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Concepcion del Uruguay » Miercoles Digital
Fecha: 22/03/2025 19:02
El telgopor, un material derivado del petróleo de uso único, se recicla y mezcla con otros materiales para mejorar la eficiencia energética en la construcción. Al reducir la transferencia de calor y sonido, contribuye a edificaciones más sostenibles. En la ciudad santafesina de Esperanza, un grupo de trabajadores decidió dar respuesta a uno de los problemas ambientales más ignorados: el reciclaje del telgopor. Este material, derivado del plástico, se encuentra en una variedad de productos cotidianos, desde recipientes hasta elementos de embalaje. La presencia del telgopor en los basurales y la contaminación ambiental que genera es alarmante. Con la visión de cambiar esta realidad, con la conformación de la Cooperativa de Trabajo La Roca Ltda. decidieron buscar formas de transformar el material en recursos útiles para la sociedad. “Desde hace cuatro años, asumimos el desafío de trabajar con telgopor, un material que no estaba siendo considerado dentro del reciclaje habitual”, comentó Gilberto Robledo. Este material, a menudo descartado a cielo abierto, es un derivado del plástico, y su reciclaje no es prioridad. La mayoría de los esfuerzos de reciclaje se han enfocado en otros materiales, pero el telgopor permanecía fuera de este ciclo, hasta que decidieron intervenir. El equipo comenzó su labor con un proceso simple pero efectivo: la molienda. El resultado, un material triturado, se utiliza en la construcción de losas de hormigón, agregando aislamiento térmico y acústico. “Lo que logramos fue ofrecer un producto que no solo mejora la calidad de las construcciones, sino que también reduce el consumo energético en las viviendas”, explicó el trabajador, destacando que este proceso ya está disponible en el mercado local y regional. El siguiente paso fue abrir un laboratorio para desarrollar nuevos productos a partir del telgopor. En este espacio, han desarrollado revestimientos y pinturas, los cuales están a punto de ser lanzados. “La innovación es clave para que este material recupere su valor dentro de la industria de la construcción. Queremos seguir avanzando en la creación de soluciones que permitan aprovechar al máximo lo que la sociedad está desechando”. Los desafíos no han sido pocos. El principal obstáculo al que se enfrentan es la falta de una recolección sistemática de este material. Aunque en algunas localidades se han instalado puntos específicos para dejar el telgopor, en otras dependen de la recolección urbana. Sin embargo, el equipo ha logrado crear incentivos para que los vecinos participen del proceso. “Lo trabajamos según cada municipio, y en muchas localidades, pagamos por el material que recolectan los trabajadores urbanos. Esto les permite generar ingresos diarios y contribuye a la dignificación de su labor”, explicó el cooperativista. Además de la recolección y transformación, el equipo tiene una misión clara: generar conciencia ecológica en la comunidad. “Sin la colaboración de los vecinos, nuestro trabajo no sería posible. La gente tiene que separar el telgopor en sus hogares y darnos la oportunidad de transformarlo”, destacó Robledo. Fuente: Elaboración de El Portal de las Cooperativas a partir de entrevista realizada en programa Entre amigos, en AgenHoy Radio (Florencio Varela, Buenos Aires). Esta nota es posible gracias al aporte de nuestros lectores Sumate a la comunidad El Miércoles mediante un aporte económico mensual para que podamos seguir haciendo periodismo libre, cooperativo, sin condicionantes y autogestivo. Deja tu comentario comentarios
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