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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 13/05/2025 05:00
Gala Díaz Langou, Directora Ejecutiva de CIPPEC “Estabilidad, institucionalidad y productividad: tres llaves para el desarrollo”: ese fue el título de la disertación que Gala Díaz Langou, directora ejecutiva de CIPPEC, dio en el marco del Seminario de Educación y Empleabilidad organizado por Ticmas y la OEI en la Feria del Libro de Buenos Aires, que acaba de cerrar. De forma clara y concisa, la especialista reveló la importancia de pensar estratégicamente en la Argentina en el 2050. Tres llaves: una Argentina posible ”¿Cómo será la Argentina dentro de 25 años?“, dijo Díaz Langou, ”La Argentina puede ser un país muy desarrollado, donde logremos aprovechar todas las oportunidades que nos da el mundo”. Y agregó: “Este es un sueño que tenemos muchas personas, pero no es el único horizonte posible. Hay otro horizonte donde dentro de 25 años el Estado puede haber perdido control de buena parte del territorio. Dentro de 25 años puede haber un avance enorme del crimen organizado y la población puede sufrir violencia en su vida cotidiana. Mucha más incertidumbre e inestabilidad de lo que vivimos en el presente”. Sumado a una situación de vulnerabilidad climática. Y alertó: “Hoy la evidencia nos sugiere que el escenario más probable es el pesimista”. Langou afirmó que desde CIPPEC vienen “entendiendo que hace falta habilitar tres llaves para llegar a esta Argentina más utópica para el futuro inmediato. La primera llave es blindar la estabilidad macro. En los últimos meses, en el último año, fuimos testigos de importantes pasos hacia la estabilidad macroeconómica que no está garantizada a futuro. Es necesario blindar esa estabilidad si queremos un mejor futuro y eso implica muchas decisiones. Pero en particular esto fue traccionado por el equilibrio en las cuentas públicas y es necesario repensar el sistema previsional, que es el principal componente del gasto público”. Aseguró, además, que está trabajando en una propuesta superadora del sistema previsional. “La segunda llave que necesitamos para llegar a un futuro mejor dentro de 25 años es la de la institucionalidad. Si queremos un futuro mejor, tenemos que poder definir un rumbo en conjunto y fijado”, destacó, y remarcó la importancia del diálogo y la institucionalización de un rumbo: “invertir tiempo en que haya leyes, cuidar la legitimidad de nuestras instituciones públicas y en particular, por ejemplo, del Poder Judicial”. “La tercera y última llave”, dijo, “es en la cual me quiero concentrar, que es la llave del desarrollo para que la Argentina sea un país mejor dentro de 25 años. Tenemos que poder crecer y esto solamente puede ocurrir a través de una mejor competitividad y una mayor productividad. Hoy Argentina tiene todo lo que el mundo necesita. Tenemos alimentos, tenemos todas las energías, tenemos los minerales críticos y a pesar de la riqueza que tiene nuestro suelo, no logramos traducir eso en mejor calidad de vida para nuestra población”. Para cambiar esta matriz productiva, Langou señaló que es clave “que podamos agrandar la torta” y explicó: “Hace más de diez años que Argentina no crece de forma sostenida. En el último año Argentina tuvo el mismo PBI per cápita que en 1986; hace casi 40 años. Nuestra productividad es muy baja a nivel agregado y es muy distinta dependiendo del sector en el que estemos mirando”. Generar empleo real, atraer inversiones es tarea de “una institucionalidad sólida” y “una justicia que garantice el imperio de la ley”. Gala Díaz Langou, Directora Ejecutiva de CIPPEC El Estado como un actor clave Para esta transformación, Langou destacó que desde CIPPEC trabajan con evidencia y la evidencia establece que no es posible llegar a una Argentina potente sin el rol del Estado. “Necesitamos que el Estado resuelva los problemas de la gente, necesitamos que genere los bienes públicos que son imprescindibles, como la educación, la salud, la infraestructura privada. La segunda condición que necesitamos es que los sectores privados puedan efectivamente crear los puestos de trabajo que permitan incluir a todas las personas. Y acá hay que sincerarse, porque los sectores que tienen más potencial de desarrollo en Argentina, la energía, la minería, el agro, no son sectores particularmente ricos en puestos de trabajo”, reflexionó y agregó: “Por eso tenemos que pensar particularmente en una estrategia que implique encadenamientos productivos, en particular con los servicios donde sí se puedan generar estos puestos de trabajo”. “Lo tercero y último es quizás la fibra más cercana a las discusiones que estamos teniendo acá y es que tenemos que garantizar que las personas que estén económicamente activas en el 2050 tengan las habilidades que van a demandar los puestos de trabajo que se creen para ese momento”, señaló Langou. Y aseguró que nos enfrentamos a una urgencia: “Una enorme brecha entre lo que hoy está generando el sistema educativo en términos de habilidades y lo que proyectamos que van a requerir esos puestos de trabajo en el 2050. Hoy nuestro sistema educativo no está logrando garantizar los aprendizajes más básicos”. “Esto también implica que podamos construir puentes entre los sectores productivos y los sistemas educativos para que la oferta formativa se alinee con las necesidades reales del mundo laboral, adelantándose y adaptándose también a los cambios del mercado y de las transformaciones tecnológicas y productivas que vamos a ver en el futuro”, resaltó Langou, y finalizó: “En el 2050 necesitamos habilitar estas tres llaves: la estabilidad, la institucionalidad y el desarrollo productivo. Y para habilitar el desarrollo productivo necesitamos poder crecer, habilitar este crecimiento de la torta, tener los puestos de trabajo que permitan incluir a todas las personas y asegurarnos que la población tenga las habilidades que van a necesitar esos puestos de trabajo. Así que los y las invito a continuar la discusión en estas tres áreas”. Gala Díaz Langou, directora ejecutiva de CIPPEC, en el seminario de educación y empleabilidad que organizaron Ticmas y la OEI en la Feria del Libro de Buenos Aires 2025 Perder la confianza Luego de la presentación, Gala Díaz Langou habló con Patricio Zunini. —Beatriz Sarlo —dijo Zunini— decía que la Argentina es un país de instituciones débiles. Y cuando hablaba de instituciones débiles incluía, en realidad, la relación de los argentinos con la autoridad. Estas tres llaves da la impresión de que se tienen que atacar a la vez. —Hay un indicador que a mí me parece particularmente perturbador —dijo Díaz Langou—, que es que esta crisis que nosotros vemos en las instituciones públicas en Argentina es en realidad un síntoma de una crisis más profunda, que es una crisis de confianza que tenemos en Argentina. Y continuó: “En la Argentina, solamente 17% de las personas confían en las instituciones públicas. A nivel mundial, eso está en torno al 47% el promedio. Y esto no es solo que no confiamos en el Congreso de la Nación o en la Justicia, no confiamos en las otras personas. En Argentina hay una crisis de confianza interpersonal que también es mucho más profunda y que alimenta esta crisis en las instituciones, que no solo son las instituciones públicas también son las empresas, son los medios, etcétera. Con lo cual ahí para nosotros esa es como una punta del ovillo en la cual tenemos que empezar a trabajar de manera urgente”. Díaz Langou llamó a ser estratégicos y ver qué cosas funcionaron y cuáles no en otros países para revertir esta situación y generar resultados concretos de transformación. Para la especialista, se trata de apuntar a empezar a trabajar con aquello con lo que sí estamos de acuerdo como el caso de la alfabetización o la importancia de generar equilibrio fiscal. Educación, evidencia y tomar decisiones “Desde CIPPEC formamos parte de un Comité UNESCO de calidad educativa y ahí tenemos la fortuna de ver muchas experiencias de cerca”, celebró Díaz Langou, y ejemplificó en cómo importaron una idea de Estados Unidos —que antes había pasado por América Central— y que tiene que ver con las alertas tempranas para prevenir el abandono escolar. “Esto implica usar un componente de inteligencia artificial en los sistemas de información educativa para identificar a los chicos que tienen más riesgo de alejarse del secundario y de prevenir el contagio”, señaló la especialista que destacó este trabajo de mapeo que pueden realizar en las escuelas. Y agregó: “Este trabajo lo empezamos en 2022 y las provincias de Entre Ríos y Mendoza. En Mendoza, en 2023, tuvimos la oportunidad de hacer una evaluación de impacto e implicó en una sola provincia que haya 5.400 chicos que no dejaron el secundario, lo cual equivale a un 15% menos de abandono escolar en un año en una provincia, lo cual es un impacto contundente de una política que además es usar la información que existe de una manera estratégica, súper barato, porque no implica inversión adicional, con un cambio contundente en la trayectoria de esos chicos que tienen muchas más chances hay de terminar la secundaria”. Gala Díaz Langou, directora ejecutiva de CIPPEC, en el seminario de educación y empleabilidad que organizaron Ticmas y la OEI en la Feria del Libro de Buenos Aires 2025 Educación y empleo Hoy no solo se trata de aprender sino también, como explica Díaz Langou, de “complementar ese conocimiento con habilidades que impliquen un diferencial en su potencial de inserción laboral a futuro”. Y agregó: “Probablemente quienes se graduaron el año pasado se graduaron con habilidades muy parecidas a lo que necesitaba el mercado de trabajo en 1970, y no pensando en que estos chicos van a estar trabajando en el 2050”. En cuanto a aquellas personas que hoy tienen entre 50 y 60 años también hay una necesidad de reskilling, y para Díaz Langou --que planteó la importancia de revisar el sistema previsional-- también se trata de ver otras experiencias: “En once provincias los docentes se jubilan a los 50 años, lo cual es bastante joven. Mi provincia natal, Río Negro, es una de ellas y es importante pensar que hoy la expectativa de vida que tenemos en la Argentina va a implicar que tenemos personas que van a querer seguir trabajando mucho más y que probablemente tengan un valor grande para seguir aportando a la sociedad mucho más allá de los 50”. Repensarnos como sociedad Y a esto se suma la baja en la natalidad: “Concentramos las peores condiciones como sociedad. En las familias hay desincentivos para tener hijos, porque tener un hijo implica aumentar las posibilidades de caer en situación de pobreza. Tener un hijo más implica hacer lo mismo. Tener un hijo más temprano implica lo mismo. Entonces hay muchos incentivos para postergar la maternidad y la paternidad”. Gala Díaz Langou señaló: “Acá puedo tener un sesgo, pero creo que hay algo que particularmente me está preocupando mucho, que es la convivencia cívica pacífica y en particular lo que es el uso de la violencia en el discurso público. Creo que estamos acostumbrándonos a tratarnos de manera violenta en el debate público, a discutir, en vez de discutir las ideas y tratar de argumentar a favor o en contra de una idea. Nos estamos concentrando en denigrar a las personas y eso no solamente es muy destructivo, sino que además es contraproducente”. “Hagamos las cosas” Por último, ante la pregunta de Zunini de cómo puede ser Argentina ya no en veinticinco sino en cinco años, Gala Díaz Langou señaló: “Sabemos que vamos a hacer un país mucho más viejo. Vamos a tener un promedio de edad mucho mayor, muchos menos chicos. Entonces escuelas vacías. Entonces menos fuerza laboral. Entonces un sistema previsional muy tensionado. Sabemos que la desigualdad está creciendo. Eso va a implicar cosas concretas en el territorio, en términos de seguridad, en términos de tejido laboral y también de oportunidades. Porque la desigualdad implica también desigualdades educativas, de formación y de formación de capital humano”. Y agregó: “Todos sabemos que Argentina va a verse bastante afectada por los efectos de la crisis climática. Eso va a implicar un territorio mucho más húmedo. Lamento comunicarles que vamos a tener muchas más lluvias y mucho más calor y episodios de calor extremo, más frecuentes y mucho más intensos en todo el territorio, en particular en la zona centro. Eso tiene implicancias para toda nuestra matriz productiva. Hoy hay cultivos que ya no van a ser posibles en Argentina, otros que sí van a ser posibles, pero van a implicar transformaciones profundas de nuevo en cinco años, no en 25. Y sabemos que la digitalización va a tener un impacto fuerte. La inteligencia artificial va a implicar que se reemplacen muchos puestos de trabajo. La inteligencia artificial va a implicar que pensemos distinto y muchas matrices productivas y muchas formas en las cuales nos formamos, nos relacionamos, etcétera. No sabemos qué va a ocurrir con nuestra economía, con nuestro desarrollo productivo, con el mundo político, con el mundo”. Y finalizó: “Tenemos la oportunidad hoy, en mayo de 2025, en Argentina, de empujar estos cambios que nos lleven a aprovechar esas oportunidades. Hoy Argentina tiene todo; todo lo que el mundo necesita en el mundo con guerras, el mundo con crisis comerciales, crisis energéticas, crisis de alimentos. Argentina tiene los alimentos, la energía, el capital humano, todo lo que podemos brindar al mundo para que nuestro futuro sea distinto a lo que pasó antes. Hagamos las cosas”.
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