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» Nova Entre Rios
Fecha: 23/03/2025 19:31
IAFAS: A tender that will earn millions for entrepreneurs, plunging thousands of teenagers into gambling addiction. Los directivos del Instituto de Ayuda Financiera a la Acción Social (IAFAS) volverán a la carga con un tema que genera controversia y preocupación: la implementación de las Terminales de Lotería Virtual (VTL). Estas máquinas, que simulan juegos de casino y permiten apostar de manera digital, podrían desembarcar en la provincia tras la licitación reprogramada para el 31 de marzo. Según rumores, ya existiría un ganador predilecto para adjudicarse este jugoso negocio, lo que despierta sospechas sobre posibles acuerdos bajo la mesa. Con esta medida, el juego llegaría a prácticamente todos los ámbitos sociales, llevando la tentación de las apuestas al alcance de cualquier persona, sin importar su edad o condición económica. Este avance del juego ahora en versión de casino virtual en máquinas de video que se instalarán prácticamente en cualquier parte, no hace más que agravar un problema que ya es alarmante: la adicción a las apuestas, especialmente entre jóvenes y adolescentes. Las VTL no solo facilitarían el acceso al juego, sino que también podrían convertirse en una puerta de entrada para que más personas caigan en conductas compulsivas. Expertos en salud mental y organizaciones sociales han advertido repetidamente sobre los riesgos de normalizar el juego, especialmente en plataformas digitales, donde los controles son más laxos y las posibilidades de supervisión son casi nulas. Un negocio millonario con un costo social incalculable El IAFAS está liderado por Carlos Moyano, presidente del IAFAS que llegó con Vivas y ahora responde al empresario del juego y de los multimedios, Jorge Pérez. El otro conductor del IAFAS es Marcelo Monfort, el director político, ex Diputado Nacional (2015-2019), ex intendente de Villa Elisa. Estos directivos parecen estar más interesados en los beneficios económicos que en las consecuencias sociales de esta invasión de Terminales de Video Lotería. Debido al revuelo social que provocó que se ventile en los medios esta licitación, hace 20 días, el organismo decidió hacer una pausa en este proyecto, que prevee que permitiría la instalación de las primeras 300 máquinas en Agencias Oficiales de Lotería, un número que está contemplado se incremente rápidamente en función de la demanda. Detrás de esta movida se encuentra el empresario Jorge Pérez, mentor de la iniciativa y aliado estratégico de Moyano. Ellos APUESTAN a que la actividad lúdica crecerá exponencialmente, incluso entre aquellos jugadores que ya presentan conductas problemáticas. Lo que preocupa a especialistas y organizaciones sociales es que estas VTL no son simples máquinas de lotería; simulan juegos de casino, lo que podría derivar en una suerte de «EL CASINO EN TU BARRIO». Esta expansión descontrolada del juego no solo aumentaría el número de personas afectadas por la ludopatía, sino que también profundizaría los daños en las familias y comunidades. La adicción al juego no es un problema individual; es una enfermedad que destruye vidas, arruina economías domésticas y genera conflictos en el entorno cercano de quienes la padecen. Voces en contra y la indiferencia del IAFAS. Desde distintos sectores, se han alzado voces críticas contra esta medida. Legisladores, políticos, funcionarios y organizaciones civiles han presentado proyectos y campañas para prevenir y concientizar sobre los riesgos del juego. Incluso el Gobierno de Entre Ríos ha señalado el aumento preocupante de casos relacionados con la adicción a las apuestas. Sin embargo, estas advertencias parecen caer en oídos sordos. Para el IAFAS, el impacto social negativo parece ser un tema secundario, a pesar de que su misión institucional es, precisamente, la ayuda social. Carlos Moyano y Marcelo Monfort, los que están al frente del IAFAS, estarían facilitando un negocio millonario para la empresa Bolt, que se encargaría de proveer las VTL. Según denuncias, esta decisión habría sido impulsada por Jorge Pérez, quien, a cambio, recibiría «millones de agradecimientos» por parte de la empresa. Esta trama de intereses económicos deja en evidencia cómo, en nombre del progreso y la modernización, se están priorizando ganancias financieras sobre el bienestar de la población. El juego: un problema que no puede ignorarse La implementación de las VTL no es solo una cuestión de negocios; es un tema de salud pública. La ludopatía ya es uno de los principales problemas entre jóvenes y adolescentes, y su expansión podría tener consecuencias devastadoras. Cada vez son más los jugadores patológicos que, arrastrados por su adicción, arruinan no solo sus vidas, sino también las de sus familias y seres queridos. El acceso fácil y masivo al juego, especialmente en formatos digitales, solo agravará esta situación. Mientras el IAFAS y sus aliados apuestan a un futuro lleno de ganancias, la sociedad se enfrenta a un panorama desolador. La pregunta que queda en el aire es: ¿hasta qué punto estamos dispuestos a sacrificar el bienestar colectivo en nombre del progreso económico? Las VTL pueden ser un negocio redondo para unos pocos, pero su costo social será pagado por muchos. Entre las voces que se han levantado en contra para objetar este proyecto del IAFAS está la Federación Nacional de Hipódromos, Entretenimiento, Esparcimiento, Juegos de Azar y Ocio de la República Argentina (FEJARA), representada por su Secretario General Ariel Fassione, que expresa su preocupación y oposición a la Licitación N° 1/2025 del IAFAS, que busca implementar Terminales de Video Lotería (VLT). FEJARA argumenta que las VLT tendrían un impacto negativo en tres aspectos clave: Acceso irrestricto al juego: Facilitaría el juego a personas de todas las edades y recursos, fomentando la ludopatía sin controles adecuados. Competencia desleal: Afectaría a las salas de juego autorizadas y reguladas por el Instituto de Lotería. Pérdida de empleos: Pondría en riesgo las fuentes de trabajo de los empleados del sector, ya que el crecimiento del juego digital reduciría la demanda del juego presencial, que genera más puestos laborales. Además, FEJARA señala que esta medida contradice las campañas de prevención de la ludopatía y desatiende los graves problemas que el juego compulsivo ya causa en jóvenes y adultos. Por ello, solicitan una reunión urgente con el presidente del IAFAS, Dr. Carlos A. Moyano, para discutir las consecuencias negativas de la licitación y buscar soluciones inmediatas. El pasado 28 de febrero, el Instituto Autárquico de Fomento y Asistencia Social (IAFAS) tomó una decisión que despertó suspicacias y alimentó rumores en los pasillos del poder: la suspensión temporal de la licitación N° 1/2025. Sin embargo, según fuentes cercanas al proceso, esta pausa no sería más que un mero paréntesis en una operación que estaría programada para concretarse el próximo 31 de marzo, en un acto que muchos califican de opaco y discreto, diseñado para beneficiar a intereses particulares. En el centro de esta trama se encuentra Carlos Moyano, presidente del IAFAS, quien habría desempeñado un papel clave en la facilitación de esta maniobra. Junto a Marcelo Monfort, Director Político del organismo, Moyano habría firmado los documentos que buscan ampliar de manera exponencial el acceso al juego en la provincia, una medida que contrasta con los esfuerzos de legisladores y organizaciones que luchan contra la creciente ola de ludopatía. El pliego de la licitación, según revelaron fuentes internas, habría sido redactado en colaboración con un técnico administrativo y el CEO de la empresa Boldt, una compañía especializada en tecnología para juegos de azar. El objetivo inicial del proceso era adjudicar la concesión de al menos 300 máquinas de video lotería (VLT), dispositivos que ya están bajo la órbita de Boldt a través de un contrato vigente con el IAFAS. Dicho acuerdo le permite a la empresa obtener un 6% de cada apuesta realizada, un porcentaje que comparte con los agencieros, quienes además deben asumir costos operativos adicionales. La suspensión de la licitación a fines de febrero no habría sido más que una estrategia para evitar el escrutinio público y mediático. Sin embargo, la fecha del 31 de marzo aparece en el horizonte como el momento en que se sellaría este acuerdo, lejos de los reflectores y en un ambiente de discreción que ha generado más preguntas que respuestas. Jorge Pérez: El «Zar del Juego» y su Influencia en el IAFAS. Detrás de esta operación se encuentra la figura de Jorge Pérez, conocido en el ámbito como el «zar del juego». Pérez, un empresario con amplios intereses en el sector, habría estado trabajando en las sombras para asegurar que Boldt sea la gran beneficiaria de esta licitación. Según versiones, su influencia dentro del IAFAS sería tal que le permitiría recibir «millones de agradecimientos» por parte de la empresa, en un claro ejemplo de cómo los intereses privados se entrelazan con las decisiones públicas. Las máquinas de video lotería, inicialmente destinadas a instalarse en las Agencias Oficiales de Lotería y Quiniela de Entre Ríos, podrían extenderse a otros establecimientos como supermercados, estaciones de servicio, clubes y centros comerciales. Esta expansión no solo aumentaría los ingresos del IAFAS, sino que también garantizaría jugosas ganancias para la empresa adjudicataria, en este caso, Boldt. La Paradoja del IAFAS: Fomento del Juego vs. Prevención de la Ludopatía. Lo más preocupante de esta situación es que el IAFAS, un organismo que en teoría debería velar por el bienestar social, parece estar priorizando los intereses económicos sobre la salud pública. En un contexto donde la ludopatía se ha convertido en un flagelo que afecta a miles de personas, la decisión de expandir el acceso al juego resulta, cuanto menos, contradictoria. Mientras el gobierno provincial y diputados oficialistas impulsan campañas de concientización y prevención de la adicción al juego, el IAFAS parece ir en dirección contraria. Aunque cuenta con un Departamento de Juego Responsable, este se mantiene en un segundo plano, casi invisible, lo que sugiere que los directivos del organismo no están interesados en promover medidas que puedan afectar sus ingresos. La Respuesta de los Legisladores. Ante esta situación, varios diputados han alzado la voz para exigir explicaciones. Lorena Arrozogaray, junto a otros legisladores, presentó un pedido de informes al gobierno provincial para que aclare los detalles de esta licitación. Entre las preguntas planteadas se encuentran: ¿en qué lugares se permitiría la instalación de estas máquinas? ¿Qué medidas se tomarán para evitar que menores de edad accedan a los juegos de azar? ¿Cómo se controlará el impacto social de esta expansión? Los legisladores han expresado su preocupación por el posible aumento de la oferta de apuestas y su efecto en la población más vulnerable. «El Estado debería ser el garante de la protección de los ciudadanos, no el facilitador de prácticas que pueden generar adicción y problemas sociales», señaló uno de los diputados que respaldó el pedido de informes. Con la fecha del 31 de marzo marcada en el calendario, la licitación del IAFAS se perfila como un punto de inflexión en la industria del juego en la provincia. La instalación de máquinas de video lotería no solo representa un salto cuantitativo en la oferta de apuestas, sino que también plantea un dilema ético: ¿hasta qué punto el Estado está dispuesto a sacrificar el bienestar de sus ciudadanos en aras de los beneficios económicos? Mientras tanto, las campañas de prevención de la ludopatía impulsadas por el gobierno provincial parecen quedar en un segundo plano, eclipsadas por los intereses de quienes buscan sacar provecho de esta expansión del juego. La pregunta que queda en el aire es si, en el futuro, el IAFAS podrá reconciliar su rol social con las presiones económicas que hoy parecen dominar su agenda. Fuente: El Portal de Ricardo David.
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