10/06/2025 19:40
10/06/2025 19:40
10/06/2025 19:40
10/06/2025 19:39
10/06/2025 19:39
10/06/2025 19:35
10/06/2025 19:35
10/06/2025 19:33
10/06/2025 19:33
10/06/2025 19:32
Parana » El Once Digital
Fecha: 10/06/2025 02:30
En una dramática escalada de su confrontación con las autoridades de California, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, preparaba en la noche de este lunes una orden con el despliegue de 700 marines en Los Ángeles, que se sumarán a otros 2.000 militares de la Guardia Nacional convocados para sofocar las protestas contra las redadas a inmigrantes indocumentados. Tras enterarse de la inusual decisión de la Casa Blanca, anticipada por funcionarios de Seguridad a la cadena CNN y a The New York Times, el gobernador californiano, el demócrata Gavon Newsom, criticó la “demente” medida del “dictatorial” presidente. “Los marines de Estados Unidos han servido honorablemente en múltiples guerras en defensa de la democracia”, publicó Newsom en X. “No deberían ser desplegados en suelo estadounidense enfrentándose a sus propios compatriotas para cumplir la fantasía demente de un presidente dictatorial. Esto es poco estadounidense”, añadió. Con anterioridad, el gobierno de California había presentado una demanda judicial contra el gobierno de Trump por haber enviado tropas de la Guardia Nacional a su territorio sin contar con el pedido de las autoridades locales, algo no visto en los últimos 60 años. Los marines serían desplegados desde su base en Twentynine Palms, en el desierto del sur de California, dijo la CNN. El presidente republicano apuntó además que espera tener “el apoyo” del gobernador de California porque, dijo, él es el “gran beneficiario si se solucionan sus problemas”. Protestas y represión Trump dio estas declaraciones después de haber expresado que respaldaría que Newsom (a quien llama new scum, “nueva escoria”) fuera arrestado por su gestión de la situación, en un incremento de la escalada dialéctica entre ambos. Newsom ha acusado a Trump de provocar una “crisis artificial” en California y retó al zar de la frontera de la Casa Blanca, Tom Homan, a que lo arreste después de que éste dijera que las autoridades locales pueden ser detenidas si bloquean la política migratoria de la Casa Blanca. El envío de 700 marines, que se unirían a los dos mil agentes de la Guardia Nacional en la segunda ciudad más grande del país, podría intensificar las tensiones tras cuatro días de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes que protestan contra las deportaciones de migrantes. Ayer las calles se mantenían más tranquilas luego de choques y represión con balas de goma, carros hidrantes y gases lacrimógenos. Hay al menos 150 arrestados en Los Angeles desde el viernes. Trump calificó a los manifestantes de “insurrectos”. Más temprano, había dicho por su red Truth Social: “Parece que realmente las cosas van mal en L.A. ¡Envíen a la tropa!!! detengan a la gente encapuchada, ahora”. Podría extenderse Este lunes había indicios de que la tensión podría extenderse a otras ciudades. En San Francisco, la policía informó de más de 150 arrestos en protestas de solidaridad el domingo. La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, declaró a CNN que, si bien condenaba la violencia, ésta había sido limitada. “Esto no se trata de disturbios civiles a nivel de la ciudad”, afirmó. Para desplegar a los marines, Trump debe invocar la Ley sobre la Insurrección. “Esta ley se invoca cuando todo va mal”, dijo a AFP el jurista William Banks. “Si declara el estado de insurrección, sus poderes serán casi ilimitados”. Detrás del aspecto jurídico, el tira y afloja es muy político. California es un bastión demócrata, apuntado por la derecha radical por sus políticas progresistas. Pero Trump parece agitar el tema como un recurso para favorecer su agenda antiimigrante en medio de nubarrones sobre el futuro económico tras su polémica guerra arancelaria.
Ver noticia original