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» Misionesopina
Fecha: 20/06/2025 14:59
Después de meses de sufrir en silencio, los alumnos del tercero C de la Escuela 110 de Posadas acudieron a sus padres para contar el maltrato psicológico que padecían por parte de su docente. En realidad, los hechos no se dieron en forma abrupta, pues estos niños de 8 años venían contando algunas situaciones a sus padres pero estos pensaron que eran aisladas. Los meses avanzaron y los chicos comenzaron a mostrar otras señales: algunos siguieron contando a los adultos lo que sucedía en el aula y otros se aislaron y ya no quieren asistir a la escuela. No es la primera vez que esta misma docente es denunciada por maltrato psicológico contra un alumno, en 2023 el matutino colega Primera Edición dio a conocer la denuncia hecha por una mamá contra esta misma docente, que en ese momento estaba al frente del cuarto grado C, por violencia verbal y psicológica contra su hijo. Esta vez, son muchos los padres de los estudiantes del tercero C los que decidieron alzar la voz y salir a defender a sus hijos. “Hace mucho que vienen pasando cosas con esta docente, incluso los primeros días de clases mi hija me contó que le comió la merienda que ella había llevado pero bueno, yo le dije que no pasaba nada, que quizás justo su maestra tenía hambre ese día. Pero después nos enteramos que no era un hecho aislado, sino que era frecuente que les comiera la merienda a los chicos, se hacía hacer masajes en los pies o en los hombros por sus alumnos de 8 años… y cuando los chicos les decían que estaban cansados, les decía que se sentaran en sus sillas porque no servían para nada, que no lograrían nada en la vida, a mi hija le dijo que no tenía ninguna meta”, contó Virginia, mamá de una alumna. Conductas inapropiadas Según recordó en diálogo con P, rimera Edición “un día le hablaba a mi hija de la importancia del estudio para ser alguien en la vida y me dijo que ella no iba a lograr nada en la vida porque eso le dijo su maestra… ahí fue cuando me di cuenta que lo que pasaba con la docente no era una situación aislada”. Las situaciones irregulares que reportan los padres son muchísimas. Según recordó Virginia, un día, su hija comió muy poco al mediodía por lo que le compró una ensalada de frutas en el supermercado para que merendara en la escuela. “Pero la maestra le pidió que le invitara y, cuando ya estaba por la mitad, mi hija le reclamó que le devolviera su merienda… entonces le dijo que le faltó probar una frutita, terminó comiendo todo y después le dijo que tirara el vasito en el tachito, que había estado muy rica su merienda”, detalló. En otra ocasión, su hija llegó tarde al colegio “y primero la docente no la dejó pasar al salón como penitencia y luego, cuando le permitió entrar al grado, no le dejaba sentarse y tenía que escribir parada”. Los castigos humillantes y comer la merienda de los chicos están presentes en las seis denuncias policiales que hicieron distintos padres contra la maestra. Intercambio de experiencias Fue en un cumpleaños donde una mamá habló sobre lo que su hijo contó acerca del maltrato de la maestra hacia él y sus compañeros cuando el resto de los padres también comenzaron a contar lo que pasaba con sus hijos. “Cuando escuchamos a los chicos nos dimos cuenta de la situación en la que estaban nuestros hijos y fuimos a hablar con la directora de la escuela. Antes, creo que cada uno tenía la versión de su hijo en casa y tendíamos a minimizar… pero cuando nos juntamos entre las mamás y escuchamos lo que contaban todos nuestros hijos, nos dimos cuenta de la gravedad de la situación: la docente gritándole a un chico que es un bobo o un burro, que no será nada en su vida a un chico delante de sus compañeros… siempre lo hace personal, dirigido a un solo chico por vez, no son retos generales”, contó Laura, mamá de Zoe. Además, los papás se enteraron de situaciones sufridas por sus hijos que ellos mismos no les contaron pero que sus compañeritos describieron a sus padres. “Así, confirmé con mi hija de varios hechos que en su momento no quiso contarme porque tenía miedo de decirme”, recordó Laura. Ante la Justicia Los padres primero acudieron a la directora de la escuela para tratar de encontrar una solución, pero aseguran que no quiso escucharlos. Por eso, hicieron una denuncia ante la Justicia y ante la Defensoría de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes. “Nuestro objetivo es que esta docente ya no esté frente a niños, sabemos que en 2023 hubo otra denuncia por malos tratos contra esta misma docente… esto no puede seguir pasando. En este momento, la educadora estaría con cambio de tarea en la biblioteca de la escuela y se cruza con nuestros hijos y los saluda tirándoles besitos, lo que nos molesta mucho porque ella sabe muy bien que la denunciamos. Incluso, les están diciendo a los chicos que el año que viene la mae va a volver más buena a dar clases”, contaron los padres. “Mi hija ya no quiere ir a clases” Eduardo, papá de Olivia, contó que su hija siempre fue muy comunicativa y amaba ir a la escuela pero eso cambió este año. “Poco después de empezar el año, empezamos a notar que, al momento de prepararse para ir a clases, le agarraba dolor de estómago, no quería ir a la escuela, ya no quiere hacer la tarea y tampoco nos quería contar nada. Recién cuando sus compañeritos se animaron a hablar, mi hija empezó a contar lo que sucede. Sabemos de otros chicos que todavía hoy se largan a llorar cuando sus papás les preguntan y no dicen nada, solo lloran”, destacó Eduardo. “Un día llevé a la escuela a mi sobrina, Isis, y recuerdo que decía en voz alta ‘que este día no me toque a mí, que este día no me toque a mí’… me acuerdo que le pregunté porqué decía eso y me explicó que se refería a que su mae no viniera enojada y se agarrara con ella”, contó la tía de Isis. No le permitió ir al baño a una alumna con fiebre y vómito Según contaron los padres ante el matutino colega Primera Edición intentaron hacer el reclamo formal contra la docente del tercero C ante la directora de la Escuela 110, Juana Cerdan “pero no nos quiso atender porque decía que no teníamos denuncias legales, fuimos dos veces”. Por eso, los padres volvieron los primeros días de junio con presencia de personal policial, oportunidad en que firmaron un acta. También se reunieron con el supervisor escolar, Esteban Tamis, a quien pidieron el alejamiento de la docente “tampoco queremos que quede en su lugar la directora o la vicedirectora porque esas docentes están tapando el comportamiento de la maestra desde hace años”. Escuela Número 110 Hipólito Bouchard; establecimiento donde ocurre el conflicto En la actualidad, según precisaron “hay seis denuncias contra la maestra en comisarías y en el Juzgado de Instrucción N° 2, entre estas, la de una mamá que denunció a la maestra por no dejar a su hija ir al baño, cuando esta le dijo que no se sentía bien. De hecho, la niña empezó con fiebre y vómitos en horario escolar y no se avisó a la familia, según la denuncia, regresó a su casa con 40° de fiebre. En la denuncia, la madre relató que el maltrato hacia su hija era permanente, ella había comenzado en ese establecimiento escolar a mediados de marzo y la maestra la humillaba frente a todos en el pizarrón, tratándola de tonta y burra”. Todas las denuncias tienen en común señalar el maltrato verbal de la docente hacia los niños, siempre focalizado en un niño por vez, invadir su privacidad abriéndoles sus mochilas y sacándoles sus meriendas, e incluso dormirse en horario de clases. Además, según explicaron, tienen testimonios de los padres de los alumnos de cuarto grado que ya la padecieron el año pasado “y pese a no haber hecho denuncia formal, confirman que sus hijos sufrieron las mismas situaciones”. Más voces También existe como antecedente la denuncia policial y ante la Defensoría de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes hecha por la mamá del alumno de cuarto grado en 2023, Yanina Román. “En ese momento, yo estaba muy sola, incluso salieron unos papás a atacar y a hablar mal de mi hijo. No obstante, en una reunión escolar ella misma firmó un acta donde asumía todas sus violencias, manipulaciones y conductas totalmente desubicadas, como decirle a mi hijo ‘enfermo’ porque estaba hablando en la fila. Ella les gritaba a los alumnos que eran unos burros, se dormía, golpeaba la mesa con el puño, le pedía masajes a las niñas, que le sirvan el mate, que le compren en el kiosco. A un alumno lo hizo mirar contra la pared por varios minutos porque se había portado mal. También dijo una vez que los niños tenían que ‘robar plantitas’ para ella. Y un sinfín de cosas que ya ni recuerdo”, recordó esta mamá al matutino colega P,rimera Edición quien finalmente cambió a su hijo de escuela. Fuente: Primera Edición
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