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Parana » Plazaweb
Fecha: 09/06/2025 09:44
En una Final emocionante, que terminó igualada 2 a 2, en el tiempo reglamentario, Portugal se impuso por penales 5 a 3 ante España para alzarse con el trofeo del certamen de selecciones organizado por la UEFA. PODÉS LEER TAMBIÉN: España venció a Inglaterra y se quedó con la Eurocopa En una final de alto voltaje en el Allianz Arena, Portugal se consagró campeón de la Nations League al derrotar a España por penales, luego de igualar 2 a 2 en los 120 minutos. Fue un encuentro intenso, de momentos brillantes, con alternativas cambiantes y la tensión que solo una definición directa puede ofrecer. Desde el arranque, el equipo de Roberto Martínez mostró intenciones claras de lastimar: una jugada profunda al segundo palo encontró a João Neves muy cerca de abrir el marcador, pero Unai Simón sostuvo el cero con una buena intervención. España respondió con lo que mejor sabe hacer: control de pelota y paciencia. Y a los 21 minutos, la presión dio resultado. Tras una serie de rebotes en el área, Martín Zubimendi rompió el cero y puso el 1 a 0 para la Roja. La alegría duró poco para los de Luis de la Fuente, porque cinco minutos más tarde, Nuno Mendes sacó un zurdazo imparable para empatar el juego. El primer tiempo no bajó el ritmo, y a los 42', Mikel Oyarzabal, tras una gran habilitación de Pedri, volvió a desnivelar y le devolvió la ventaja a España. Pero Portugal tenía una carta más: en el complemento, cuando el partido amagaba con enfriarse, Mendes volvió a ser clave, esta vez con una diagonal profunda. Su remate desviado encontró a Cristiano Ronaldo, siempre bien ubicado, que empujó el 2 a 2 y le puso suspenso a la noche alemana. Ya en el alargue, el cansancio fue protagonista. Los lusos reclamaron penal tras otra gran jugada individual de Mendes a los 9’ del primer tiempo suplementario, pero el árbitro no lo concedió. Lo demás fue imprecisión, piernas pesadas y precaución de ambos lados. La historia se definió desde los doce pasos. Allí, Portugal fue más certero. Convirtió todos sus tiros y encontró en Diogo Costa a su héroe: el arquero detuvo el cuarto penal español y selló el título para los lusos, que celebraron a lo grande en Múnich. Una final acorde a la expectativa. Una noche de estrellas, goles y emociones. Y una Portugal que gritó campeón.
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