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Federal » El Federaense
Fecha: 10/05/2025 15:51
Las águilas del América vivieron una jornada para olvidar en su reciente enfrentamiento contra Pachuca, un partido que no solo se tradujo en un resultado negativo, sino que dejó la sensación de que será necesario realizar cambios significativos para revertir la situación. Un primer tiempo contundente para Pachuca Desde el inicio del encuentro, el América sufrió la presión del equipo local, quien mostró una clara superioridad durante los primeros 25 a 30 minutos. Cada acercamiento al área americanista reveló la peligrosidad de las tuzas, que lograron traducir su dominio en el campo al marcador con un par de goles, y un penalti que generó algunas controversias entre los aficionados. Reacción tardía del equipo visitante A pesar de que las águilas intentaron reponerse tras irse al descanso, sus esfuerzos fueron limitados. Aunque hubo intentos de ataque, especialmente por los costados a través de los centros de Gutiérrez y Enciso, la precisión en los pases brilló por su ausencia. Además, las imprecisiones de Nancy Antonio e Irene Guerrero en el mediocampo fueron notorias, afectando gravemente la coherencia del juego americanista. Un complemento sin cambios La segunda mitad del partido no mostró mejora alguna con respecto al primer tiempo. Las águilas continuaron lidiando con errores en los pases, fallas en el control del balón y serias dificultades para generar oportunidades de gol. Sin embargo, el ingreso de Nicki Hernández aportó un soplo de energía y motivación, contrastando con el tono desanimado de sus compañeras. El análisis táctico tras el golpe Dada la cantidad de bajas en el plantel, la situación se complicó aún más con la ausencia de Karen Luna. Durante el partido, Jana Gutiérrez asumió el rol de carrilera por la derecha, mientras Karina, Orejel y Kim actuaron como defensores centrales, poniendo a Enciso en la banda izquierda. En el ataque, Sabrina y Palacios fueron las delanteras, apoyadas en un mediocampo compuesto por Antonio, Guerrero y Guerrero. Cuando comenzó la segunda parte, Orejel avanzó su posición convirtiéndose en mediocampista, mientras que Hernández, Alexa Soto y Natalia Mauleón hicieron su entrada en el campo en busca de revitalizar al equipo. Al final del compromiso, el América permanecía con Jana, Karina, Orejel y Nicki en defensa, mientras que Antonio asumió el rol de volante, colaborando con Soto y Guerrero en el mediocampo, y con Kiana detrás de Mauleón y Camberos. Sin lugar a dudas, el América deberá reevaluar su desempeño y estrategia si pretende destacar en futuros encuentros.
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