línea con esto, la maestra explicó que “lo utilizaron para hacer cierto seguimiento, casi una extorsión y llegaron a agredir a mi hija, por ser ‘la hija de la maestra’”. Por este motivo, afirmó que tuvo que cambiar de colegio a la menor para poder preservar su integridad. A pesar de que la mujer aseguró que llevaba una década de trabajo en la institución, expresó que no fue acompañada por los directivos, debido a que le habrían formulado actas en su contra a raíz de las quejas de las madres, sin que ella pudiera participar de las reuniones y defenderse. “No soy la única maestra que se sintió perseguida desde la institución”, sentenció S.A. al remarcar que “hubo situaciones graves que se han repetido en el colegio y hubo cambio de alumnos de colegios por agresiones físicas a docentes”. La denuncia de la maestra del nivel primario coincidió con el paro de docentes secundarios de La Plata, que este jueves se movilizarán en contra de los hechos de violencia que fueron sufridos por los docentes en el último tiempo. Por este motivo, el lema que nucleará al movimiento será “La violencia no entra a la escuela”. Según confirmaron desde el medio local 0221, la convocatoria será a las 10:00 horas en la Plaza Moreno, ubicada en pleno centro platense, en donde participarán varios gremios docentes. Asimismo, la medida fue anunciada producto de un episodio ocurrido en la escuela Normal N° 2. En esa oportunidad, una madre agredió físicamente a una preceptora y a la vicedirectora del establecimiento, además de amenazar al secretario. El incidente fue denunciado ante las autoridades y provocó una fuerte reacción por parte de los trabajadores de la educación. El paro fue convocado por el último ataque sufrido por docentes en el Normal N° 2 Recientemente, también se había reportado una situación similar en la Escuela Secundaria N° 1 “Manuel Belgrano”, en donde los docentes aseguraron que un grupo de familiares los habían agredido. Durante el ataque, resultó golpeada una preceptora y la directora del instituto. El hecho ocurrió el pasado 14 de mayo, cuando los padres ingresaron a una escuela ubicada en la intersección de las calles 9 y 38 para increpar al personal docente y a los preceptores. La comunidad educativa repudió el episodio y reclamó medidas urgentes para garantizar condiciones seguras de trabajo y estudio. Según informaron los docentes del establecimiento, las situaciones de violencia entre estudiantes se repetirían cada semana y, en ocasiones, las peleas obligaron a requerir la presencia policial. A pesar de la gravedad de la situación, señalaron que no hubo respuestas por parte del inspector ni orientaciones claras para abordar el conflicto. En un comunicado, consideraron que esta situación es el resultado de un ataque sostenido hacia la escuela pública y al cuerpo docente. Además, denunciaron un proceso prolongado de desfinanciamiento del sistema educativo estatal.
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