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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 12/06/2025 08:47
La revista People elaboró un informe especial con declaraciones reveladoras, mientras la Guardia Costera de EE.UU. ultima detalles en su reporte final (Portada People) La implosión del sumergible Titan, operado por OceanGate, marcó uno de los episodios más impactantes en la historia reciente de la exploración submarina. El 18 de junio de 2023, la nave desapareció en las profundidades del Atlántico durante una expedición al Titanic, provocando la muerte de sus cinco ocupantes. A casi dos años del desastre, nuevas revelaciones sobre las decisiones internas de la empresa y la figura de su cofundador, Stockton Rush, salieron a la luz, mientras la Guardia Costera de Estados Unidos se prepara para publicar su informe final sobre el caso. La implosión del sumergible Titan expone fallas de seguridad y advertencias ignoradas en OceanGate (REUTERS) Según un artículo detallado de People, la tragedia no sorprendió a quienes conocían de cerca la cultura de OceanGate y las advertencias que precedieron al accidente. Cronología del accidente: desaparición, búsqueda y hallazgo En junio de 2023, el Titan se sumergió frente a las costas de Terranova (Canadá), con el objetivo de alcanzar los restos del Titanic, ubicados a unos 3.800 metros de profundidad. A bordo viajaban Stockton Rush, cofundador y piloto; P.H. Nargeolet, experto en el Titanic; el empresario Shahzada Dawood junto a su hijo Suleman Dawood; y el explorador Hamish Harding. La misión de alto perfil y considerable riesgo, se tornó trágica cuando, poco más de 90 minutos después del inicio del descenso, se perdió contacto con la nave. Cuatro días más tarde, equipos de rescate localizaron restos del sumergible en el lecho marino, cerca del Titanic. La Guardia Costera de EE.UU. confirmó que el Titan había implosionado debido a la presión oceánica, provocando la muerte instantánea de sus ocupantes. Entre los fragmentos hallados se encontraron partes del traje de buceo de Rush y pegatinas de la expedición, mientras que el interior del sumergible se había reducido a una masa compacta, según un investigador citado por People. Hamish Harding, Shahzada Dawood junto a su hijo Suleman Dawood, Paul-Henri Nargeolet y Stockton Rush, fueron las cinco víctimas fatales que se encontraban en la expedición (Archivo) Stockton Rush: un líder visionario con decisiones controvertidas El empresario estadounidense Stockton Rush, de 61 años, fue una figura clave en la creación de OceanGate y el diseño del Titan. Proveniente de una familia adinerada y graduado en ingeniería aeroespacial por la Universidad de Princeton, aspiraba a democratizar la exploración de las profundidades mediante tecnologías más asequibles. Su apuesta por materiales no convencionales, como la fibra de carbono en lugar del acero o el titanio, fue una decisión central y polémica. La revista People recogió testimonios que lo describen como un líder ambicioso y carismático, pero también propenso a ignorar advertencias técnicas. “Stockton era un visionario que intentaba democratizar el abismo. Era una causa noble”, aseguró Fred Hagen, inversor y pasajero en expediciones anteriores. Sin embargo, su propia determinación lo llevó a tomar riesgos significativos: “Vivió fuera de lo convencional. Y pagó por ello con su vida”, añadió Hagen en su declaración. El documental Titan: The OceanGate Disaster, junto con entrevistas realizadas por People, retrata a Rush como el centro de una “cultura de personalidad” en OceanGate, donde cuestionar sus decisiones podía costar el puesto. Mark Monroe, director del documental, afirmó: “Si ibas en su contra, probablemente te quedarías fuera”. El liderazgo de Stockton Rush y la cultura interna de OceanGate, se encuentran bajo la lupa tras la tragedia del Titan (Archivo) OceanGate: advertencias ignoradas y clima interno La dinámica interna en la empresa se caracterizó con tensiones, advertencias desoídas y conflictos. Bonnie Carl, quien trabajó como contadora desde 2017, relató que su entusiasmo inicial se desvaneció al observar presiones financieras y decisiones arriesgadas. Sobre esto, expresó: “Sigo preguntándome cada día: ¿Cómo no pudo ver que esto era peligroso?”. Otro exempleado, David Lochridge, exdirector de operaciones marinas, detectó irregularidades desde su ingreso en 2016. Alertó sobre decisiones como eliminar sistemas de comunicación submarina y cuestionó la integridad estructural del Titan. En enero de 2018, Lochridge presentó un informe interno con observaciones de seguridad. Rush, al considerarlo un acto de deslealtad, lo despidió. En un giro llamativo, le ofreció a Bonnie Carl (contadora) el puesto de piloto principal, lo cual derivó en su renuncia. Fallos técnicos y negligencia en la construcción Desde su concepción, el Titan generó críticas por su uso de fibra de carbono como material principal, cuestionado por su resistencia bajo presión extrema. Las uniones con los extremos de titanio se realizaron con pegamento aplicado manualmente, sin controles estrictos. “Era como poner glaseado en un pastel de cumpleaños”, explicó Lochridge en People. Rush también se negó a someter el sumergible a inspecciones de seguridad independientes, por considerarlas costosas. Los sistemas de monitoreo a bordo detectaron crujidos en la fibra de carbono, signos de deterioro que OceanGate ignoró. En 2022, se llegó a escuchar una grieta desde la superficie, según Jason Neubauer, de la Guardia Costera de EE.UU. “Esa información fue completamente ignorada”, declaró. Y pese a estas señales, el sumergible fue almacenado a la intemperie durante el invierno, lo que agravó la fatiga del material. El uso de materiales no convencionales y la falta de controles, fueron determinantes en la catástrofe del sumergible Titan (AP) Investigación oficial: hallazgos y posibles responsabilidades La Guardia Costera de Estados Unidos lidera la investigación del caso. Jason Neubauer, quien se encuentra al frente del proceso, indicó que la omisión sistemática de advertencias técnicas y la falta de protocolos de seguridad son claves en el desastre. “Rush, si estuviera vivo hoy, podría ser considerado responsable de homicidio marítimo”, afirmó en People. El informe final, cuya publicación se espera en breve, tiene como objetivo esclarecer las causas y determinar responsabilidades. La investigación subraya la necesidad de respetar normas de ingeniería incluso en proyectos con ambición innovadora. Repercusiones entre familiares y exempleados El accidente del Titan generó conmoción entre exploradores, familiares y exmiembros de OceanGate. Bonnie Carl expresó su frustración por las vidas perdidas y la falta de acción preventiva. Al respecto, declaró: “Estoy enojada. Esto no debió haber pasado”. Por su parte, el inversor Fred Hagen destacó la determinación de Rush, reconociendo tanto su idealismo como su temeridad: “Lo iba a hacer sin importar qué”. La comunidad internacional de expertos en tecnología submarina sigue de cerca el caso, exigiendo que se refuercen los estándares de seguridad. La tragedia del Titan reaviva el debate sobre la seguridad y la responsabilidad en la exploración submarina privada (AP) Expectativas y lecciones pendientes Con el informe de la Guardia Costera por publicarse, las voces críticas insisten en que la tragedia del Titan debe servir como lección sobre los peligros de ignorar advertencias técnicas y subestimar riesgos. En una misma sintonía, el informe especial de People sostiene que la historia de OceanGate representa una advertencia sobre cómo la ambición puede eclipsar el juicio técnico, incluso en campos de alta exigencia.
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