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Concordia » Saltograndeextra
Fecha: 08/06/2025 17:30
El caso generó conmoción y repudio. La cabeza del animal fue dejada sobre la portera del lugar de trabajo de su dueño. La ONG Amigos de los Animales denunció el hecho y advierte que podría tratarse de una amenaza con tintes mafiosos. La Policía de Paysandú y la Fiscalía de Segundo Turno, a cargo del Dr. Joaquín Suárez, investigan un caso de extrema violencia animal tras el hallazgo de la cabeza de una perra border collie colgada en la portera de un predio laboral. La víctima, llamada July, había sido reportada como desaparecida por su dueño, quien jamás imaginó el desenlace. Según relató Laura de León, referente de la organización Amigos de los Animales, “la perra no se había perdido, sino que fue retirada de su casa con cadena y collar. Luego, decapitada en otro lugar y su cabeza colocada en la portera del trabajo de su dueño”. Fue otro operario quien descubrió la escena al día siguiente y dio aviso. Cámaras de seguridad de la empresa registraron la llegada de un vehículo del que bajó una persona para dejar la cabeza del animal y luego retirarse. El rodado, que transportaba a dos ocupantes, ya fue identificado por la Policía, que trabaja en la investigación. El veterinario Fernando Nan realizó la necropsia de la cabeza, único resto hallado del animal, y confirmó un dato estremecedor: July fue decapitada mientras aún estaba viva. Desde la ONG se presentaron denuncias ante el Instituto Nacional de Bienestar Animal (INBA), la comisaría correspondiente y la fiscalía. “Esto excede el maltrato animal. Es una amenaza directa, con características mafiosas. El dueño y su entorno están atemorizados, temen que pueda pasar algo más”, advirtió De León. La organización también señaló que este tipo de actos deben ser investigados con celeridad y firmeza. “No solo es un crimen atroz contra un ser vivo. Es un mensaje violento y un posible intento de amedrentamiento. No se puede naturalizar ni quedar impune”, expresó la activista. El caso despertó una profunda preocupación entre organizaciones proteccionistas y vecinos, que exigen justicia y medidas urgentes para garantizar la seguridad del denunciante y de su entorno. Fuente: El Telégrafo de Paysandú.
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