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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 07/06/2025 14:30
Expertos advierten que el uso intensivo de apps de citas puede afectar la salud mental, generando adicción, baja autoestima y una peligrosa búsqueda de validación externa (Crédito Getty) La experiencia de Jenny O’Hara al buscar pareja en línea la llevó a adoptar un enfoque radicalmente distinto tras sentirse decepcionada por la superficialidad y el desgaste emocional de las aplicaciones de citas. Inspirada por el método “Burned Haystack”, decidió especificar con claridad sus expectativas en su perfil y bloquear a quienes no coincidían con sus criterios. Esta estrategia, que surgió de la frustración y la necesidad de proteger su bienestar, refleja una tendencia creciente entre los usuarios de aplicaciones de citas: la búsqueda de mayor control y autenticidad en un entorno que, según expertos citados por The Washington Post, puede afectar la salud mental de quienes lo utilizan. De acuerdo con The Washington Post, más de 95,6 millones de adultos en Estados Unidos han utilizado sitios o aplicaciones de citas, según datos de la firma de investigación SSRS. La popularidad de estas plataformas, como Tinder y Match, no siempre se traduce en experiencias positivas. “Mi experiencia con pacientes que usan aplicaciones de citas es que conduce al agotamiento, la gente simplemente se cansa”, explicó Paul Hokemeyer, terapeuta matrimonial y familiar en Telluride, Colorado, al medio. Asimismo, señaló que el uso intensivo de estas aplicaciones consume tiempo, energía y emociones, y expone a los usuarios a un alto potencial de rechazo. El fenómeno de la adicción a las aplicaciones de citas se ha vuelto cada vez más común. Según encuestas del Pew Research Center citadas por The Washington Post, en 2022, tres de cada diez adultos estadounidenses afirmaron haber usado una app o sitio de citas, y un 9% lo hizo en el último año. Tinder se posiciona como la más popular, utilizada por el 14% de los adultos, mientras que Match es preferida por personas de 50 años o más, según SSRS. El atractivo de estas plataformas radica en la gratificación instantánea que ofrecen. “Los usuarios pueden volverse adictos a las aplicaciones y a la descarga de dopamina que experimentan cuando alguien que les interesa les responde”, explicó Hokemeyer a The Washington Post. Además, advirtió sobre la tendencia a la cosificación: “Se reducen a transacciones, y para los pacientes que sufren trastornos de salud mental, cuanto más profunda es su depresión o ansiedad, mayor es su nivel de compromiso con estas aplicaciones”. Aunque brindan oportunidades a personas con fobias o traumas, las plataformas de citas requieren claridad en las expectativas y límites personales para evitar experiencias negativas (Crédito Getty) El uso compulsivo de las aplicaciones de citas se asemeja al “doomscrolling” de las redes sociales, donde las personas buscan validación y una descarga de dopamina y serotonina que rara vez llega o, si lo hace, es efímera. “No mejora su bienestar, como lo haría estar presentes en sus vidas, buscar la elevación desde dentro, conectar con seres humanos en tiempo real”, afirmó Hokemeyer. La terapeuta matrimonial y familiar Racine Henry, que atiende a pacientes en Nueva York, Nueva Jersey y Carolina del Norte, advirtió sobre el impacto negativo de estas aplicaciones en la autoestima, especialmente entre los jóvenes. “Puede hacer que la gente se sienta fea y no deseada”, dijo a The Washington Post. Además, subrayó la importancia de que los usuarios tengan niveles saludables de autoestima, autoconfianza e identidad antes de involucrarse en estas plataformas, y recomendó no dar demasiada importancia a la opinión de alguien que solo los evalúa a partir de unas fotos y unas líneas en una pantalla. No obstante, Henry reconoció que las aplicaciones de citas pueden ofrecer ventajas a personas introvertidas, con fobias o que han experimentado traumas relacionados con las citas o la sexualidad, ya que les permiten conocer gente en un entorno más seguro y controlar el acceso a su vida personal. “Las aplicaciones son una buena manera para que conozcan personas en un entorno seguro y se tomen su tiempo para conocerlas, pudiendo controlar más el acceso de esa persona a su vida”, explicó. La claridad en las expectativas y la comunicación de objetivos comunes resultan fundamentales para evitar experiencias negativas y riesgos para la seguridad. Henry recomendó que cada usuario exprese con claridad lo que busca en la aplicación, ya sea una relación seria o un encuentro casual, para evitar malentendidos y posibles daños emocionales. Nicole Karwashan, terapeuta matrimonial y familiar en White Plains, Nueva York, quien conoció a su actual prometido en línea, destacó la importancia de las expectativas al usar estas plataformas. “Cuando alguien entra a una aplicación de citas con la expectativa de buscar validación externa o encontrar al amor de su vida, creo absolutamente que puede perpetuar síntomas de depresión”, afirmó a The Washington Post. Aunque no ha observado que las aplicaciones causen depresión directamente, sí ha visto que su uso puede detonar trastornos alimenticios, en aquellos que intentan curar sus perfiles para proyectar una imagen específica. Karwashan relató que algunos de sus pacientes presentan un uso tan crónico de las aplicaciones que las notificaciones interrumpen incluso las sesiones de terapia. “Definitivamente se ha puesto bastante mal con algunos de mis pacientes”, dijo. “Ahí es cuando decimos: ‘¿Cuál es la intención? ¿Por qué le estamos dando tanto poder a esta aplicación y a estas personas aleatorias?’”. Para contrarrestar estas tendencias, Karwashan recomienda pausas en el uso de redes sociales y aplicaciones de citas, con el fin de evitar la adicción y recuperar el control sobre el bienestar emocional. El enfoque selectivo y consciente en las apps de citas, como el adoptado por O’Hara, refleja una tendencia creciente hacia la autenticidad y el control emocional en los vínculos digitales (Imagen ilustrativa Infobae) El carácter transaccional de las aplicaciones de citas dificulta el desarrollo de la resiliencia y la tolerancia al malestar a corto plazo, habilidades necesarias para construir relaciones sólidas a largo plazo. Hokemeyer explicó a The Washington Post que trabaja con sus pacientes para alejarlos de estas plataformas y fomentar la capacidad de enfrentar la incomodidad temporal en las relaciones reales, lo que considera esencial para el crecimiento personal. La experiencia de O’Hara ilustra cómo un enfoque más selectivo puede transformar la experiencia en las aplicaciones de citas. Tras modificar su perfil y adoptar el método “Burned Haystack”, ideado por Jennie Young, escritora y decana asociada de la Universidad de Wisconsin en Green Bay, O’Hara especificó que buscaba a alguien demócrata, con empleo, aficionado a los eventos culturales en Nueva York y que no viviera con su exesposa. Aunque su lista de requisitos redujo drásticamente el número de respuestas, O’Hara consideró que este filtro era parte del proceso. “Estaba pidiendo lo que quiero en lugar de conformarme con lo que venga”, explicó. El grupo de Facebook “Burned Haystack Dating Method”, creado por Young, cuenta con más de 198.000 miembros, lo que evidencia el interés por estrategias que priorizan la autenticidad y la claridad en las expectativas. O’Hara tardó aproximadamente un mes en encontrar a su actual pareja, con quien lleva un año y medio de relación. A pesar de su satisfacción, reconoce que en ocasiones extraña los mensajes de “Te extraño” que recibía de otros hombres en línea, aunque ahora comprende que esa dinámica no era saludable ni para ella ni para ellos. “Creo que esa es una de las cosas interesantes de estas aplicaciones de citas”, reflexionó. “La gente las usa mirando fotos y perfiles, sin darse cuenta de que hay personas reales al otro lado”, agregó. The Washington Post recopiló una serie de recomendaciones para quienes utilizan aplicaciones de citas, con el objetivo de minimizar los riesgos para la salud mental. Entre ellas destacan: limitar el tiempo de uso a una sola revisión diaria, definir claramente lo que se busca en una pareja y expresarlo, buscar a alguien con objetivos comunes, evitar buscar validación a través de la aplicación y, en caso de tendencia a la depresión, prestar atención a cómo el uso de estas plataformas afecta el estado de ánimo. El auge de las aplicaciones de citas ha transformado la manera en que millones de personas buscan pareja, pero también ha generado nuevos desafíos emocionales y psicológicos. Como señaló The Washington Post, la clave para navegar este entorno digital radica en el autoconocimiento, la gestión de expectativas y la capacidad de establecer límites saludables.
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