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» Elterritorio
Fecha: 11/05/2025 11:55
El Papa destacó que recibió con satisfacción el anuncio de cese de fuego entre India y Pakistán; evocando a Juan Pablo II, llamó a los jóvenes a no tener miedo domingo 11 de mayo de 2025 | 9:40hs. Gran entusiasmo y un clima de fiesta acompañó este domingo la primera salida ante la multitud del papa León XIV, que apareció para la oración mariana del Regina Caeli en el balcón central de la Basílica de San Pedro, desde donde hizo un fuerte y enérgico llamamiento a la paz, citando a su antecesor, Francisco y a su “tercera guerra mundial en pedazos”. Tras recordar que hace 80 años, el 8 de mayo, terminaba la “terrible tragedia de la Segunda Guerra Mundial”, después de haber causado 60 millones de víctimas, en el “actual escenario dramático de una ‘Tercera guerra mundial en pedazos, como muchas veces afirmó el papa Francisco, me dirijo yo también a los grandes del mundo, reiterando el llamamiento siempre actual: ¡nunca más la guerra!”, clamó, generando una ovación entre las 100.000 personas presentes. “Llevo en mi corazón los sufrimientos del amado pueblo ucraniano: ¡que se haga lo posible para alcanzar los antes posible a una paz auténtica, justa y duradera!”, pidió luego, al reclamar asimismo la liberación de todos los presos y que los niños (deportados) puedan volver a sus familias. “Me duele profundamente lo que pasa en la franja de Gaza: ¡que cese inmediatamente el fuego!”, exhortó, al exigir, además, que se preste “ayuda humanitaria a la exhausta población civil y que se liberen todos los rehenes”. En su primeras declaraciones políticas, León XIV, estadounidense con nacionalidad también peruana, de 69 años, también destacó que recibió “con satisfacción el anuncio de cese de fuego entre India y Pakistán”, generando más aplausos. “Y auspicio que a través de las próximas tratativas se pueda llegar pronto a un acuerdo duradero”, siguió. “Pero cuántos otros conflictos que hay en el mundo”, deploró, al encomendar luego a la Reina de la Paz “este sentido llamamiento: que sea ella que lo presente al Señor Jesús para que nos conceda el milagro de la paz”. El flamante papa saludó luego a todos los presentes, grupos provenientes de todos los países, y felicitó a todas las madres, incluso las que están en el cielo, al recordar que en Italia y muchos otros países del mundo se celebra el Día de la Madre. “¡Gracias a todos y buen domingo a todos!”, se despidió, finalmente, saludando con las manos, tímidamente y emocionado, a la multitud que coreaba “¡Leone! ¡Leone! ¡Leone!“.
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