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» Diario Cordoba
Fecha: 09/06/2025 04:38
España no pudo encadenar su segundo título de la Nations League pese a mostrar la misma resiliencia que horas antes hizo a Carlos Alcaraz salir campeón de Roland Garros. En un partido abierto ante una Portugal que hizo méritos para ganar el título, los de De la Fuente cayeron en la tanda de penaltis, después de que Diogo Carlos desviase el lanzamiento de Morata. Portugal ganó y Cristiano, que marcó el empate, sigue siendo el rey ante un Lamine que no estuvo a la altura de otros partidos. Goles 'realistas' Diez minutos incomodó el partido a España, el tiempo que tardaron Pedri y Fabián en desactivar las trampas de los portugueses en la medular, la cual poblaron con varias cortinas de jugadores escalonados saltando a la presión. Advirtieron los de De la Fuente que la final se ganaba por fuera y tocaron con paciencia atrayendo a su defensa para luego buscar a Nico a la espalda de Joao Neves. Huijsen descargó por ese lado y en su primera aparición Williams sirvió un pase atrás a Pedri que no cogió puerta. Segundos después el propio Nico sacaba una rosca que tampoco acabó entre palos por poco. El premio llegó en el minuto 18, en un lance en el que España generó ventaja en la derecha, desde donde Lamine sirvió un pase que se quedó a mitad de camino entre Oyarzabal y Nico, pero apareció la fe de Zubimendi para remacharlo a la red. Había tanta pizarra, que cualquier movimiento inesperado generaba superioridad. De hecho, a los 26 minutos Nuno Mendes se animó a sumarse al ataque por sorpresa con encontrar oposición hasta atornillar su zurdazo a la red. El empate equilibraba el marcador y la pizarra. Todo Portugal, salvo Cristiano, se agazapaba tras el balón, mientras España tiraba la línea lejos de su área. Con Vitinha y Bruno estrechamente vigilados, Bernardo y Conceiçao no gozaban de balones limpios y esto desactivaba a Cristiano. España generaba más incertidumbre en el área de Costa, que en la última jugada del primer tiempo vio cómo Pedri filtraba un pase a la espalda de los centrales, donde aparecía el más listo de la clase, Mikel Oyarzabal, para tocar lo justo y marcar. El donostiarra, acudía puntual a su cita con las finales como en 2021 en la Nations ante Francia y el verano pasado en la Eurocopa ante Inglaterra. Mikel Oyarzabal marca el segundo gol en la final de la Nations League ante Portugal / RONALD WITTEK / EFE Portugal se rearma y Cristiano empata Blindó la derecha Martínez en el descanso con Semedo, además de sumar a la ecuación en el medio la variante física de Rubén Neves. Necesitaba Portugal crecer minimizada por el fútbol líquido de los de De la Fuente. La sensación era de dominio claro, pero el marcador mantenía al rival a un croché en el mentón. Y a la hora de partido la enésima estampida de Nuno Mendes retrató una desatención de Lamine, terminando con un centro envenenado que Cristiano Ronaldo acertó a empujar a la red con ese instinto voraz que le mantiene vivo a los 40 años. A falta de fútbol, el corazón portugués equilibraba el duelo encendiendo las gradas. Pedía el partido cambios en las filas españolas, pero De la Fuente prefirió esperar. La final estaba inciertamente abierta cuando saltaron al campo Leao, Renaro Vieira, Merino y un Isco que se vestía de nuevo la camiseta seis años después. El de Haro realizó cambios naturales, sacando a Pedri y Fabián. Martínez afiló su equipo arriba intercambiando el talento de un Bernardo gris por la potencia de un Leao que además tenía cerrando su lateral a un Mingueza que no es habitual en estos menesteres. La final se jugaba en el filo de la navaja. Una jugada de talento o un lance fortuito podían decidirla. Así que ambas selecciones decidieron minimizar riesgos y fiarlo todo a algún chispazo. Sacó Diogo Costa un disparo de Isco y Nico tiró otra rosca que besó el palo portugués. Los lusos tuvieron la suya en un centro chut de Bruno tras una cabalgada de Leao. Después de una temporada extenuante, la final de la Nations se decidiría en la prórroga. Martínez tiró atrás a Neves, armando una línea de tres cuando atacaba, y los laterales Mendes y Semedo se metían por dentro generando superioridades que incomodaban a España. De la Fuente trató de blindar la derecha con Porro y puso a Baena por un Nico muy castigado por la pubalgia. La pizarra daba paso al cansancio, la fatiga entraba como nueva variable en la ecuación de un partido en el que se llegaba rápido a las áreas, pero con poco fuelle. La banda izquierda de Portugal se convirtió en una pesadilla para los españoles con Nuno Mendes y Leao superando españoles una vez tras otra. Pidió penalti Portugal en otro eslalom deslumbrante de Nuno Mendes en el que Baena le tocó cuando ya iba camino del suelo. Cuando De la Fuente dejó en el banquillo a Lamine, al descanso del tiempo extra, los lusos ganaban claramente a los puntos. La segunda tuvo color español, con dominio de la pelota y un disparo desde el mediocampo de Porro que puso un nudo en las gargantas portuguesas. Fallo de Morata El partido se decidió en la tanda de penaltis, adonde los dos llegaron sin sus estrellas, sustituidas durante el partido. Fue el momento de los secundarios y la secuencia de la tanda fue esta: Gonzalo Ramos (gol), Merino (gol), Vitinha (gol), Baena (gol), Bruno (gol), Isco (gol), Nuno Menmdes (gol), Morata (fallo) y Rubén Neves (gol). España se quedó a las puertas y el error de Morata, que tanto ha dado a este equipo, le dejó sin título. Portugal ganó a España. Lamine tendrá que esperar para heredar la corona de Cristiano.
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