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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 13/06/2025 22:46
El 58% de los encuestados considera que dominar herramientas de inteligencia artificial será clave para conservar o conseguir empleo La transformación del mundo laboral ya no es una predicción futurista, sino una realidad que avanza con rapidez. En este contexto de cambio acelerado, un nuevo informe revela que el 60% de los argentinos cree que las próximas generaciones desarrollarán su vida profesional en trabajos que hoy todavía no existen. El dato surge del estudio Habilidades del Futuro, una investigación global desarrollada por el Banco Santander junto a la consultora Ipsos, que relevó percepciones en 15 países de Europa y América sobre el futuro del trabajo, el rol de la educación y las habilidades necesarias para mantenerse vigente. El panorama que traza el informe está marcado por la expansión de la inteligencia artificial, la automatización de tareas y la aparición de nuevas demandas laborales que obligan a repensar tanto la educación formal como los procesos de formación a lo largo de toda la vida. Aprender durante toda la vida Una de las conclusiones más contundentes es que la formación continua ya no es una opción, sino una condición indispensable para la empleabilidad. En Argentina, ocho de cada diez personas reconocen que necesitan seguir capacitándose para adaptarse a los desafíos del mundo laboral. Sin embargo, identifican dos obstáculos principales: el costo de los cursos y la falta de tiempo para llevarlos adelante. A nivel global, también emerge una preocupación vinculada al avance de la inteligencia artificial. Uno de cada tres encuestados teme que esta tecnología pueda reemplazar su empleo actual. En la Argentina, un 58% de los participantes considera que saber manejar herramientas de IA será clave para conservar o conseguir un trabajo en los próximos años. “Tenemos la responsabilidad colectiva de acompañar este cambio con más oportunidades de formación accesible y continua”, expresó Alejandro Butti, CEO de Santander Argentina, en el marco de la presentación del informe. Además del acceso a cursos, los argentinos también cuestionan el rol de los actores institucionales frente al nuevo escenario. Un 44% considera que la oferta pública de formación continua es insuficiente, mientras que el 43% opina que son las empresas las que deberían asumir un papel más activo en la capacitación de sus empleados. Sistema educativo sin revisión Más allá del ámbito profesional, el informe apunta a una revisión integral del sistema educativo. En un mundo donde el conocimiento se vuelve obsoleto cada vez más rápido, los modelos tradicionales parecen no alcanzar para preparar a las personas a lo largo de su vida. La educación, advierte el estudio, debe adaptarse a una lógica de aprendizaje permanente, más flexible, centrada en habilidades digitales, pensamiento crítico y creatividad. El entorno cambiante plantea un nuevo paradigma: formar para la empleabilidad ya no implica solo transmitir conocimientos técnicos, sino acompañar trayectorias que probablemente estén marcadas por múltiples reinvenciones profesionales. Ocho de cada diez argentinos reconocen la necesidad de seguir formándose para mantenerse competitivos en el mercado laboral (DPA) En ese sentido, el sector privado empieza a ganar protagonismo como facilitador de herramientas para la reconversión. Existen experiencias en la región que apuntan en esa dirección, con alianzas entre empresas e instituciones académicas para ofrecer contenidos actualizados y relevantes. Trabajar en el país A pesar de los desafíos, el informe también destaca un dato alentador: el 71% de los encuestados en Argentina manifiesta su intención de seguir trabajando en el país durante los próximos diez años. Esta voluntad de proyectar un futuro laboral dentro de las fronteras nacionales representa, según el documento, una oportunidad estratégica para fortalecer el capital humano y reducir la brecha de talento. La clave, subraya el estudio, estará en generar condiciones que permitan a los trabajadores reconvertirse, actualizarse y desarrollar nuevas habilidades en un entorno de transformación permanente. Si bien el futuro no puede predecirse con certeza, hay algo que sí parece claro: las próximas generaciones tendrán empleos distintos a los actuales, y prepararse para ese escenario exigirá un compromiso conjunto de gobiernos, empresas, instituciones educativas y trabajadores. No se trata solo de anticipar el futuro, sino de construirlo activamente, con educación práctica, tecnología y visión de largo plazo.
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