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» Sin Mordaza
Fecha: 30/05/2025 18:27
Este viernes, el colectivo de médicos residentes del Hospital Garrahan denunció que los representantes del Ministerio de Salud no acercaron ninguna propuesta concreta para mejorar los salarios. Ante esta situación, resolvieron continuar con la medida de fuerza y mantener el paro de actividades. Cristina Alonso, integrante de la Comisión Directiva del Hospital Garrahan, explicó en diálogo con Cadena Oh! el conflicto vigente con el Gobierno nacional. “Los conflictos son dos. Uno es el de los residentes, que son los que están ganando peor en todo el hospital, y que va más allá: incluye a todos los residentes de Nación que dependen del Ministerio de Salud. La segunda línea es la del personal de planta, que salió a bancar esta protesta de los residentes. Los residentes, si bien son temporarios, son clave para el desarrollo del hospital. Hacen una masa crítica de atención al paciente sin la cual el hospital no está preparado para funcionar a full”. “El personal de planta también dictó un paro de actividades. Ahí fue donde nos llamaron a conciliación obligatoria. Nosotros contestamos que aceptábamos la propuesta de conciliación y que esperábamos día y hora, que nos digan cuándo y cómo. Porque el martes que viene, en asamblea de todo el personal de planta, vamos a ver cómo seguimos”. Alonso destacó el alcance del hospital y su rol estratégico en la red sanitaria nacional:“La verdad es que atendemos de todos lados, bastante proporcional a lo que es la población natural de cada región. El Gran Buenos Aires y la Capital se llevan del 30 al 40%, y el resto es de toda la jurisdicción. Hasta tenemos atención en la Antártida por vía de telemedicina”. “El Hospital Garrahan es autárquico, si bien ahora eso no está siendo muy respetado. Quiere decir que tiene cierta autonomía, pero el presupuesto es 80% otorgado por Nación, por el Ministerio de Salud, y 20% por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que es la jurisdicción donde estamos”. Respecto al conflicto presupuestario, criticó la falta de interlocución con las autoridades: “El Ministerio de Salud sale a decir que aumentaron el presupuesto. Si uno compara con la inflación y con lo que aumentaron las cosas, un montón de nuestros insumos están dolarizados, el presupuesto está muy justo. Además, cuando las autoridades del hospital van al Ministerio, no los atiende Lugones: los atiende la viceministra, que es abogada y les habla de números. Pero dice que tampoco tiene posibilidad de respuesta porque desde el Ministerio de Economía le tienen que dar permiso. Y así estamos, no tenemos comunicación directa”. También remarcó el esfuerzo sostenido del personal del hospital en medio del reclamo: "Nosotros desde diciembre del año pasado hicimos 10 paros cuidadosos, algunos fuera del horario laboral. Fuimos a marchar al Obelisco, fuimos a la noche, fuimos a marchar a River, a dar la vuelta olímpica en River. ¿A vos te parece?. Hicimos todo eso para que nos acusen y salgan con números falsos a decir que somos ñoquis, que hay más administrativos que médicos, falseando los datos oficiales. Te puedo pasar los datos, pero esos números que mencionan están totalmente sesgados. Ponen en la misma bolsa a administración y todo lo que es mantenimiento. El hospital cubre ocho manzanas. Tiene personal de mantenimiento, alrededor de 180. Tiene administrativos que son los que atienden, reciben al paciente en la ventanilla cuando va a los consultorios, los que hacen las compras de todos los insumos que necesitamos para trabajar”. Alonso subrayó la calidad del hospital y repudió las acusaciones contra el personal: “Por suerte, creo que estamos muy protegidos y acompañados. Todo el que conoce algún paciente que se atendió en el Garrahan sabe la calidad, los tiempos que manejamos. Al paciente se lo puede ver en el día, lo ven por ahí tres o cuatro especialidades, para que no tenga que ir y venir tres veces en el mes. Si se lo puede atender por teléfono, se hacen las denominadas teleconsultas. Son como 8.000 por año. Hay tantas cosas buenas en el hospital, que la verdad es que nos digan ñoquis es una vergüenza, realmente”. También cuestionó el rumbo de la política sanitaria del Gobierno: “No sé si privatizar, porque no sería muy privatizable el hospital. No es un negocio el Hospital Garrahan. Pero sí tiene que ver con una política de salud donde, al contrario de lo que decía el presidente cuando era candidato —que la iba a pagar la casta—, el concepto de casta fue bastante ambiguo, y la casta parece que ahora es el Garrahan. Porque se trata de achicar el gasto y esa es la prioridad: un Excel, los números. Nosotros estamos encantados: si ellos dicen que hay sobreprecio, que hay ñoquis, bueno, vení y decímelo. Decime quién es el ñoqui, porque por ahí es alguien que yo no conozco porque no va nunca. Pero a mi conocimiento, en mi sector, en el laboratorio, donde hay como 400 personas, no hay ñoquis”. Finalmente, hizo referencia a las condiciones laborales y salariales: “Entran con una categoría que les da alrededor de 1.200.000 pesos por mes. Un médico, 1.800.000. El hospital, por año, va aumentando un 1% de antigüedad, es nada. Hasta que una persona se arma un sueldo más o menos, no puede esperar. Si es una persona que tiene que alquilar, se le hace muy difícil, porque es un trabajo full time, cumplimos las 42 horas semanales. Los enfermeros tienen un régimen horario de menos horas, alrededor de 30, y creo que el 100% tiene pluriempleo: sale del hospital y se va a hacer otras 6 o 7 horas a un lugar privado. Eso no es vida, no es calidad de vida para el trabajador ni para los pacientes. Hay mucha tristeza en el hospital, la verdad”. Escucha la nota completa acá
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