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» Data Chaco
Fecha: 17/06/2025 15:01
¿Cuándo es momento de consultar a un psicólogo? ¿Qué diferencia una charla con un amigo de un espacio terapéutico? ¿Es normal sentir ansiedad todo el tiempo? ¿Hablar con una inteligencia artificial puede ayudar? Para el psicólogo Miguel Tentor, no hay una sola respuesta, pero sí una condición básica: que exista una demanda subjetiva, un "malestar que persiste en el tiempo y que la persona ya no puede manejar con recursos propios". "Siempre tiene que haber algo que te joda y que quieras cambiar. Ese es el punto de partida", explicó Tentor en diálogo conEl Garage de Data . Esa demanda puede estar vinculada a una patología o no, pero siempre se expresa de algún modo: puede ser angustia, vacío existencial, ansiedad, falta de sentido o síntomas físicos sin causa médica aparente. En cualquier caso, lo que se busca en terapia no es resolver un problema como quien repara una máquina, sino trabajar con la palabra, explorar el modo en que se percibe eso que duele y, desde ahí, producir un alivio. "Tallar la demanda": la pregunta como punto de partida En los primeros encuentros, tanto desde el psicoanálisis como desde las escuelas integrativas, se trabaja lo que se denomina "tallar la demanda" o sesiones preliminares. Es decir: delimitar qué quiere cambiar la persona, qué le genera malestar, qué síntomas aparecen como expresión de un conflicto más profundo. "No es que el terapeuta viene a dar soluciones. Se trabaja con el discurso del paciente, y eso ya puede generar una transformación", explicó Tentor. El profesional está especializado en la escuela integrativa, una corriente desarrollada por el argentino Héctor Fernández Álvarez, que se basa en la evidencia científica pero propone adaptar el dispositivo terapéutico a la persona y no al revés. "Cada sujeto es distinto. No se trata de encajar en una técnica, sino de construir algo que funcione para quien consulta. La terapia debe ser un espacio de bienestar". Inteligencia artificial, amigos y psicólogos: ¿Con quién hablar? La tecnología también entra en juego en las formas actuales de buscar alivio. ¿Qué pasa con quienes charlan con bots o usan inteligencia artificial como forma de contención? Tentor lo considera válido como instancia inicial o recurso paliativo. "Todo lo que implique hablar, expresar, es mejor que cerrarse. Ahora bien, un psicólogo tiene una formación que le permite diagnosticar, generar estrategias y evitar proyectar su propia subjetividad sobre el paciente. Un amigo te escucha, pero también te da su opinión, su experiencia, su librito. En cambio, el terapeuta sostiene un espacio donde lo que importa es lo que le pasa al otro", explicó. El límite entre el malestar cotidiano y un cuadro clínico está dado por el impacto que tiene en la vida. "Si una persona ya no puede ir a trabajar, si deja de encontrarse con amigos, si no disfruta de lo que antes sí, estamos hablando de un malestar que se está volviendo patológico. Ahí es donde es fundamental la intervención profesional", señaló. Ansiedad y depresión: una pandemia emocional El 70% de las consultas en salud mental en el mundo tienen como causa síntomas de ansiedad o depresión. Tentor lo dice sin rodeos: "Es casi una pandemia. Y estadísticamente, todos atravesamos alguna vez un trastorno de ansiedad, aunque no siempre lo sepamos". La ansiedad, la depresión y el estrés comparten centros neuronales y mecanismos biológicos. Se manifiestan de formas distintas: a veces como ataques de pánico, otras como fobias, insomnio, irritabilidad o cansancio extremo. Pero detrás hay un mismo sistema sobreexigido, muchas veces alimentado por el estilo de vida actual: exceso de estímulos, hiperconectividad, poco descanso, sedentarismo, consumo desmedido de cafeína o sustancias, falta de vínculos reales. "Si estás todo el día a mate y después necesitás algo para bajar, estás predisponiendo al cuerpo a una ansiedad crónica. El cuerpo no está diseñado para este ritmo", advirtió. Tarot, videos y la ilusión de certezas En redes sociales circulan videos de tarot y mensajes predictivos que aseguran que todo se va a acomodar: que la pareja que se fue va a volver, que la economía mejorará, que algo "se va a destrabar". Para Tentor, estos discursos generan adictividad emocional, porque alivian momentáneamente la incertidumbre. "Siempre dicen que vienen cosas buenas. Es un alivio rápido. Pero en la vida real no todo mejora solo porque sí. Lo que veo en el consultorio no es eso. Tenemos que aprender a convivir con la incertidumbre para que la ansiedad no se vuelva patológica". "Te podés morir antes por no dormir que por no comer. Si lográs mejorar esas condiciones físicas, el 70 u 80% de lo que duele emocionalmente empieza a acomodarse solo". Redes sociales: "Ser mirados es una necesidad básica" Las redes también inciden en la construcción de la identidad. "Buscamos pertenecer, nos identificamos con ciertos moldes", sostuvo. "Ser mirados es una necesidad básica", señaló el psicólogo. No se trata de un capricho superficial. "Hay experimentos que muestran que los bebés que reciben cuidados pero no contacto humano pueden morir. La mirada del otro es vital. Evolucionamos como especie gracias a lo colectivo". Durante mucho tiempo se sostuvo la idea de que las personas sanas eran aquellas que alcanzaban una independencia absoluta. Hoy, esa perspectiva cambió. "Un sujeto totalmente independiente es un sujeto con alguna patología grave. Lo saludable es pasar de una dependencia vertical —como la de un niño con sus padres— a una más horizontal". ¿Por dónde empezar ? Cuando el malestar o la ansiedad son tan grandes que no se sabe por dónde empezar, Tentor sugiere ir a lo básico: lo orgánico. "Dormir bien, moverse, caminar, hablar con alguien. El cuerpo no está hecho para el sedentarismo ni para estar siempre alerta. Te podés morir antes por no dormir que por no comer. Si lográs mejorar esas condiciones físicas, el 70 u 80% de lo que duele emocionalmente empieza a acomodarse solo". Terapia, ejercicio, descanso, contacto humano. No hay recetas mágicas, pero hay caminos posibles. El primer paso, muchas veces, es simplemente animarse a hablar. Notas Relacionadas
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