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» Diario Cordoba
Fecha: 18/06/2025 06:04
Imposible hacer un análisis medio sensato tras las últimas tardes de calor tórrido, política al mismo nivel de sofoco y maquillajes desafortunados, tanto en la cara como en las palabras. Imposible también augurar si el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es capaz de darle otra vez la vuelta a la tortilla con ese don de la resiliencia que Dios le ha dado, esa muñeca prodigiosa para lanzar los huevos y las patatas dispersos al aire y que le caigan perfectamente compactos en la sartén. Sin embargo, todo parece indicar que las papas nunca han estado tan crudas y que esta vez se han pasado de huevos. El monumental escándalo Koldo-Ábalos-Cerdán... (pongo puntos suspensivos porque lo mismo, cuando estas líneas salgan impresas, habrá que escribir más apellidos y guiones) ha hecho que se hable de «regeneración», señal de que algo ha «degenerado». Y no vale salvar a España sacando solo de la ecuación al presidente Pedro Sánchez, como no sirvió para nada, por ejemplo, que se le culpase de todo mal de la humanidad a Pablo Iglesias. Dimitió y los problemas, reales o imaginarios, siguieron existiendo. La regeneración no es cuestión de un nombre, sea el que sea, a menos que se trate de un «quítate tú que me ponga yo». Verán, no me creo que la corrupción detectada no responda a una estructura que estaba antes (muchísimo antes) de Ábalos, y que si no se actúa seguirá siendo la misma mucho después, con distintos sinvergüenzas que cobran y que van cambiando y unos pocos que pagan y que son los mismos. Entonces, ¿cómo debe ser esa regeneración que prime la decencia en la vida pública, la participación e implicación del ciudadano, el precepto de «un hombre, un voto» sin el juego de las circunscripciones, la transparencia, que acabe con las mordidas y los mordiscos y que devuelva la fe del pueblo en sus instituciones? Pues habrá que verlo. Otros intentos no han servido, pero no por ello hay que dejar de intentarlo. A Alexis de Tocqueville, el pensador y jurista francés que en 1835 publicó La Democracia en América (por cierto, y abro un paréntesis, lo que está pasando en EEUU ahora convierte al Tocqueville del siglo XIX en el Julio Verne de la política) le atribuyen la frase «los errores de la democracia se combaten con más democracia». Una verdad como un templo. En esa regeneración necesaria para España no habrá más camino. Porque si se toma cualquier otro sendero... Lo que desaparecerá será la democracia.
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