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» Elterritorio
Fecha: 26/06/2025 00:25
Desde la defensa de Gustavo Cardozo, principal sospechoso del homicidio, insisten en que se impugne la autopsia realizada pero tampoco aceptaron que el juez interviniente sume un perito de parte a la causa. Para la querella y la familia de la docente es inminente que el imputado sea trasladado a un penal y esperan que se haga la reconstrucción del crimen miércoles 25 de junio de 2025 | 21:30hs. Pasaron cuatro meses de aquel llamado telefónico que horrorizó y marcó de forma irreparable a la familia de Soledad Machuca. La docente posadeña fue atacada en su vivienda en el barrio Acaraguá un 25 de febrero caluroso. A ese día le siguieron otros, dolorosos pero fervientes y marcados por el pedido de justicia y esclarecimiento de su femicidio, que a la fecha tiene como principal sospechoso a quien era su pareja, Gustavo Cardozo -agente de la policía cesanteado-. En un nuevo aniversario de su fallecimiento, la querella del caso insiste en que hay pruebas suficientes en contra del ex policía para dictarle prisión preventiva. Medida que, a esta altura de la instrucción, todavía no existe. “Entendemos que se produjeron todas las pruebas, que no hay mucho más que hacer que esperar pero, a 25 de junio, no tenemos novedad de la preventiva y consideramos que hay elementos suficientes”, ratificó Nancy Jara, abogada querellante en la causa que se tramita en el juzgado N° 3 de Fernando Verón. La letrada anticipó a El Territorio que, de no haber novedades para fines del corriente mes, presentarán un nuevo pedido de encarcelamiento para el imputado. Esa medida, reconoció, permitirá que también se resuelva la situación procesal de la madre de Cardozo, acusada e imputada formalmente por ser partícipe del femicidio. Entre las recientes novedades en el expediente, este medio pudo saber que la defensa del ex agente policial se negó a que el juez Verón incorporara un perito de parte. Movimiento que podría entenderse contradictorio al considerar que fue la defensa quien solicitó, días atrás, que se rehaga la autopsia y se impugne el informe vigente. Cuatro meses de pruebas En un primer momento, y como viene informando asiduamente El Territorio, la investigación estuvo marcada por la citación formal de decenas de testigos que pasaron por la sede del juzgado sobre la calle Santa Fe para aportar sus versiones sobre los momentos previos y posteriores a la muerte de Soledad. En paralelo, se pidieron informes de autopsia, pruebas de luminol y muestras genéticas que vincularon de forma directa a Cardozo con el crimen: en las marcas de violencia en el cuerpo de la mujer había ADN compatible con el hombre. La seguidilla de pruebas forjó y construyó un expediente extenso y, para la querella, sólido en pruebas, por lo que preocupa a la parte afectada la falta de la prisión preventiva y el traslado de Cardozo a una cárcel. Al respecto, Jara señaló que “insistimos en la preventiva para quedarnos tranquilos, sobre todo por la carga que arrojó el informe pericial psicológico de él”. Ese informe concluyó que el acusado del femicidio de Machuca posee una conducta de evasión y ocultamiento por temor a ser descubierto. Sostuvo que “con lo que ya hay acreditado en el expediente existe mérito suficiente para darle la preventiva”. Jara afirmó que no pedirán nuevas pruebas y “esperamos a ver si se hace la reconstrucción del hecho”. Mientras se espera que eso se resuelva, desde el equipo jurídico pronosticaron que la investigación podría finalizar pronto. Aunque todavía no hay fechas confirmadas por la Fiscalía. “La causa entró en una meseta” Desde la demanda, compartieron estar conformes con la investigación realizada hasta la fecha. A pesar del cúmulo de pruebas, Jara observó en diálogo con este medio que “la causa entró en una meseta, que es normal en estos procesos”. Sin embargo preocupa que, a cuatro meses del femicidio de Soledad, el juez interviniente no dispuso la prisión preventiva para el acusado principal. “Se produjeron demasiadas pruebas, pero cuatro meses es mucho tiempo dada la cantidad de pruebas que tiene Cardozo en su contra”, ratificó la abogada que acompañó la observación hecha por la defensa de que “la autopsia oficial no pudo confirmar el horario de muerte”. Pero, además de ese dato, “creemos que hay más pruebas” que complican al ex policía.
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