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  • Trump se atrinchera en la Casa Blanca ante el ataque de Musk: «Ha perdido la cabeza»

    » Corrienteshoy

    Fecha: 06/06/2025 11:32

    Trump se atrinchera en la Casa Blanca ante el ataque de Musk: «Ha perdido la cabeza» Durante la noche del jueves, las reuniones de emergencia se trasladaron del Despacho Oval a la residencia privada de la Casa Blanca. Donald Trump , con semblante grave en una breve aparición pública, por primera vez no respondió con la vehemencia habitual a algunos de los ataques más duros que ha recibido.Nunca antes se había enfrentado a una amenaza de este tipo: un adversario fuera de su control, con recursos ilimitados y que ahora propone abiertamente su destitución. La razón, según sus asesores —que conocen bien a Elon Musk y han lidiado con sus estallidos durante los últimos cuatro meses y medio—, es que escalar este conflicto podría suponer un riesgo existencial para la presidencia.Primer paso: control de daños. Ronda de llamadas. Hasta del propio Trump. A última hora, el presidente telefoneó personalmente a varios medios —amigos y no tanto— intentando calmar las aguas. Restó importancia a la acusación de Musk sobre Epstein , fingió no haberse enterado y repitió que su equipo está centrado en la aprobación de su ley estrella de presupuestos. Su mensaje, recogido por la web Politico, fue claro: «Lo importante ahora es pasar el proyecto. Lo demás es ruido».Noticia Relacionada Se les rompió el amor estandar Si Musk y Trump, un idilio insostenible de poder y dinero Javier AnsorenaTampoco le gusta a Trump mostrar debilidad o titubeos. «Ha perdido la cabeza», zanjó este viernes por la mañana en una conversación telefónica con Jonathan Karl, periodista de ABC News y uno de sus biógrafos más veteranos. Fiel a su estilo, el presidente no se aferra a una sola estrategia: lanza varios mensajes a la vez, tantea el terreno y se queda con lo que le funciona.Mientras tanto, su equipo más cercano activó canales paralelos con legisladores republicanos, donantes clave y líderes de opinión. Les pidieron contención: que no tomaran partido, que no atacaran necesariamente a Musk, pero que tampoco validaran sus palabras. La orden era resistir, ganar tiempo, evitar una fractura pública mayor y esperar a que las aguas vuelvan a su cauce.Minimizar el papel de MuskUno de los primeros en salir a hablar este viernes fue Peter Navarro , asesor comercial de Trump y uno de los blancos preferidos de Musk, que hace unas semanas lo llamó «más tonto que un saco de ladrillos». Navarro, lejos de devolver el golpe, se limitó a minimizar el papel de Musk: «La gente entra y sale de la Casa Blanca. Era un empleado especial, con fecha de salida, y ya está». No hubo ataque, ni descalificación, ni revancha. Una señal clara de que Trump ha ordenado contención.En paralelo, se blindó la agenda presidencial. Todo a puerta cerrada, y después salida al club de golf de Bedminster, en Nueva Jersey, donde pasará el fin de semana.Quedó en preparación una llamada prevista para el viernes por la mañana: con el propio Musk. La había propuesto Bill Ackman, uno de los gestores de fondos más influyentes de Wall Street, cercano a ambos y que en las últimas horas se ha ofrecido como mediador. Ackman, que ha invertido miles de millones en empresas tecnológicas y ha respaldado públicamente a Trump en el pasado, pidió una tregua «por el bien del país» y trató de convencer a Musk de que frenar ahora era lo más inteligente. En X, Musk le dio la razón, pero sin más.Hace apenas una semana exacta, Elon Musk salía de la Casa Blanca con honores. Acababa de recibir de manos del presidente una réplica simbólica de la llave del Despacho Oval. Fue una jornada de gestos, sonrisas tensas y frases muy medidas. Se fue como un héroe.A Musk, al salir de la Casa Blanca, le preguntaron por un reportaje de The New York Times que revelaba detalles muy específicos sobre su consumo de ketamina y otras sustancias, incluyendo episodios de descontrol que, según el texto, lo llevaban incluso a orinarse encima. Era evidente que esa información solo podía haber salido de alguien muy, muy cercano a la campaña. Musk arremetió públicamente contra el diario que publicó la noticia, pero en privado sabía que la filtración venía de mucho más cerca: de dentro de la propia Casa Blanca. Porque allí, como es sabido, las filtraciones más letales casi siempre nacen del entorno más inmediato del presidente. A veces, del propio presidente.Estrategia pactadaEsta semana, Musk fue tomando distancias. Circularon todo tipo de teorías en la Casa Blanca, la más común: que era una estrategia pactada para mejorar las ventas de Tesla —cuya caída en bolsa ha sido grave— y mostrarse imparcial ante la opinión pública. Pero las acusaciones lanzadas el jueves descartan esa lectura. Esto ya es guerra total. Tierra quemada. Un divorcio con enemistad declarada.El divorcio tiene consecuencias devastadoras y amenaza con desatar una cadena de tensiones dentro del propio núcleo de poder de Trump. Tras su salida de la Casa Blanca, Elon Musk fichó como portavoz a Katie Miller, esposa de Stephen Miller, el asesor más influyente del presidente y uno de los pocos con acceso directo al Despacho Oval. La maniobra fue vista como una provocación. Días después, en plena escalada de ataques en la red X, Musk dejó de seguir a Miller, una señal inequívoca de ruptura interna.El vicepresidente J. D. Vance quedó atrapado en medio del conflicto. Musk intentó sembrar discordia apoyando abiertamente un proceso de impeachment para deponer a Trump y colocar a Vance en la presidencia. Fue un golpe quirúrgico, dirigido al ego presidencial. Trump, profundamente celoso de su autoridad y alérgico a cualquier sombra de sucesión, no respondió directamente, pero el gesto no pasó desapercibido. En los últimos meses ha evitado confirmar que Vance sea su heredero natural y, en paralelo, ha concentrado poder en torno a Marco Rubio, su secretario de Estado y consejero de Seguridad Nacional, que cada vez asume más funciones estratégicas. La guerra con Musk no solo ha dinamitado una alianza: está reconfigurando el mapa de lealtades dentro del trumpismo. Fuente: https://www.abc.es/internacional/trump-atrinchera-casa-blanca-ante-ataque-musk-20250606151930-nt.html

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