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» Data Chaco
Fecha: 12/06/2025 23:31
Con la experiencia de 32 años en televisión, Aníbal Kadlec visitó el estudio de El Garage de Data para repasar una carrera marcada por el humor, la irreverencia y la curiosidad. El conductor de Veteve recordó con nostalgia su comienzo: "Arrancamos haciendo televisión en el año 1993 con un programa que se llamaba Chicos y Chicas, siempre dentro del humor, y le empezábamos a pegar un poco a la política". Lo que comenzó como una propuesta descontracturada ganó rápidamente popularidad. "Le interesó a mucha gente, la parte comercial privada andaba muy bien", contó Kadlec. El programa tenía el apoyo de marcas reconocidas. Una de ellas era una cervecería que esponsoreaba a la Selección Argentina, por lo que cruzaron el Atlántico en busca de notas con los jugadores que integrarían el combinado nacional, como Javier Zanetti. Al ser consultado sobre qué los diferenciaba de otros programas de la región, respondió: "El diferencial era el humor. Por ahí no nos dejaban ingresar y un poco eso era la cuestión, porque si te dejaban era algo que podía hacer cualquiera. Entonces, la idea era que no te dejen hacer una nota". Durante décadas, Kadlec recorrió el mundo. "Visité muchos países. Esponsoreado por una agencia de viajes, teníamos la posibilidad de viajar cinco veces al año. Hicimos toda Latinoamérica, Estados Unidos, Europa y África. Siempre íbamos con algo ya delineado, y hacíamos viajes largos, de diciembre a enero. Las notas nos servían para seis meses". La idea era hacer un programa más descontracturado y pintoresco. "Hay veces que recorrés toda una mañana y te hacés 20 notas, una mejor que la otra. Y al otro día no levantás ni una", confesó. Pero también revivió anécdotas, una de ellas, cuando la, en su momento, presidente Cristina Kirchner vino a Chaco en su primer Gobierno. "Cuando vino Cristina a Tirol, sabíamos que no nos iban a dejar entrar. Entonces pasamos por abajo del escenario y salimos adelante. Nos vio, nos saludó, pero después vino seguridad y nos sacaron. Lo hicimos de inocentes", expresó. MALVINAS Y UNA EMOCIÓN LATENTE Uno de los viajes más emotivos fue a las Islas Malvinas. "Fui hasta cuatro veces. Es toda una emoción. Malvinas es de mi generación: soy clase "64, y los que fueron eran "61 y "62. Nosotros fuimos acompañados de excombatientes, y la vibra que ellos transmitían te generaba el doble de emoción. Soy un tipo duro, es muy difícil que yo llore, pero cuando estás ahí y hablás con ellos, se te caen las lágrimas". Actualmente, Kadlec adelantó: "Estamos cerrando con un sector del canal para hacer la cobertaura del Mundial de Clubes". Después de más de tres décadas de aventuras y humor sin filtro, conlcuyó: "Todos los países tienen algo lindo. Los más desarrollados te permiten sacar más notas". Notas Relacionadas
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