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» Elterritorio
Fecha: 14/06/2025 08:40
El músico posadeño fue hallado responsable de manejar el Ford Fiesta en el que murieron su pareja Melina y la turista Melisa Caram. Seguirá libre bajo ciertas normas sábado 14 de junio de 2025 | 3:00hs. Trabajo comunitario, sin consumir alcohol ni salir del país: las condiciones de la condena a González. Foto: Marcelo Rodríguez El Juzgado Correccional y de Menores Uno de Posadas condenó ayer al músico Andrés González con una pena de 3 años de prisión en suspenso y 10 años de inhabilitación para conducir cualquier vehículo, por ser hallado penalmente responsable de doble homicidio culposo y lesiones graves -tres hechos- producto del siniestro vial ocurrido sobre la ruta 12 a la altura de Gobernador Roca el 5 marzo de 2019, durante un viaje que realizaba con amigos y su pareja para conocer las Cataratas de Iguazú. Con el fallo, a cargo del tribunal unipersonal representado por la jueza Marcela Leiva, se acreditó que González era el conductor del Ford Fiesta que colisionó y produjo las muertes de su pareja Melina Tamara Sosa Labandera (25) y la turista mendocina Melisa Caram (27), además de provocar las lesiones graves de Facundo Chemes, Samir Daou -también iban en el Ford Fiesta- y del menor de los ocupantes de la camioneta con la que colisionó. González, por los delitos cometidos, además recibió una prohibición de salir del país y de consumir alcohol, y deberá cumplir 32 horas mensuales de trabajo comunitario. El veredicto llegó horas después de los alegatos de las partes. La jueza determinó hacer lugar al pedido de condena realizado por la fiscalía, y también tomar en cuenta la solicitud subsidiaria por parte de la defensa, de que el acusado no reciba prisión efectiva. Alegatos La jornada de ayer comenzó pasadas las 8.45 con el alegato de la fiscalía, a cargo de la letrada María Laura Álvarez. En ese marco, la fiscal describió los momentos previos al trágico siniestro y allí definió la maniobra que González realizó sobre la ruta como movimientos imprudentes y negligentes, al invadir el carril contrario. “Lamentablemente tuvimos un sumario policial deficiente. No puede ser que no individualizaron a las personas y que hayan llegado tarde al lugar”, apuntó, además, sobre la labor policial en el comienzo de la causa. Sobre las pruebas que apuntaron a González, la fiscal explicó que además de los testimonios de los sobrevivientes, se pudo acreditar a partir de distintos documentos del siniestro que él era el conductor del Ford Fiesta, que pertenecía al suegro del ahora condenado. “El conductor iba al Madariaga, el resto al hospital de Roca. El orden del traslado determinó quien conducía el Ford Fiesta, y González fue el primero en ingresar al hospital”, manifestó, planteando que quedó demostrado también que conforme a las lesiones producidas en cada pasajero, se pudo determinar dónde iba cada uno. “Chemes era el único que tenía cinturón de seguridad y quedó con cicatriz. Samir, por ir en el medio y sin cinturón, resultó con traumatismos graves y fue el que más lesiones sufrió”, remarcó, aclarando que el vehículo tuvo el mayor impacto en la zona derecha, asientos donde estaban sentadas las dos jóvenes fallecidas (Sosa en el de acompañante y Caram atrás). Continuando con su acusación, Álvarez sostuvo que “los peritos no pudieron determinar la velocidad, pero por las deformaciones metálicas del vehículo dijeron que venían a una gran velocidad”. A ello se le sumó que “por los daños, las lesiones producidas a González son normales al conducir el vehículo y no se lesionó la cara porque se le activó el airbag”. “Este hecho arruinó vidas, familias, proyectos de vida y profesiones”, sostuvo. “Andrés González actuó de manera antirreglamentaria. No fue una simple distracción, fue algo groso”, señaló, puntualizando que era un resultado evitable. “Esto no era necesario, fue una negligencia. Circuló a contramano, sin visibilidad y manejó con una velocidad excesiva”. En tanto, la fiscal solicitó una pena efectiva y “adecuada” de 6 años de prisión y 10 años de inhabilitación para conducir. “La sociedad exige una respuesta. Andrés González destruyó vidas y proyectos de vidas”, concluyó. Luego fue el turno del abogado defensor Federico Tilli de explayar sus argumentos. Describió la causa como un fraude procesal y sostuvo que “se manejaron y manipularon mal las pruebas”. Se corroboró que el músico manejaba el auto que colisionó en la ruta 12. En esa línea, subrayó que “no venimos a discutir que esto fue un accidente de tránsito. No voy a permitir que determinen que conducía a una velocidad rápida, si no lo hicieron los licenciados que realizaron las pericias”, arremetió. Asimismo, indicó que con las pruebas no se pudo establecer “con certeza la velocidad, ni al conductor del Ford Fiesta” y cuestionó que nadie planteó antes las deficiencias policiales. Algo que puso en consideración la fiscal anteriormente en sus alegatos. Continuando con su defensa, Tilli explicó que pasaron seis años del hecho y que el imputado nunca evadió a la Justicia. “Por eso no tiene sentido que tenga una condena de 6 años de prisión efectiva”, manifestó. Pericias deficientes Sobre las presuntas pericias deficientes, el defensor manifestó que “si la fiscal dice que es un sumario deficiente, no pueden condenar a una persona. Debemos ir a foja cero y empezar todo de nuevo”. No obstante, sostuvo que “esta defensa cree en la Policía de Misiones y no en dos personas que lógicamente acordaron culpar a González”, refiriéndose a los testimonios de Daou y Chemes. En tanto, sobre las pericias se puntualizó que “el propio licenciado Vázquez dijo que era probable que González manejaba, pero que no podía determinarlo. Usar esta prueba para condenarlo no tiene pie ni cabeza, necesitamos una certeza absoluta”. En esa línea, planteó que sólo hay dos opciones: “Confíamos en la Policía o en dos personas que quieren y tienen un interés en hacer pagar a González”. Tres pedidos Finalmente, Tilli consideró que no se pudo considerar fehacientemente que el músico era el conductor del Ford Fiesta y que incluso el primer informe policial indicaba que era Daou el que conducía. Por ello, pidió la absolución de su defendido por el beneficio de la duda. De manera subsidiaria, en caso de que la jueza no consideraba la absolución como sentencia y “si se le cree a los testigos”, pidió una pena condicional de 3 años. Esto último, sosteniendo que “no hubo alcohol, no se determinó la velocidad y no se fugó del hecho”, por lo que “no tiene sentido condenar a 6 años de prisión efectiva”. Por último, si el tribunal no consideraba suficiente ninguno de los dos pedidos argumentados, Tilli manifestó que si se dictaba una condena de prisión efectiva, que González no fuera detenido de inmediato. Finalmente, la jueza cerró el debate oral y luego de dos horas de espera, comunicó su veredicto, dejando a González en libertad pero con una serie de normas que deberá cumplir cuando el fallo quede firme por el Superior Tribunal de Justicia de Misiones. Última declaración de González Ya cerrados los alegatos de las partes del juicio contra el músico, Andrés González decidió dar sus últimas declaraciones antes del veredicto. “Es un hecho traumático para todos y tengo mucho miedo” manifestó en primer lugar, agregando que “confío en la Justicia”. En su declaración, también pidió que no se le quite la posibilidad de seguir cantando “y seguir con mi vida”. Por último, expresó ante el tribunal: “Entiendo que es una decisión muy difícil, pero estoy acá y me hice presente. Porque siento que escaparse no es una solución”.
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