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» Elterritorio
Fecha: 15/05/2025 21:18
Fue fundado por el padre Guillermo Hayes con la misión de brindar refugio y contención a personas con discapacidad y en situación de abandono. jueves 15 de mayo de 2025 | 17:15hs. El hogar Santa Teresa es uno de los centros de la fundación Guillermo Hayes de Oberá. El Hogar Santa Teresa del Niño Jesús de Oberá hoy cumple 32 años de trabajo ininterrumpido al servicio de la vida y la dignidad humana. Fue fundado en 1993 por el sacerdote misionero del Verbo Divino Guillermo Hayes, quien al llegar a Oberá como capellán del Hospital Samic, fue testigo del abandono de muchas personas con discapacidad física e intelectual. Conmovido por esa realidad, decidió crear un espacio donde pudieran recibir contención, cuidado y una vida digna. Con el tiempo, la iniciativa creció y dio origen a la Fundación Guillermo Hayes, que hoy está integrada por varios centros: además del hogar Santa Teresita (que asiste y contiene a personas con discapacidad física), funciona el hogar Espíritu Santo (para personas con discapacidad intelectual); el hogar Virgen de Luján (para adultos mayores con discapacidad); y el Jardín Bíblico, un parque temático que combina espiritualidad, historia y naturaleza, y que también nació del sueño del padre Hayes. Actualmente, alrededor de 60 personas residen en los hogares, acompañadas por un equipo de más de 50 trabajadores y profesionales que brindan atención las 24 horas, los 365 días del año. La tarea de cuidado integral incluye alimentación, salud, terapia, recreación y contención espiritual. Además, muchos de los espacios funcionan también como hogares de tránsito para personas en situación de emergencia, que son asistidas por intermediación judicial. El sostenimiento de esta obra se logra gracias al compromiso solidario de gran parte de la comunidad, la colaboración de organizaciones e instituciones, y del gobierno provincial. Estos fondos permiten cubrir parte de los sueldos y aportes del personal, garantizando la continuidad del trabajo en todos los centros. De todas maneras, los aportes de la sociedad siguen siendo determinantes en un contexto donde se necesitan elementos que son indispensables, pero el uso frecuente conlleva un rápido desgaste: sábanas, fundas, frazadas livianas que sean faciles de lavar y secar, toallas, baberos para adultos, elementos de higiene personal, articulos de limpieza, alimentos no perecederos. También se puede colaborar monetariamente de modo directo a la cuenta bancaria de la Fundación. Faro en la oscuridad La figura del padre Guillermo Hayes sigue siendo un faro para quienes integran la fundación. Nacido en Irlanda y llegado a Oberá en 1987, fue un incansable promotor de la justicia social y la inclusión. Hasta su fallecimiento en 2014, dedicó su vida a la defensa de los más desprotegidos, dejando un legado que hoy continúa vivo en cada rincón de la obra que fundó. Uno de los espacios más simbólicos es el Jardín Bíblico, ubicado a 9 kilómetros del centro obereño. Allí se recrea la vida de Jesús a través de senderos, esculturas y estaciones inspiradas en los relatos evangélicos. Se trata de un espacio abierto al turismo y a la espiritualidad, visitado por miles de personas cada año y considerado parte del circuito religioso central de la provincia. En cada aniversario, sus miembros renuevan el compromiso de seguir cuidando a quienes más lo necesitan, bajo la premisa que guiaba al padre Hayes: "Estamos en este mundo de paso, y nuestra misión es hacerlo un poquito mejor".
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