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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 09/04/2025 05:02
El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza El intendente de La Matanza, Fernando Espionza, está cada vez más complicado en la causa por presunto abuso sexual que pesa en su contra. Ahora, la querella que representa a la denunciante, Melody Rakauskas, pidió que el jefe municipal sea detenido a la espera del juicio oral. Espinoza está acusado de los delitos de desobediencia judicial, hostigamiento continuado y abuso sexual. Este miércoles, la defensa solicitó la detención al juez Fernando María Caicedo, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 31, quien ya había procesado al intendente por abuso sexual simple en una decisión tomada el año pasado. En 2024, la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional ratificó su procesamiento por abuso sexual, tras valorar la denuncia presentada por Rakauskas, quien lo acusa de haberla forzado a mantener relaciones sexuales en mayo de 2021. La Sala VII de la Cámara, en su fallo, subrayó la consistencia del relato de la víctima, quien trabajaba en la secretaría privada del municipio de La Matanza en el momento de los hechos. Además de la acusación por abuso sexual, el intendente enfrenta cargos por desobediencia judicial y hostigamiento. La acusación de desobediencia surge del hecho de que, pese a que un tribunal le había prohibido acercarse a Rakauskas o comunicarse con ella, Espinoza intentó influir en la causa a través de un funcionario municipal, quien fue enviado a tratar de desestimar la denuncia. En una llamada telefónica registrada durante la investigación, también el jefe comunal se habría comunicado con la víctima, contraviniendo la orden judicial de distanciamiento. Melody Rakauskas En ese sentido, el abogado de Rakauskas, Marcelo Urra, habló en TN tras la presentación ante el tribunal y relató: “En el día de ayer, se presentó una persona en el domicilio de Melody que dice ser un notificador del juzgado correccional número 3 de La Matanza, para una audiencia de conciliación que es en el día de mañana. El querellante era el apoderado de la municipalidad que depende del intendente” “No tiene nada que ver en la causa. Están generando una denuncia sobre un delito inexistente. Esto es un hostigamiento clarito”, apuntó el letrado. Mientras tanto, se espera que el Tribunal Oral Criminal fije una fecha para el inicio del debate y sortee el juzgado donde se llevará a cabo el proceso. En esta instancia, tanto la querella como la defensa de Espinoza tendrán la oportunidad de exponer sus argumentos y pruebas ante un juez, que deberá decidir sobre la responsabilidad del intendente. “Esta semana debería haber alguna novedad sobre el avance del juicio oral”, señaló Urra. En tanto, criticó el trabajo de la fiscal Mónica Gutiérrez, quien solicitó el sobreseimiento del jefe comunal en la causa. “La Fiscal investigaba a la víctima, no la cuidaba. A Espinoza lo llamó tres veces en tres años. Subía a la causa fotos de cuando Rakaukas era modelo, que no tenía nada que ver”, declaró. Y por último, disparó: “El juez rechazó absolutamente todas las medidas que presentó la defensa. La propia fiscal parecía abogada defensora. Era agraviante lo que hacía. No tengo dudas que Espinoza se metió”. La defensa solicitó la detención de Espinoza al juez Fernando María Caicedo La denuncia contra Espinoza Según el relato de Melody Rakauskas, durante una cena en su casa, Espinoza le pidió un masaje, que ella rechazó. En respuesta, el intendente insistió de manera intimidante, desabrochándose la camisa y afirmando que “no tuviera miedo”. Tras esa intervención, comenzó a quitarse la r opa de manera agresiva, mientras le decía que siempre había deseado estar con ella, siempre de acuerdo con el relato de la víctima. La denuncia también menciona que, en contra de su voluntad, el intendente intentó despojarla de su ropa y llevarla a tener relaciones sexuales. Rakauskas, en su declaración, señaló que intentó resistirse, pero Espinoza logró someterla. Según el relato, cuando el acto culminó, el intendente dijo “ya está, no te preocupes”, minimizando la situación y culpando a la víctima por su falta de cooperación.
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