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» Ceres Diario
Fecha: 30/05/2025 09:20
Una emotiva peregrinación se desarrolla en estos días rumbo al Santuario del Señor de los Milagros de Mailín, donde la fe y la esperanza se conjugan en un camino de tierra, promesas y devoción. Desde la ciudad de Ceres partió una delegación de peregrinos a caballo conformada por Ricardo Fornero, Marcelo Flores, Manuel César, Coco Sabore, Damián Cafaro, Julio Arias y Tuli Lamberti. Los acompaña una logística organizada con un tráiler de provisiones para personas y caballos, conducido por Mario Serrano, y una casilla rodante al mando de Hermes Favole. Sin embargo, el momento más conmovedor del trayecto se vivió en la localidad de Palo Negro, donde Luis Benavídez y su hijo Renzo, de tan solo 10 años, se unieron a la travesía. Renzo nació prematuro, con solo seis meses de gestación. Debido a complicaciones motrices, recién pudo comenzar a caminar a los 7 años. Hoy, motivado por una promesa y sostenido por una fe inquebrantable, acompaña a su padre en esta peregrinación como un verdadero ejemplo de lucha y superación. “Él es un milagro”, dicen quienes lo conocen. Su andar, aunque con esfuerzo, tiene la fuerza de mil corazones. La imagen de su figura pequeña, decidida, avanzando hacia el santuario, emociona y deja una huella profunda en quienes lo ven pasar. Renzo no camina solo: camina con el amor de su padre, con el empuje de su historia y con la fe de todo un pueblo que lo abraza como símbolo de esperanza. El camino hacia Mailín es largo, pero para muchos no hay cansancio ni distancia cuando se camina con el alma. Y Renzo, con cada paso, nos recuerda que los verdaderos milagros no siempre están en el destino, sino en el trayecto mismo. Gentileza Periódico Sur Santiagueño
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