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Federal » El Federaense
Fecha: 26/04/2025 22:01
En una emocionante final de la Copa del Rey que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos, el FC Barcelona se proclamó campeón tras vencer al Real Madrid por 3-2 en un vibrante encuentro celebrado en el Estadio La Cartuja de Sevilla. El héroe del partido fue el defensor francés Jules Koundé, quien, en el minuto 116 de tiempo extra, desató la locura entre los seguidores blaugranas al marcar el gol decisivo. La jugada que llevó al gol de Koundé fue un momento clave del partido: aprovechando un error en el pase de Luka Modric destinado a Brahim Díaz, el defensor cortó el balón, avanzó decidido y con un potente disparo con la derecha venció al arquero Thibaut Courtois, desatando una ola de celebraciones en la grada. Un Clásico Memorable El partido estuvo lleno de emociones, con ambos equipos mostrando su mejor cara. Koundé no solo fue crucial en la acción del gol, sino que también contribuyó en la defensa, manteniendo a raya a las rápidas ofensivas del Real Madrid. Aunque en la segunda mitad tuvo una mayor dificultad ante la velocidad de Vinicius, su desempeño fue estelar, especialmente en los momentos decisivos del tiempo suplementario. Un Equipo Con Energía Renovada Ferran Torres, quien fue igualmente fundamental al anotar el gol del empate en el minuto 84 que forzó la prórroga, también se hizo eco del sentimiento de euforia tras la victoria. En declaraciones para RTVE, comentó sobre la necesidad de disfrutar este triunfo, ya que es un impulso de energía y motivación que servirá al equipo para enfrentar sus próximos compromisos, incluidos los partidos de las semifinales de la Champions League y el cierre de la Liga. “No sé si estamos en una nueva era, pero este título nos recarga con energía y motivación para lo que viene”, afirmó Torres con entusiasmo. La victoria no solo significa un trofeo más en la vitrina del Barcelona, sino que también representa un momento crucial en el contexto más amplio de la temporada, donde cada triunfo cuenta para los desafíos que están por venir.
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