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Federal » El Federaense
Fecha: 19/05/2025 22:01
En las últimas semanas, el clima ha jugado un papel determinante en la producción agrícola de la provincia de Buenos Aires, y las consecuencias están empezando a hacerse sentir. La Bolsa de Cereales ha revelado que aún quedan por recolectarse unas 530.000 hectáreas de soja, un número que podría afrontar distintos niveles de afectación debido a las recientes lluvias. El comunicado emitido por la institución, bajo la dirección de Ricardo Marra, subraya que la región norte de la provincia, especialmente localidades como Chivilcoy, Chacabuco y San Antonio de Areco, ha experimentado el mayor impacto. Los acumulados de precipitaciones han superado los 400 mm, lo que ha complicando aún más la situación de los cultivos de soja y maíz tardío. Además, el oeste bonaerense, particularmente la ciudad de 9 de Julio, también ha sido golpeada por el clima. Aquí, los registros de lluvia han alcanzado entre 80 mm y 100 mm, lo que ha retrasado aún más el proceso de cosecha. Según la Bolsa, en esta área todavía quedan por recolectarse 730.000 hectáreas de soja, aunque el impacto negativo del mal tiempo podría no afectar a toda esta superficie. Es importantísimo recordar que la situación en esta región es crítico, ya que se ha registrado una demora interanual de 14,7 puntos porcentuales en el avance de la cosecha. Los análisis sugieren que los nuevos acumulados de lluvia, sumados a las precipitaciones del mes de marzo, pueden resultar en pérdidas importantes para los productores, quienes observan con preocupación el futuro de sus cultivos.
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