Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Oscar Parra y una experiencia enriquecedora en el gigante asiático: "China le marcó la cancha al mundo"

    » Rafaela Noticias

    Fecha: 25/05/2025 12:18

    Oscar Parra y una experiencia enriquecedora en el gigante asiático: "China le marcó la cancha al mundo" Por su formación como hombre siempre involucrado en la actividad gremial empresaria -ocupó diversos cargos en comisión directiva y fue presidente del Centro Comercial e Industrial de Rafaela- y como lector de la realidad desde una mirada orientada desde la doctrina social de la Iglesia, Oscar "Pacha" Parra es indudablemente una figura a la que conviene escuchar con detenimiento a partir de sus experiencias personales. Y la que acaba de vivir, con su viaje a China y su participación en la reciente Feria de Cantón, que se realizó entre el 15 de abril y el 5 de mayo, lo dejó marcado e impresionado, como él mismo reconoce. En el salón de eventos del Parra Hotel & Suites, Oscar Parra recibió a RAFAELA NOTICIAS para una extensa charla que se hizo corta a partir de la descripción muy vívida que "Pacha" hizo de lo que fue su reveladora visita al gigante asiático. "Realmente China para nosotros es el otro lado del mundo. Son treinta horas de viaje muy extenuantes, que en nuestro caso hicimos con una sola escala, en Etiopía. Fuimos con un grupo de empresarios de la región y aunque yo no me dedico al comercio exterior, creo que uno no puede desconocer las oportunidades o las crisis que nos puede traer el rumbo hacia el que marcha el mundo", contó inicialmente Pacha. La Feria de Cantón es oficialmente la Feria de Importación y Exportación de China, el evento comercial más antiguo y prestigioso del país, con más de 130 ediciones realizadas. Reúne a más de 20,000 expositores y miles de compradores internacionales en cada edición, convirtiéndose en la plataforma ideal para que empresas globales accedan a oportunidades comerciales únicas en el mercado asiático. Allí estuvieron explorando oportunidades de negocios empresarios de Rafaela y de la región central de Santa Fe y Córdoba, además de muchos otros argentinos. El Complejo de la Feria de Importación y Exportación de China, también conocido como el Complejo Pazhou, está ubicado en la localidad de Guangzhou. "Son dos estructuras gigantes, de cerca de un kilómetro de largo cada una, paralelas, unidas por puentes y senderos. Oscar Parra y su experiencia al conocer China. "China abrazó al capitalismo" "Muchos tenemos un prejuicio, y es que China es comunista. Pero China abrazó al capitalismo. Cierto que el régimen político no es una democracia plena como la definimos nosotros, no es un gobierno que se renueve por elecciones libres, no hay prensa libre tampoco y hasta los nacimientos están regulados. Pero es un país capitalista pleno", señaló Parra. En ese contexto, el empresario rafaelino cree que las "alocadas" medidas adoptadas por Donald Trump en materia de aranceles ciertamente son "alocadas" -como las definió-, pero son un reflejo de autodefensa frente a la potencia que está desarrollando China. La impactante sede de la Feria. Números y comparaciones La clave para entender a China y su fenómeno de crecimiento, según interpreta Parra, pasa por su densidad demográfica y la composición social de su población. El maoísmo -que produjo el nacimiento de la República Popular China en 1949, dándole un perfil propio al marxismo-leninismo como corriente filosófica, política, social y económica- nació en los arrozales y en una sociedad rural y preagrícola. Pero esta China del 2025 es un país muy distinto: con 1.400 millones de habitantes, tiene más de tres veces la población de Estados Unidos, de cerca de 380 millones de personas. De esos 1.400 millones, se estima que unos 400 millones -es decir, más que toda la población de Estados Unidos- son de clase media o alta, con un poder adquisitivo que se vuelca al consumo. Otros 25 millones de personas son multimillonarios que invierten permanentemente en múltiples negocios. Y hay casi mil millones que se incorporaron a la revolución industrial que transformó a China en la potencia que hoy es: ganan en promedio 400 dólares, pero tienen resueltos, pese a sus bajos ingresos, temas clave como vivienda y comida. Una metrópoli sin cielos azules. "Hay una cantidad impresionante de shoppings, con marcas europeas de primerísimo nivel y otras que no conocemos en Argentina. Pero lo más sorprendente es que esa migración de la población rural a las grandes industrias no generó 'conurbanos' pobres o cordones de villas: el que sale del campo para ir a trabajar a la industria debe cumplir con ciertas condiciones. No hay gente en situación de calle, no hay villas en el concepto de pobreza como conocemos nosotros, no hay drogas, yo no viví nada que me hiciera pensar en una situación de inseguridad", enfatizó Parra. Democracia, libertad y sentido común "Creo que China adoptó lo mejor del capitalismo pero a partir de un modelo sin libertades individuales. Voy a decir algo que es un pensamiento muy particular: las democracias en el mundo tienen que replantearse la solución a los problemas de la gente. Hay discusiones banales, egoísmo, falsa democracia, y no llegan las soluciones. Si, nosotros criticamos que ellos no tienen prensa libre, no hay manifestaciones opositoras, no hay sindicatos. Pero a la gente se la ve bien, y con problemas básicos como vivienda y comida, resueltos", apunta Parra. Datos de la realidad: un taxista chino gana 1.500 dólares mensuales. Y un obrero industrial, sólo 400 dólares. Pero no se preocupa por casa ni por comida, porque eso lo tiene resuelto. "Hablé con gente común, y todos están muy conformes. Ellos observan nuestra sorpresa y se dan cuenta del efecto que produce en nosotros conocer como viven". Parra, que se caracteriza por ser un hombre de fe, estaba en China cuando se produjo la muerte del Papa Francisco. "Hay cien millones de católicos en China y es el lugar donde más está creciendo el cristianismo, pese a que la Iglesia tiene limitaciones impuestas por el Estado. Pero la gente tiene en su ADN la aspiración a la espiritualidad", agregó. No obstante, Parra observó que "en lo industrial y en lo empresarial, el chino es hipercapitalista. La Feria a la que fuimos dura tres semanas, tiene 20 mil expositores que se van renovando una vez por semana. Se estima que un millón de personas pasan diariamente por los stands. Es toda una dimensión enorme". -Oscar, cómo nos podemos vincular con un gigante como China? -preguntó el cronista. - Los chinos fabrican las máquinas que usan las industrias. Si en Rafaela armamos una industria cualquiera y queremos equiparla, posiblemente las máquinas sean chinas. Pero eso también le pasa a Estados Unidos. Porque ellos tienen mil millones de personas que trabajan en la industria, cosa que ni Europa ni Estados Unidos tienen, porque mucha mano de obra la dejaron en mano de los inmigrantes. - Uno se pregunta también cómo lograron preparar a esa mano de obra que venía de un ruralismo muy básico, precapitalista y atrasado, para que hoy sean obreros industriales que producen con alta tecnología. - Es muy sorprendente. La innovación en materia de edificios, con creación, diseño, calidad, es impresionante. Y todo lo hicieron con profesionales y trabajadores de ellos. - Hablábamos de prejuicios. Con los autos, por ejemplo, que decimos que son mala copia de los occidentales. - Ellos empezaron copiando. Y copiando mal. Pero ahora son innovadores. En telefonía y en un autos son líderes. Los autos chinos que llegan a Argentina son del segmento medio. Pero los del segmento alto, que compiten con marcas como Porsche, o Aston Martin, tienen una calidad de terminación similar a los de los concept car. Los autos son todos eléctricos. Motos y autos: todos. Hong Kong, que sigue siendo británica por diez años más, es ruidosa y sus autos siguen siendo nafteros. Los chinos tienen una tecnología que marca tendencias: ya tienen el robot cirujano que puede operar a un paciente; ya tienen el robot que sirve café y ya tienen los drones que pueden llevar personas como taxis aéreos. No es que los van a tener: ya los tienen. Lógicamente no los pueden usar masivamente, pero la tecnología la tienen. Sin cielos celestes Claro que este crecimiento gigante genera desafíos. "No hay cielos azules en las grandes ciudades. Cuando les mostramos las fotos de nuestros paisajes se quedan maravillados por el cielo celeste. En las ciudades hay como una nubosidad suave, que es el smog. Pero también están ocupándose de ello, con muchísima inversión en espacios verdes, grandes arboledas y una prolijidad enorme. Trabajan de noche en el mantenimiento", describió Parra. Negocios preferible a guerra Entre otros múltiples temas, Parra también consideró que la "guerra comercial" desatada entre Estados Unidos y China a partir de las medidas del presidente Trump no desembocarán en algo más grave, pero que el gigante asiático corre con ventaja. "Trump es antes que nada un hombre de negocios. Y los chinos comerciaban con los romanos ya en los primeros siglos después de Cristo, por eso esta feria se llama la Feria de Cantón, que es un nombre de origen romano. Es decir, también son gente de negocios. Pero principalmente son una cultura milenaria. Xi Jinping hace 40 años que está en el gobierno. Puede esperar a que Trump termine su mandato y lo reemplace un presidente con otras características. China seguirá su rumbo inalterable". Lo bueno, se esperanza Parra, es que "cuando hay negocios no hay guerras".

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por