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Concordia » Saltograndeextra
Fecha: 09/06/2025 10:00
Entre Ríos cerró mayo con una de las peores caídas reales de coparticipación nacional en todo el país: un desplome del 24,6% en términos reales respecto al mismo mes del año pasado. La provincia fue una de las más castigadas por el derrumbe de la recaudación del impuesto a las Ganancias, que se desplomó un 41% real interanual. Esta situación ya pone en tensión las cuentas públicas provinciales, en un contexto de ajuste nacional y freno a la actividad económica. La provincia de Entre Ríos cerró el mes de mayo con una de las mayores caídas reales en materia de coparticipación nacional: un -24,6% interanual, en línea con el fuerte ajuste que afectó al conjunto del país. La baja estuvo impulsada, principalmente, por la desaceleración en la recaudación del Impuesto a las Ganancias, que se desplomó un 41% real respecto al mismo mes del año anterior. La caída en Entre Ríos, aunque grave, no fue un caso aislado: todas las jurisdicciones del país registraron variaciones reales negativas, con un rango que va desde el -19,1% de Salta, que logró amortiguar mejor el golpe, hasta el -26,1% de CABA, la más afectada. UN GOLPE MÁS DURO QUE EL ESPERADO Aunque ya se proyectaba una contracción importante —el IARAF anticipaba una baja del 21%—, los números de mayo superaron incluso los pronósticos más pesimistas. Esta contracción está relacionada, entre otras causas, con el ajuste por inflación en los quebrantos impositivos de las empresas, lo que redujo significativamente los saldos a pagar. En el caso de Entre Ríos, el desplome de -24,6% se sitúa por encima del promedio nacional (-23,3% para todas las transferencias automáticas) y la ubica entre las provincias más perjudicadas en términos relativos. COMPARACIÓN REGIONAL: CÓMO ESTÁ ENTRE RÍOS FRENTE A OTRAS PROVINCIAS Comparada con otras provincias de tamaño medio, Entre Ríos muestra un desempeño similar al de La Pampa (-24,5%) y San Juan (-24,6%), pero claramente peor que Misiones (-23,0%), Tucumán (-23,2%) o Chubut (-23,2%). En cambio, si se observa el acumulado anual, la provincia se posiciona por debajo del promedio nacional (2,7% de suba real) y de provincias con mejor performance como Salta (6,5%), Buenos Aires (5,5%), o Tucumán (3,2%). Este contexto plantea interrogantes para el segundo semestre del año, donde la sostenibilidad de las cuentas provinciales dependerá de la capacidad del Estado nacional para revertir la caída de la recaudación y evitar nuevos recortes. FRIGERIO AFILA EL LÁPIZ: RECORTE DE PERSONAL EN RESPUESTA A LA CAÍDA DE INGRESOS La mejora acumulada a mayo no alcanza para disimular la gravedad del ajuste mensual. La provincia de Entre Ríos —como muchas otras— enfrenta una pérdida de recursos real que impacta directamente sobre su capacidad operativa y presupuestaria. El derrumbe real del 24,6% en mayo, un punto por encima del promedio nacional, llevó al gobierno de Rogelio Frigerio a acelerar un paquete de medidas de ajuste que buscarán contener el impacto fiscal sin desatender servicios esenciales. Desde el Ejecutivo provincial comparan la situación actual con lo vivido durante el momento más crítico de la pandemia: “Estamos ante una baja que, en términos reales, puede ser incluso más dramática que lo que vivimos en 2020”, advierten fuentes oficiales. Y es que el crecimiento nominal de los giros automáticos fue apenas del 10,6%, frente a un abril que había registrado una variación de más del 60%. En este contexto, el ministro de Economía provincial —cuyo nombre aún no fue revelado oficialmente por la Casa Gris— adelantó que la administración Frigerio está “firme” en su decisión de actuar “con responsabilidad” y tomar medidas concretas para sostener las finanzas públicas. Entre las decisiones que se anunciarán en breve se incluye un recorte adicional del 35% en el denominado “gasto de la política”, apuntando principalmente a personal fuera de escalafón y estructuras políticas no vinculadas a funciones esenciales. También se realizará una revisión profunda de áreas y organismos “que no estén directamente abocados a prestar un servicio concreto al ciudadano”. El paquete forma parte de una estrategia defensiva ante un panorama que, según admiten en despachos oficiales, podría agravarse en los próximos meses si la recaudación nacional no mejora o si no se revisa la política fiscal del gobierno central. Mientras tanto, Frigerio afila el lápiz.
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