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La Paz » Politica con vos
Fecha: 21/03/2025 09:07
Empresarios del sector textil y del calzado alertaron sobre el impacto de la reducción de aranceles a las importaciones. Organizaciones empresariales de la provincia de Buenos Aires manifestaron su preocupación ante la reciente baja de aranceles a la importación de productos textiles, calzado e indumentaria. Advierten que esta medida puede generar la pérdida de hasta 50 mil empleos adicionales en un sector que ya sufrió la desaparición de más de 10 mil puestos de trabajo en el último año. La Asociación de Industriales de la Provincia de Buenos Aires (ADIBA), la Confederación Económica de la Provincia de Buenos Aires (CEPBA), la Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (FEBA) y la Unión Industrial de la Provincia de Buenos Aires (UIPBA) coincidieron en señalar que la apertura comercial no se encuentra acompañada de políticas que fortalezcan la competitividad de la industria nacional. Despidos y riesgo de mayor desempleo Según los empresarios, el sector textil y del calzado se encuentra entre los principales empleadores de la provincia de Buenos Aires y de otras regiones como Catamarca, CABA, Santiago del Estero y Tucumán. En este contexto, indicaron que «de los 30 mil empleos industriales perdidos durante el último año, más de 10 mil corresponden a esa cadena». Asimismo, advirtieron que si no se toman medidas para equilibrar la competencia con los productos importados, la pérdida de empleo podría alcanzar los 50 mil puestos en los próximos meses. Competencia desleal y costos desproporcionados Las entidades empresariales señalaron que la industria enfrenta serias dificultades para competir en igualdad de condiciones con las importaciones. Indicaron que, debido a la carga fiscal, la falta de financiamiento y la informalidad, «la competencia frente a las importaciones de bienes finales, especialmente de algunos países, se torna claramente desigual y desleal». Además, alertaron que el contrabando y la falsificación de productos afectan gravemente al sector. Un informe del CEU-UIA reveló que «un 33% de las empresas relevadas afirmaron que el contrabando las afectaba negativamente, llegando al 80% en el caso de las empresas del sector calzado e indumentaria». Dudas sobre la reducción de precios El gobierno justificó la reducción de aranceles en la necesidad de frenar el aumento de precios en indumentaria y calzado. Sin embargo, los empresarios del sector afirman que sus incrementos fueron inferiores a la inflación. «Durante los últimos seis meses, los sectores afectados han registrado aumentos por debajo de la inflación general», aseguraron. Además, detallaron que «en enero, el rubro textil registró un aumento de precios del 0,6% mientras que la indumentaria de producción textil aumentó un 1%». En febrero, el incremento en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) para prendas de vestir y calzado fue del 0,4%. Reclamos del sector industrial Las organizaciones empresariales pidieron medidas urgentes para evitar una crisis mayor en la industria. Insisten en la necesidad de una estrategia que combine apertura comercial con políticas de competitividad para la producción nacional. Asimismo, solicitaron la reducción de impuestos a nivel nacional, provincial y municipal para mitigar el impacto de la crisis y evitar un mayor deterioro del empleo en el sector textil y del calzado.
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