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Concordia » Saltograndeextra
Fecha: 31/05/2025 16:54
La reciente reapertura del mercado japonés a la carne aviar entrerriana marca un hito para el sector, pero contrasta con un informe que advierte un problema de fondo: Entre Ríos no produce el maíz necesario para abastecer su creciente demanda en producción animal. La expansión avícola, motor del consumo, profundiza así una brecha estructural que se cubre con grano importado de otras provincias. La Bolsa de Cereales de Entre Ríos (BolsaCER), en conjunto con la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER), publicó un informe que analiza el consumo de maíz en la provincia durante el año 2024. El estudio busca cuantificar la demanda interna del grano por parte de los principales sectores productivos entrerrianos y contrastarla con la capacidad de producción local. El análisis se basa en la metodología desarrollada por la Dirección de Mercados Agrícolas (DIMEAGRO) del Ministerio de Agricultura de la Nación, que establece un modelo de cálculo mediante coeficientes de consumo para los distintos sectores. La investigación se centra en el uso forrajero del maíz en la producción de carne aviar, huevos, carne bovina, leche y carne porcina. UNA DEMANDA QUE SUPERA A LA OFERTA LOCAL De acuerdo con el informe, la demanda total estimada de maíz en Entre Ríos para el 2024 asciende a 3,2 millones de toneladas. El principal impulsor de este consumo es el sector aviar, que representa el 59 % del total con cerca de 1,9 millones de toneladas anuales. Este liderazgo no sorprende si se considera que la provincia faena más de la mitad del total nacional de aves, con 374,7 millones de cabezas, según datos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA). Además, se realizó una estimación del consumo por departamento, teniendo en cuenta la distribución geográfica de las unidades productivas aviares y lácteas, así como los datos de faena para las producciones bovina y porcina. Esta información permite visualizar de forma más precisa el impacto regional del consumo. UN DÉFICIT ESTRUCTURAL QUE PERSISTE Pese a su fuerte perfil agroproductivo, Entre Ríos no produce la cantidad de maíz suficiente para cubrir su demanda interna. El promedio de producción en las últimas diez campañas fue de 1,89 millones de toneladas, lo que deja una brecha estructural de aproximadamente 1,3 millones de toneladas anuales. Esta diferencia se suple mediante el ingreso de maíz proveniente de otras provincias, principalmente Santa Fe, Buenos Aires, Córdoba y Santiago del Estero. La Figura 3 del informe ilustra claramente el origen del grano que ingresa a Entre Ríos para cubrir esta necesidad. UN CONSUMO EN CRECIMIENTO La demanda de maíz en Entre Ríos ha crecido en comparación con el año 2023. Este incremento se debe, principalmente, al aumento en la producción de huevos y al sostenimiento del volumen en el sector de carne aviar. El estudio prevé seguir monitoreando esta tendencia para evaluar cómo podría evolucionar la relación entre oferta y demanda en los próximos años. CONCLUSIÓN Los datos presentados reflejan un desafío clave para la provincia: aunque Entre Ríos es un actor fundamental en la cadena agroindustrial nacional, especialmente en lo que respecta a la producción animal, su capacidad para autoabastecerse de maíz no alcanza. El informe de BolsaCER y UNER pone de relieve la importancia de planificar políticas que estimulen la producción local del cereal y refuercen la infraestructura logística para garantizar la sostenibilidad de las cadenas productivas que dependen de él.
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