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  • Gobierno financiará parcialmente el costo de la luz para todos los hogares, incluso los de altos ingresos, hasta octubre

    Parana » Informe Digital

    Fecha: 04/06/2025 18:39

    El Gobierno ha optado por no trasladar a los hogares el aumento estacional en el precio de la energía eléctrica durante el invierno, con el objetivo de evitar un brusco incremento en las facturas de electricidad y en la inflación antes de las elecciones. Esta decisión ha llevado a que todos los usuarios de Argentina, incluidos aquellos clasificados con altos ingresos, vuelvan a recibir subsidios en su consumo de electricidad desde mayo. Hasta abril, este beneficio solo estaba destinado a los sectores considerados de ingresos bajos y medios, de acuerdo con el esquema de segmentación tarifaria vigente. La situación, detallada técnicamente en recientes resoluciones oficiales, contrasta con las comunicaciones previas que indicaban la eliminación de la asistencia para aquellos que demostraran capacidad de pago. De hecho, residentes de Puerto Madero, barrios cerrados, countries y zonas de alto poder adquisitivo del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) seguirán recibiendo subvenciones. Hace unos días, el Gobierno había informado que un grupo de usuarios de estos lugares en el AMBA, así como en el resto del país, sería “excluido del régimen de subsidios energéticos”. Desde la Secretaría de Energía optaron por no hacer comentarios ante la consulta específica de Infobae, aunque no desmintieron ni modificaron ninguna de las medidas analizadas por este medio y corroboradas por especialistas en la materia. A partir de mayo, ningún usuario residencial paga el costo total de la energía eléctrica que consume, gracias a la programación de precios establecida por la Secretaría de Energía para el periodo mayo-octubre, tal como destacó Julián Rojo, economista del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) de la UBA y Conicet. Las facturas de energía incluyen cuatro componentes: el precio de la electricidad o gas, el transporte, la distribución y los impuestos. El subsidio corresponde a la compensación del Tesoro, a través de Cammesa, a los generadores por el costo de la energía que los usuarios no abonan. El esquema de segmentación vigente clasifica a los hogares en tres niveles: Nivel 1 (altos ingresos), que abonan el costo total; Nivel 2 (bajos ingresos), que reciben una mayor bonificación; y Nivel 3 (ingresos medios), que obtienen un descuento menor. Esta clasificación se mantuvo hasta abril y se modificó a partir de mayo. Dado que el precio de la energía tiende a aumentar en invierno, el Ministerio de Economía, liderado por Luis Caputo, a través de la Secretaría de Energía, bajo la dirección de María Tettamanti, decidió no trasladar el incremento completo a los usuarios, con el fin de evitar un impacto en las boletas y en la inflación. Todo ello quedó reflejado en las Resoluciones 171/2025, que determinan la reprogramación semestral definitiva del invierno, y en las resoluciones 110/2025 y 36/2025, que establecen los nuevos parámetros de bonificación de los precios mayoristas del gas y la energía eléctrica. En lo que respecta a la electricidad, el precio del megavatio hora (MWh) pasó de $61.000 (noviembre 2024 – abril 2025) a $85.000 (mayo – noviembre 2025). No obstante, los usuarios de N1 pagarán $62.950 por MWh, lo que equivale al 74% del costo total. Los N2 abonarán $19.263 (24%) y los N3 $29.095 (34%) hasta el límite de consumo subvencionado; por el excedente, pagarán como N1. Un esquema similar se aplica al servicio de gas natural por redes, donde la subvención ya abarca a todos los usuarios. “No es ilógico, ya que en este contexto es insostenible trasladar un aumento del 40% a la demanda, incluso para los considerados de altos ingresos. Las bonificaciones de N2 y N3 se calculan en función de lo que abona el N1”, comentó Rojo. En este contexto, el vocero presidencial Manuel Adorni anunció la semana pasada que más de 15.500 usuarios de Puerto Madero y barrios cerrados del AMBA “serán excluidos del régimen de subsidios energéticos”. Según Adorni, el 44% de estos usuarios estaba clasificado como Nivel 2 y el 56% como Nivel 3, aunque disfrutaban de privilegios como piscinas climatizadas y consumos mensuales similares a los de una PyME. El ahorro estimado por esta medida sería de $3.000 millones, y aseguró que la recategorización automática comenzaba en ese momento. Sin embargo, la Disposición 1/2025 de la Subsecretaría de Planeamiento Energético aclara que los hogares ubicados en más de 400 áreas georreferenciadas del AMBA como de altos ingresos serán automáticamente recategorizados como N1, manteniendo algún descuento en su factura y deberán demostrar, si se requiere, que cumplen con los requisitos para ser considerados como N2 o N3. El Gobierno espera extender este nuevo criterio de exclusión a todo el país y busca la colaboración de las provincias para identificar zonas de alto poder adquisitivo, tal como anticipó Infobae en exclusiva. “De acuerdo con el análisis realizado por esta Subsecretaría, se observa que hay una gran cantidad de usuarios residenciales clasificados como N2 (Menores Ingresos) y N3 (Ingresos Medios), que se encuentran en áreas geográficas de alto poder adquisitivo y que presentan manifiesta capacidad contributiva”, consignó Planeamiento Energético. La Secretaría de Energía también confirmó que habrá una recategorización: “Los usuarios que fueron catalogados en años anteriores como de ingresos bajos y/o medios, y residen en countries, barrios cerrados y Puerto Madero, perderán ese beneficio y serán recategorizados como de ingresos altos (N1), al encontrarse en zonas de manifiesta capacidad contributiva.” No obstante, no se hizo mención al contenido de las resoluciones del organismo publicadas en el Boletín Oficial que establecen la extensión de los subsidios al menos hasta octubre. Recientemente, en un comunicado, Energía destacó: “Esta decisión marca un punto de inflexión: se termina el subsidio para quienes no lo necesitan. No hay equidad en un sistema que financia el consumo de usuarios de altos ingresos con el dinero de los contribuyentes.” Al respecto, Nicolás Gadano, economista especializado en energía, sostuvo: “La realidad es que hoy ningún usuario está abonando el costo total de la energía. Es positivo que los hogares que residen en barrios de alto poder adquisitivo pasen a ser considerados N1 para corregir algunos errores de inclusión. Probablemente, el año que viene retornen a pagar el costo completo.” Según el IIEP (UBA-Conicet), basándose en los últimos datos oficiales disponibles, el grupo N1 está compuesto por 6.918.821 hogares (42% del total), N2 por 6.244.657 (38,1%) y N3 por 3.211.792 (19,6%). En otras palabras, casi el 60% de los usuarios residenciales aún recibe subsidios, a pesar de una reducción cercana a dos millones de beneficiarios desde que asumió Milei. La electricidad es el servicio más generalizado en todo el país y representa cerca de dos tercios del gasto en subsidios del Tesoro. El Gobierno está evaluando un nuevo esquema de subsidios antes de fin de año, con el fin de concentrar la ayuda en los sectores más vulnerables y avanzar hacia la desregulación total del sistema eléctrico. Sin embargo, tiene hasta julio de 2026 para analizar modificaciones. Mientras tanto, todos los hogares argentinos, incluidos los de Puerto Madero y countries, continuarán recibiendo algún nivel de subsidios hasta octubre próximo.

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