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» Diario Cordoba
Fecha: 22/06/2025 17:08
Un hombre de 58 años de edad falleció ayer sábado en Córdoba después de sufrir un golpe de calor. En esta línea, desde la Consejería de Salud indican que Salud pública ha confirmado la muerte de esta persona, que estaba siendo asistida en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Reina Sofía. Se trata de la primera muerte por golpe de calor registrada en 2025 en Andalucía, según precisan desde el Gobierno regional. La víctima fue ingresada ayer sábado y murió por la noche. Por el momento, no ha trascendido más información sobre cómo se deterioró el estado de salud de esta persona o las circunstancias en las que se produjo el golpe de calor. Sí ha trascendido que era vecino de la capital. En el primer día de verano Esta muerte ha tenido lugar en el primer día de verano, cuando los termómetros alcanzaron unas máximas de 40,4 grados en la estación de Córdoba Aeropuerto. De este modo, la información de la Agencia Estatal de Meteorología indica que la de ayer sábado fue la tercera jornada consecutiva con las máximas por encima de los 40 grados en la capital. Hoy domingo y mañana lunes Córdoba vuelve a estar en alerta naranja por la posibilidad de llegar a 40 grados centígrados. La Consejería emite una nota La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía emitió una nota a última hora de la tarde del domingo en la que detalló que el fallecido "había estado trabajando en la colocación de un cartel luminoso en la calle. Es el primer fallecimiento por golpe de calor esta temporada en Andalucía", reiteró la nota. "Desde la activación del Protocolo Andaluz de Coordinación frente a los efectos de las Temperaturas Excesivas sobre la Salud el pasado 16 de mayo se han registrado ocho casos de pacientes que han sufrido golpes de calor en la comunidad, de los que cuatro han requerido ingreso hospitalario. Estos casos se han producido en las provincias de Huelva, Sevilla, Almería, Cádiz (2), Jaén y dos en Córdoba (uno es el fallecido)", siguió detallando la información oficial de la Consejería de Salud y Consumo. Hasta el 30 de septiembre permanecerá activo el Protocolo Andaluz de Coordinación frente a los Efectos de las Temperaturas Excesivas sobre la Salud 2025, que se activó el 16 de mayo, y en el que participan más de media docena de Consejerías. Dicho protocolo, trata de reducir el impacto sobre la salud asociado al incremento de la temperatura estival y a posibles olas de calor, con especial atención a los colectivos más vulnerables. Así, la estrategia del protocolo se basa en la predicción de olas de calor a partir de la información facilitada por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) y el establecimiento de niveles de alerta según el grado de riesgo por exceso de temperatura; la identificación de los grupos de población más vulnerables a los efectos del calor, y la coordinación con las distintas administraciones y entidades públicas y privadas competentes para identificar, seguir y atender a los grupos de riesgo, y para implementar medidas preventivas correspondientes en cada sector. Las poblaciones dianas son las personas mayores de 65 años, los enfermos crónicos, las personas que toman un medicamento que pueda influir en la adaptación del organismo al calor como diuréticos, hipotensores, antidepresivos, neurolépticos, anticolinérgicos y tranquilizantes; los menores de cuatro años y los lactantes y personas con trastornos de la memoria, con dificultades en la adaptación al calor y que consumen alcohol y drogas. Otras personas que se pueden ver especialmente afectadas por el calor son aquellas que viven solas, sin hogar, con condiciones económicas desfavorables, con exposición excesiva al calor por estancia en centros educativos, por razones laborales, como trabajo manual en el exterior o con elevado contacto con ambientes calurosos, o por practicar deportes de gran intensidad física o actividades de ocio especialmente entre las 14 y las 19 horas. Recomendaciones a la población Para afrontar las altas temperaturas, Salud y Consumo recomienda evitar en la medida de lo posible la exposición directa al sol en las horas centrales del día; y si hay que salir, hacerlo con la máxima protección; usar ropa ligera, colores claros, sombrero, gafas de sol, crema solar; mantener un buen nivel de hidratación; tomar frutas y verduras, etcétera. A las personas cuyo trabajo implica exposición al sol se recomienda moderar el esfuerzo físico en horas de más calor y se aconseja evitar la exposición directa al sol de bebés o menores de 6 meses.
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