14/06/2025 22:41
14/06/2025 22:40
14/06/2025 22:40
14/06/2025 22:40
14/06/2025 22:40
14/06/2025 22:40
14/06/2025 22:40
14/06/2025 22:40
14/06/2025 22:40
14/06/2025 22:40
Concordia » Despertar Entrerriano
Fecha: 14/06/2025 10:43
En Concordia, cruzar las vías del tren no es solo una cuestión de tránsito, sino de supervivencia. Vecinos de distintos barrios llevan meses reclamando por el mal estado de los pasos a nivel del ramal Urquiza. Pastizales que cubren completamente los rieles, basura acumulada, durmientes sueltos, señalización ausente o tapada. A veces, ni siquiera se nota que se está por cruzar una vía férrea. “El cruce de algunas calles parece una tapera. Hay pasto alto, piedras, ramas y ni una barrera. La última vez vi un auto que quedó colgado en los rieles porque no se dio cuenta de que pasaba una vía”, contó una vecina a nuestro medio. El problema es doble: por un lado, la inseguridad vial que generan estas condiciones; por el otro, la total falta de claridad sobre quién debe resolverlo. Desde la Municipalidad de Concordia, consultados por Despertar Entrerriano, la respuesta fue breve pero significativa: “Esto le compete a Ferrocarriles Argentinos. No interviene el municipio”. Desde la Secretaría de Transporte de Entre Ríos, el titular Juan Diego Elsesser fue incluso más directo: “La provincia por el momento no tiene injerencia en lo ferrocarril. Es todo dependiendo de Nación”. Con la pelota en el campo del Estado nacional, recurrimos a Mario Arellano, gerente de Trenes Argentinos Cargas para el ramal Urquiza, quien explicó que todas las decisiones operativas se ajustan al cumplimiento de la norma SETOP N° 7/81. La gran pregunta: ¿quién mantiene los cruces? La SETOP 7/81, documento técnico que regula los cruces entre caminos y vías férreas en todo el país, es clara al respecto: La responsabilidad del mantenimiento básico del cruce (limpieza, visibilidad, conservación de la calzada ferroviaria, eliminación de obstáculos, etc.) recae en el titular del ferrocarril, es decir, en este caso, Trenes Argentinos Cargas. El capítulo 5 y 6 del documento establece que para que un cruce a nivel funcione adecuadamente, deben cumplirse condiciones mínimas de visibilidad: -No debe haber pastos altos, árboles, carteles publicitarios o vehículos abandonados que impidan ver venir al tren. -Debe asegurarse el correcto desagüe y la limpieza del entorno. -Toda la zona de visibilidad debe estar libre de obstáculos físicos, permanentes o temporales. Esto incluye el mantenimiento regular: desmalezado, barrido, despeje de escombros, remoción de basura y cuidado de los bordes del cruce, especialmente en zonas urbanas. En la práctica, si hay pasto que tapa los rieles o ramas que tapan las señales, Trenes Argentinos debería intervenir. Sin embargo, en muchas ciudades esto no ocurre. Y aquí comienza el conflicto. Desde la empresa ferroviaria aseguran que todo se rige y cumple frente a estas normas. Nadie lo hace, todos lo sufren “Cuando un cruce está abandonado y nadie lo barre, ni corta el pasto, ni revisa si los durmientes están sueltos, hay una sola verdad: ese cruce es un peligro”, resume la vecina. El municipio dice que no puede intervenir sin autorización. La provincia tampoco tiene competencia directa. Y desde Nación, el silencio suele ser más frecuente que la respuesta. Mientras tanto, los cruces se llenan de yuyos y se vacían de responsabilidad. “Nosotros ya limpiamos la vía una vez. Pero no tenemos que hacerlo. No es nuestra. Queremos que venga quien corresponda y lo mantenga. No que aparezcan solo cuando hay elecciones”, reclamó la mujer. El laberinto normativo Para intervenir formalmente un cruce, la SETOP exige un expediente técnico que debe incluir: -Relevamiento topográfico. -Análisis de tránsito vial y ferroviario. -Estudio de visibilidad y riesgos. -Planos y proyecto de obra. -Y por supuesto, la conformidad expresa de la empresa ferroviaria. La tramitación puede tardar meses. Y si no hay acuerdo entre las partes, la decisión queda en manos de la Secretaría de Transporte nacional. Todo un recorrido burocrático para cortar un yuyo o poner una barrera. El cruce como símbolo El estado de los pasos a nivel en Concordia no es solo una cuestión técnica. Es una postal de lo que ocurre cuando las responsabilidades se diluyen y los problemas se naturalizan. Cuando algo es de todos pero no es de nadie. Fuente: Despertar Entrerriano
Ver noticia original