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» Notife
Fecha: 20/06/2025 02:31
Una joven de 26 años terminó en el hospital con golpes en piernas, brazos y rostro, luego de arrojarse desde un auto de aplicación en plena avenida de la ciudad bonaerense de Berisso. Según su testimonio, el conductor había desviado la ruta original, lo que la hizo entrar en pánico y decidir, en segundos, abrir la puerta y saltar al asfalto. El hecho ocurrió el miércoles por la noche en la zona de Avenida 66, a la altura de la bajada de calle 30. Todo quedó registrado por una cámara del sistema de videovigilancia del municipio: en las imágenes puede verse el instante en que la joven abre la puerta trasera del vehículo en movimiento y se arroja al pavimento. El conductor frena de inmediato y baja a asistirla, pero la chica ya se había incorporado, tomó su mochila y pidió auxilio a una conductora que pasaba por el lugar. Minutos después, llegaron efectivos policiales de la Comisaría Segunda de Berisso y personal médico del SAME. La chica fue trasladada al Hospital Larrain, donde le diagnosticaron lesiones leves. Afortunadamente, no presentaba heridas de gravedad. Puede interesarte Sospechas, denuncia y liberación Según la denuncia, la mujer pidió un viaje a través de una aplicación, aunque cabe señalar que en Berisso rige una ordenanza municipal que prohíbe ese tipo de servicios, motivo por el cual el caso se encuentra bajo análisis judicial. Lo que parecía un viaje habitual cambió drásticamente cuando, de acuerdo a la denunciante, el conductor no respetó el recorrido marcado por el GPS. Ante esa alteración, sintió temor de ser víctima de un secuestro o un delito similar. Su reacción inmediata fue arrojarse del vehículo. La Justicia bonaerense investiga el caso como “averiguación de ilícito”. El conductor, un hombre de 34 años, fue arrestado por algunas horas y llevado a declarar. El fiscal de la causa, Gonzalo Petit Bosnic, resolvió que no había elementos suficientes para mantener su detención, por lo que ordenó su liberación. De todos modos, permanece imputado mientras continúa la investigación. Desde fuentes judiciales indicaron que no se descarta ninguna hipótesis, aunque se aclaró que, en su declaración, la joven aseguró no conocer previamente al chofer, desmintiendo versiones que circularon en redes sociales. “Ella, cuando declaró en fiscalía, no dijo que se conocían. Pero algo raro hay detrás”, deslizó una fuente ligada al expediente, que pidió mantener el anonimato. En tanto, la fiscalía evalúa si el conductor utilizaba el vehículo de forma irregular bajo la modalidad de transporte por aplicación, algo prohibido por normativa municipal. ¿Un caso aislado? La historia tomó relevancia pública cuando las imágenes del hecho comenzaron a circular. La secuencia es impactante: una joven se lanza del auto en plena calle, el vehículo se detiene abruptamente y, segundos después, ella se incorpora y corre hacia otro auto buscando refugio. El caso se inscribe en una serie de situaciones que alimentan el debate sobre el uso —legal e ilegal— de autos de aplicación en distintas ciudades del país. Berisso, como otros municipios bonaerenses, ha sancionado normativas que prohíben o restringen este tipo de servicios. Sin embargo, la demanda por transporte accesible y eficiente muchas veces supera el marco legal establecido. En este contexto, el relato de la víctima suma una nueva arista. ¿Se trató de una mala interpretación o de un intento real de privación de la libertad? ¿Fue una conducta delictiva o una reacción desmedida frente a una alteración del recorrido? Las pericias, declaraciones y el análisis de los registros del vehículo serán clave para esclarecer lo ocurrido. Qué se sabe hasta ahora El hecho ocurrió el miércoles por la noche en Avenida 66 y calle 30, Berisso. La víctima es una joven de 26 años que denunció haber sentido temor tras un cambio de recorrido. Se arrojó del auto en movimiento y fue hospitalizada por lesiones leves. El conductor fue arrestado, declaró ante la fiscalía y luego recuperó la libertad. El vehículo habría estado operando como transporte de aplicación, modalidad prohibida en Berisso. La causa sigue bajo investigación como “averiguación de ilícito”. Mientras tanto, el episodio vuelve a poner en foco la necesidad de regulación efectiva sobre las aplicaciones de transporte, la seguridad de quienes utilizan esos servicios y el seguimiento de las denuncias en contextos donde la legalidad del servicio ya está en discusión.
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