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» Elterritorio
Fecha: 04/05/2025 08:15
Un cielo estrellado sin interferencias de la luz urbana es una de esas experiencias que trascienden cualquier descripción. Distintos rincones del mundo ofrecen vistas inigualables del cosmos domingo 04 de mayo de 2025 | 1:00hs. Contemplar un cielo nocturno completamente despejado, donde las estrellas parecen extenderse sin fin, es una de esas experiencias que no necesitan explicación. Ya sea para quienes sienten fascinación por la astronomía, para los amantes de la naturaleza o para los que buscan una escapada romántica, el firmamento ofrece siempre una recompensa. Pero hay una condición ineludible: para verlo en todo su esplendor, hay que alejarse del resplandor de las ciudades. Desde las Islas Canarias hasta Hawái, existen destinos privilegiados para observar las estrellas, y este artículo recorre algunos de los más destacados, además de ofrecer consejos útiles para aprovechar al máximo la experiencia. Las estrellas titilan desde el Observador en el Parque Nacional Zion. Eso sí, conviene tener en cuenta un dato fundamental antes de armar las valijas: si bien hay meses más propicios que otros según el lugar, todos los expertos coinciden en una recomendación clave. El mejor momento para mirar al cielo es durante la luna nueva, cuando la oscuridad es total y el espectáculo estelar alcanza su máxima intensidad. Cordillera de los Andes, Chile En los meses de marzo a mayo o entre septiembre y noviembre, cuando los cielos chilenos muestran su versión más despejada, los Andes se convierten en un mirador privilegiado hacia el universo. A pocos kilómetros de Santiago, la posibilidad de combinar naturaleza agreste y divulgación científica cobra forma en un tour nocturno que lleva a los visitantes a un observatorio privado enclavado en la montaña. Allí, bajo la inmensidad del cielo andino, un grupo de astrónomos guía la experiencia. La propuesta no se limita a observar: comienza con una presentación que sitúa al visitante en el contexto del cosmos visible desde el hemisferio sur, y luego avanza desde la contemplación a simple vista hasta la exploración con binoculares y telescopios de alta potencia. Durante el día, la capital chilena ofrece otras rutas. Desde sus museos hasta escapadas al Cajón del Maipo o a las aguas termales de Valle de Colina, la zona permite equilibrar lo urbano y lo natural. Pero es al anochecer, cuando la luz se retira y el aire de la cordillera se enfría, que la experiencia encuentra su punto más alto: el silencio del altiplano interrumpido por datos, constelaciones y la sospecha de que allá arriba hay más de lo que se alcanza a ver. Parque de la Costa Vicentina Entre junio y septiembre, cuando las lluvias disminuyen y el cielo se mantiene despejado, el sur de Portugal se convierte en un escenario ideal para combinar caminatas costeras, observación de estrellas y exploración histórica. La región del Algarve, en particular, ofrece una variedad de experiencias que van desde paisajes naturales impactantes hasta vestigios medievales y playas de postal. Durante el día, los visitantes pueden recorrer formaciones rocosas esculpidas por el mar en Ponta da Piedade, internarse en cuevas marinas o descansar en playas emblemáticas como Praia da Rocha y Praia Dona Ana. También se destacan los paseos culturales por sitios como el Castillo de Silves, que conserva parte de la herencia islámica de la región. Al anochecer, la costa revela otra de sus facetas: desde los acantilados más altos del litoral portugués, es posible disfrutar del cielo nocturno con escasa contaminación lumínica. Algunos senderos guiados combinan caminatas interpretativas con conocimientos sobre la flora y la historia local, y finalizan en lo alto de un acantilado, donde el silencio solo es interrumpido por el sonido del mar y las estrellas dominan el horizonte. La cercanía a localidades como Lagos o Albufeira permite completar la jornada con una inmersión en la vida nocturna del Algarve, que ofrece opciones para todos los gustos, sin alejarse demasiado del entorno natural que define a esta región atlántica. Parque del Valle de la Muerte En los márgenes extremos de California, el Parque Nacional del Valle de la Muerte ofrece uno de los paisajes más inusuales y sobrecogedores del país. Con temperaturas abrasadoras en verano, el desierto se vuelve más hospitalario durante la primavera y el otoño, cuando el clima moderado permite explorar sus contrastes sin someterse a condiciones extremas. Durante el día, el recorrido puede comenzar en Darwin Falls, un oasis escondido entre las piedras secas, donde el agua fluye todo el año y el verde irrumpe como un espejismo real. Más tarde, la Cuenca Badwater —el punto más bajo de América del Norte— ofrece un espectáculo visual al atardecer, con sus formaciones salinas resplandecientes bajo la luz dorada. A pesar de la afluencia de turistas, el flujo constante de visitantes permite disfrutar de estos sitios sin largas esperas ni aglomeraciones prolongadas. Al caer la noche, las vastas planicies de sal del parque se transforman en una plataforma natural para observar el cielo. Lejos de cualquier fuente de contaminación lumínica, las estrellas parecen multiplicarse. Las salinas, con su superficie blanca y abierta, amplifican la experiencia visual y permiten captar fotografías nocturnas de una claridad inusual. La quietud del desierto, combinada con la inmensidad del firmamento, convierte la jornada en una travesía que comienza entre cascadas y termina bajo un cielo que parece no tener fin. Montañas Azules, Sídney A poco más de una hora de Sídney, las Montañas Azules ofrecen un escenario donde el cielo y la tierra compiten por la atención. Durante el día, los visitantes recorren cañones escarpados, atraviesan senderos entre helechos y cascadas, y se detienen frente a monumentos naturales como las cataratas de Wentworth o la formación rocosa de las Three Sisters. También hay espacio para la exploración subterránea: las cuevas de Jenolan, con sus pasadizos de piedra caliza, revelan otro tipo de profundidad. Pero cuando cae la noche, el protagonismo cambia de lugar. En esta región del hemisferio sur, la observación del cielo nocturno adquiere un carácter pedagógico y contemplativo. Un astrofísico con más de una década de experiencia guía a los observadores a través del cosmos, ayudándoles a identificar constelaciones a simple vista y a utilizar telescopios profesionales para alcanzar más lejos. Según la estación y las condiciones, es posible distinguir los cráteres lunares, los anillos de Saturno o la Nebulosa de Orión, entre otras maravillas. Disponible durante todo el año, esta experiencia convierte a las Montañas Azules en un destino donde el asombro no termina con la puesta del sol. La vastedad del cielo, junto con la precisión científica del guía, transforma una noche cualquiera en una lección de astronomía a cielo abierto. Greater Zion, Estados Unidos Entre los meses de junio y agosto, el cielo del suroeste de Utah se convierte en un escenario privilegiado para observar la Vía Láctea. Las condiciones climáticas estables, la escasa contaminación lumínica y la amplitud del paisaje convierten a esta región en un destino ideal para quienes buscan experiencias astronómicas en contacto con la naturaleza. Uno de los lugares recomendados para esta actividad es el Parque Estatal Sand Hollow, donde al caer el sol, las formaciones de arenisca roja dibujan siluetas contrastadas contra el cielo oscuro. Los recorridos al atardecer atraviesan zonas como la Casa de Picapiedra y Patriot Rock, y concluyen bajo las estrellas, en medio de un entorno agreste y silencioso que favorece la contemplación del firmamento. Además de la observación nocturna, la región ofrece numerosas alternativas para quienes deseen explorar durante el día. El cercano Parque Nacional Zion cuenta con una red de senderos entre los que destaca el Canyon Overlook Trail. Con apenas 1,6 kilómetros de recorrido, es accesible para toda la familia y ofrece vistas panorámicas ideales tanto al amanecer como al atardecer. Incluso, con algo de suerte, es posible avistar borregos cimarrones en las inmediaciones. Es importante tener en cuenta que, durante la temporada alta (de marzo a noviembre), el tránsito vehicular particular está restringido en el Canyon Scenic Drive de Zion. En ese período, solo se puede acceder a través del sistema de transporte del parque, en bicicleta o a pie. Esta regulación busca preservar el entorno natural y mejorar la experiencia de los visitantes. Tips para disfrutar del cielo nocturno Se recomienda descargar aplicaciones especializadas o llevar mapas estelares para facilitar la identificación de estrellas y constelaciones. Estas herramientas permiten una mejor comprensión del cielo nocturno y hacen que localizar sus principales atractivos sea más sencillo. Es importante también revisar los pronósticos meteorológicos y optar por noches con condiciones favorables, a fin de evitar la nubosidad que podría arruinar la experiencia. Dado que las temperaturas pueden descender considerablemente una vez que cae el sol, sin importar la estación, conviene llevar ropa de abrigo y mantas para mantenerse cómodo durante largas sesiones de observación. Para quienes desean capturar el momento, se sugiere llevar una cámara con controles manuales y utilizar un trípode, lo que permite estabilizar la imagen y reducir el desenfoque en las tomas de larga exposición. Finalmente, una buena opción es sumarse a tours guiados por especialistas en observación astronómica. Estos recorridos suelen incluir explicaciones detalladas y el uso de equipos como telescopios, que permiten apreciar el firmamento en toda su magnitud. En cifras $10.519 Wild Bellavista Hostel está en Santiago, a 4 minutos a pie de La Chascona y a 200 metros de Patio Bellavista, y ofrece alojamiento con wifi gratis $38.419 Tacit Shadow Resort Paradise Deluxe Suite, Hot-Tub, Free Laundry, Food Available está ubicado en Parowan, a 33 km de Southern Utah University $14.666 Blife Sun Hostel & Rooms está a 43 km de Centro Comercial Algarve y Estación de tren de Tunes está a 45 km del alojamiento
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