03/06/2025 23:39
03/06/2025 23:38
03/06/2025 23:38
03/06/2025 23:38
03/06/2025 23:38
03/06/2025 23:37
03/06/2025 23:37
03/06/2025 23:37
03/06/2025 23:37
03/06/2025 23:36
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 02/06/2025 06:35
En medio de una crisis política sin precedentes, los tres principales aspirantes buscan captar votos para definir el futuro del país (REUTERS/Go Nakamura) Corea del Sur se prepara para celebrar este martes elecciones presidenciales anticipadas que buscan superar la crisis política desencadenada en diciembre por la controvertida declaración de ley marcial del expresidente Yoon Suk Yeol. En la víspera del proceso electoral, los tres candidatos con mayor intención de voto cerraron sus campañas con actos simbólicos en diversas regiones, en un intento por fortalecer su base y asegurar la victoria. El favorito en las encuestas, Lee Jae-myung, líder del Partido Democrático (DP) y ex abogado de 61 años, recorrió varias localidades de la provincia de Gyeonggi, incluyendo Seongnam, ciudad donde inició su carrera política. Posteriormente, realizó su mitin final en el parque de Yeouido, en Seúl, y cerró oficialmente su campaña con una transmisión en vivo por YouTube. Según un reciente sondeo del Instituto Gallup, Lee Jae-myung concentra alrededor del 49% de intención de voto. El segundo contendiente, Kim Moon-soo, del Partido del Poder del Pueblo (PPP), que representa a la derecha conservadora y fue exministro de Trabajo, inició el día con una visita al Parque de la Paz en Jeju para rendir homenaje a las víctimas del levantamiento de 1948. Posteriormente se desplazó a ciudades clave como Busan, Daegu y Daejeon para realizar actos relámpago y culminó su jornada con un mitin frente al Ayuntamiento de Seúl. Tras este evento, siguió con saludos en zonas populares entre jóvenes, como Hongdae y Gangnam. Las encuestas recientes le asignan un 35% de intención de voto. El favorito en las encuestas es Lee Jae-myung, líder del Partido Democrático (DP) y ex abogado de 61 años (REUTERS/Kim Hong-Ji) Por último, Lee Jun-seok, del Partido Nueva Reforma (NRP), optó por un recorrido más académico y regional. Comenzó con un almuerzo con estudiantes en la Universidad Tecnológica de Corea, en Siheung, y continuó con un acto en la Universidad de Yeungnam, en Gyeongsan. Su cierre fue en un mitin en el distrito de Suseong, en Daegu, considerado su principal bastión electoral. Las casillas electorales abrirán desde las 6:00 hora local del martes (21:00 GMT del lunes) hasta las 20:00 hora local (11:00 GMT), y el proceso ha generado una participación anticipada récord. Según la Comisión Nacional Electoral, el 24,5% de los 44,4 millones de votantes inscritos ya habían emitido su voto anticipado para el viernes por la mañana, la tasa más alta registrada hasta ahora en el país. Esta alta participación anticipada refleja el fuerte interés de la población en estos comicios, que vienen a poner fin a un período marcado por la grave crisis política que estalló en diciembre pasado. El entonces presidente Yoon Suk Yeol ordenó la declaración de ley marcial y el despliegue de tropas en la Asamblea Nacional dominada por la oposición, un acto que derivó en su suspensión, posterior arresto por cargos de insurrección y destitución por el Tribunal Constitucional. El segundo contendiente, Kim Moon-soo, del Partido del Poder del Pueblo (PPP), representa a la derecha conservadora y fue exministro de Trabajo (REUTERS/Go Nakamura) El impacto de esta crisis no se limitó al ámbito político. Corea del Sur, la cuarta economía de Asia y altamente dependiente de las exportaciones, enfrentó además dificultades económicas agravadas por las políticas comerciales proteccionistas de Estados Unidos bajo la administración Trump. La situación política y social dividió al país y polarizó a la opinión pública, con la democracia surcoreana en el centro del debate. Sobre la importancia del voto, el candidato Lee Jae-myung afirmó: “Una insurrección no puede vencerse de verdad salvo por la participación del pueblo en las urnas. Se dice que un voto es más poderoso que una bala”. Por su parte, el candidato conservador Kim Moon-soo, quien votó anticipadamente en Incheon, mostró confianza y destacó: “Reducimos rápidamente la diferencia y, a este ritmo, estoy convencido de que pronto estaremos en cabeza”. La nueva administración enfrentará una agenda compleja. Entre los desafíos inmediatos están la crisis económica, una tasa de natalidad que se encuentra entre las más bajas del mundo, y el aumento sostenido del costo de vida. Además, la seguridad nacional será una prioridad ante la amenaza constante que representa Corea del Norte, con su arsenal nuclear y postura impredecible. A nivel internacional, el presidente electo deberá manejar las delicadas relaciones con Estados Unidos, principal garante de la seguridad surcoreana, y China, el socio comercial más importante del país. El equilibrio en esta pugna geopolítica será vital para mantener la estabilidad y el crecimiento económico. Lee Jun-seok, candidato del Partido Nueva Reforma (REUTERS/Go Nakamura) Este martes, la atención mundial estará puesta en Corea del Sur, donde la elección presidencial no solo decidirá el liderazgo del país, sino también el rumbo político y económico tras meses de incertidumbre. La participación masiva y la movilización en los últimos días reflejan la determinación de los surcoreanos para restaurar la normalidad democrática y enfrentar los desafíos que se avecinan. (Con información de EFE y AFP)
Ver noticia original